La tecnología plasma y LCD, además de mejorar la imagen que ofrecen por dentro, no ha descuidado en ningún momento el aspecto exterior, y así, a diseños muy cuidados se une la búsqueda de pantallas más delgadas y de menor peso.
En éste último aspecto es donde ha puesto el esfuerzo Sharp con su modelo AQUOS D64U, que presume de un grosor un 25 % menor y un peso con hasta un 20% de reducción.
Los nuevos televisores tienen tamaños de 42, 46 y 52 pulgadas, que es donde realmente se agradece el que el peso y grosor se vean reducidos.
Todos los modelos son 1080p y tienen un contraste de 1.000:1, con ángulo de visión de 176 grados y tiempo de respuesta de 4 ms.
En cuanto a conectividad, nos encontramos en esta nueva serie con tres puertos HDMI 1.3. y sonido 7.1. Además, si lo conectamos con otros equipos podemos controlar todo desde un único dispositivo gracias a que soporta CEC.
Los precios irán desde los 2.100 a los casi 4.000 dólares.
Vía | Akihabaranews.
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