El pasado fin de semana Israel y Estados Unidos acogieron dos tipos de manifestaciones muy diferentes. Mientras en Tel Aviv los ciudadanos salieron a protestar manteniendo estrictamente un metro y medio de distancia, los estadounidenses se manifestaron contra el aislamiento social desprotegidos de guantes y mascarillas. Ahora, un colectivo catalán enmarcado en el movimiento #StopConfinamientoEspaña también convoca su propia protesta en las calles, en mitad del Estado de Alarma.
Barcelona es el escenario elegido Moviment Cívic 12 d'Octubre, el colectivo que ha convocado la primera manifestación anticonfinamiento de España para el próximo 7 de mayo. La protesta tendrá lugar en la Plaza Urquinaona y, según sus organizadores, su convocatoria responde a fines no partidistas, por lo que invitan a sindicatos, asociaciones y partidos políticos a sumarse.
Sin embargo, el mero hecho de que exista esta convocatoria no es sinónimo de que vaya a celebrarse. Como cualquier otra manifestación necesita ser comunicada previamente a las autoridades correspondientes y sin esta luz verde no podrá celebrarse. En el caso de que los manifestantes la llevasen a cabo igualmente, podrían enfrentarse a las sanciones recogidas dentro del Estado de Alarma y que van desde un mínimo de 600 euros a un máximo de 60.000.
Motivos. Tras más de cuarenta días confinados, las críticas por las medidas de confinamiento y la prorroga del Estado de Alarma han comenzado a incrementarse. Y estas son precisamente las razones a las que se acogen los organizadores de la protesta del próximo siete de mayo. Según recoge Voz Populi, la manifestación pretende reivindicar las libertades y derechos fundamentales que han sido suspendidos con motivo del Estado de Alarma.
Sin embargo, esta convocatoria podría no ser la única. Redes sociales como Twitter y Facebook y sites como Forocoches aglutinan esta intención bajo el hashtag #StopConfinamientoEspaña que, entre otros, está siendo alentada por el médico influencer Spiriman.
Nuevos estallidos. El fin de semana pasado, a lo largo y ancho de Estados Unidos, varios estados acogieron una serie de manifestaciones donde centenares de personas mostraban su rechazo a las medidas de confinamiento. A pesar de que el país supera los 50.000 muertos y se acerca al millón de contagiados (890.000 actualmente), este tipo de colectivos se caracterizan no solo por saltarse el confinamiento recomendado, sino también por no mantener las medidas de distanciamiento ni utilizar guantes o mascarillas.
En la misma línea que Estados Unidos, otros países como Perú o la India también han protagonizado protestas en contra de las medidas de confinamiento. Cientos de peruanos trataron obviar las medidas de confinamiento para abandonar Lima y volver a las zonas rurales del país.
One of the leaders of the anti-shutdown protest in Michigan today pulled up in his Trump truck to say:
— Read Abolish Rent (@JPHilllllll) April 15, 2020
“We want to let fisherman fish, we want to let farmers farm.”
Industries that are not currently shut down.#OperationGridlock pic.twitter.com/h6KuECpv2T
Distancia social. Cientos de ciudadanos de Tel Aviv se manifestaron hace una semana contra el gobierno de Benjamin Netanyahu. Sin embargo, a diferencia de las protestas estadounidenses, lo hicieron manteniendo de forma estricta la distancia social recomendada y protegidos con guantes y mascarillas. Un ejemplo que puede servir para que nos hagamos una idea de cómo podrán ser las aglomeraciones en el medio plazo.
De forma similar, los libaneses se subieron a sus coches para retomar las protestas contra la corrupción de la clase dirigente, pero esta vez tratando de mantener la distancia física entre ellos.
En pausa. Movimientos ciudadanos como el iniciado en Hong Kong hace poco menos de un año se mantienen alejados de las calles por motivo del coronavirus. Sin embargo, algunos de sus organizadores continúan comprometidos a la hora de trasladar su mensaje por canales alternativos como el videojuego Animal Crossing. A pesar de que siguen trabajando en nuevas protestas, por el momento éstas se mantienen en stand by hasta que puedan volver a las calles.
Por su parte, el movimiento chileno que comenzó a pedir a pie de calle una mayor protección social el pasado mes de octubre, ahora continúa ejerciendo su derecho de protesta proyectando imágenes de aquellos momentos en las diferentes fachadas de la ciudad y con el objetivo de mantener vivo el espíritu.
Imagen: Robert F. Bukaty/AP