Los órganos de directivos de UGT, CEOE y Cepyme dieron este lunes 8 de mayo su visto bueno al nuevo Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC). El documento, que previsiblemente será ratificado por CCOO este martes 9 de mayo, incluye la subida salarial acordada recientemente entre los sindicatos mayoritarios y la patronal, según la cual se recomienda a las empresas subir los salarios un 4% en 2023, un 3% en 2024 y un 3% en 2025. Adicionalmente se incluye una cláusula de revisión con alzas del 1% adicional, en caso de que la inflación supere estas subidas, aplicable al año siguiente.
Un punto de partida. Según UGT, este acuerdo constituye un “punto de partida que permitirá un reparto de riqueza más equitativo” que cuenta con la participación de “todos los trabajadores y trabajadoras de nuestro país”. Por su parte, Miguel Garrido, vicepresidente primero de la CEOE, considera que se trata de un acuerdo “muy razonable que va a suponer un periodo de estabilidad y de confianza”, según declaraciones recogidas por RTVE.
Numerosas sugerencias. Además de la recomendación de subir los salarios un 10% a partir de este año hasta 2025, el documento trata otras cuestiones relevantes. Según ha informado El País, el nuevo AENC realiza otras recomendaciones y sugerencias en su informe de 32 páginas sobre temas como, entre otros, el teletrabajo, la IA y la conciliación laboral.
Trabajo desde casa y regulado. El documento elabora una serie de recomendaciones en materia de trabajo a distancia, instando a las compañías y los comités de empresa a precisar los puestos de trabajo o funciones que pueden ser realizados mediante teletrabajo. Asimismo, el texto sugiere que se establezca una jornada mínima presencial, una duración máxima del tiempo permitido para trabajar en casa y un porcentaje de referencia.
Derechos garantizados. Por otro lado, el acuerdo recomienda el establecimiento de mecanismos por parte de la empresa para sufragar el coste del teletrabajo, instando a las firmas a garantizar los derechos colectivos de los teletrabajadores. Es una sugerencia que se realiza en un momento en el que el teletrabajo está en retroceso en España: según los últimos datos del INE, el porcentaje de ocupados de 16 a 74 años que teletrabajaron en 2022 fue del 14% frente al 17,6% de 2021.
Desconexión 2.0. Paralelamente, el documento establece una serie de pautas para garantizar la desconexión digital, señalando que los trabajadores no estarán obligados a responder “si se produce cualquier tipo de llamada o comunicado fuera de la jornada laboral”. Asimismo, el texto indica que “los superiores jerárquicos” no podrán requerir una respuesta fuera del horario de trabajo “salvo que concurran circunstancias excepcionales de fuerza mayor”.
Adicionalmente, el texto señala que las firmas garantizarán que ningún trabajador sea perjudicado, mediante un trato diferenciado o sanción, por hacer “uso de este derecho”.
Controlar la IA. Otro ámbito tratado en el Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva es la Inteligencia Artificial. El texto acordado por los agentes sociales señala que “el despliegue de sistemas de IA en las empresas deberá seguir el principio de control humano respecto a la IA y ser seguro y transparente”.
Información clara. Paralelamente, el acuerdo recomienda a las compañías a facilitar a sus comités “información transparente y entendible” sobre los mecanismos basados en Inteligencia Artificial utilizados en procesos de recursos humanos, garantizando que no existirán “prejuicios ni discriminaciones”.
Garantizar procesos de selección justos. De esta forma se pretende eliminar los sesgos de los procesos de selección que emplean Inteligencia Artificial, por ejemplo, malinterpretando la raza y el género como “atributos aislables”, afectando a la paridad y la diversidad de la selección de los candidatos.
Los agentes sociales están atentos. Este punto es importante, ya que a nivel mundial existe el temor de que la IA pueda dejar sin trabajo a muchos profesionales. En este sentido, Goldman Sachs publicó el pasado 26 de marzo un estudio que señalaba que 300 millones de empleos en todo el mundo podrían ser automatizados gracias a la IA. De hecho, en nuestro país, Domestika, que anunció el pasado mes de abril el despido de 89 personas (el 45% de la plantilla), utilizará aplicaciones de IA para realizar labores como la traducción. Concretamente, 22 trabajadores de este departamento serán sustituidos por la IA.
Igualdad y conciliación laboral. Adicionalmente, el texto recomienda a las empresas “establecer medidas que favorezcan la contratación de mujeres”, sugiriendo una regulación de criterios para la promociones basada en la cualificación y la capacidad, con el objetivo de que evitar la discriminación indirecta. Asimismo, el acuerdo sugiere la creación de medidas que proporcionen “flexibilidad interna” para facilitar la conciliación. En este sentido, sindicatos y patronales creen que es “imprescindible” establecer “fórmulas flexibles de ordenación del tiempo de trabajo”.
Un acuerdo para los próximos años. Si bien no todo el mundo está contento con este pacto, como CSIF, el nuevo AENC recoge algunos de los principales elementos que determinarán el futuro de las relaciones laborales del futuro en nuestro país. La demanda de flexibilidad de tiempo y lugar de trabajo por parte de los trabajadores o el impacto de la IA en los procesos productivos se encuentran en un texto que, además de recomendar los salarios un 10% a partir de este año hasta 2025, será la base para futuras negociaciones entre sindicatos y patronales.
Imagen: Víctor J Blanco/GTRES /Unsplash
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