Llevamos años cultivando lechugas en el espacio. Ahora hemos descubierto que son más propensas a enfermarnos

  • Las verduras que se cultivan en microgravedad no pueden defenderse bien de la Salmonella

  • Las bacterias amigas pierden además su efecto protector en el espacio

Lechuga cultivada en el Centro Espacial Houston de la NASA
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Malas noticias para los astronautas que suelen comer sano. Es decir, para todos los astronautas. Hace ya tres años que los tripulantes de la Estación Espacial Internacional consumen las verduras que ellos mismos cultivan en microgravedad: lechuga, pimientos, rábanos. Algún chile picante.

Más recientemente, se han sumado al autoconsumo de vegetales los astronautas de la estación espacial china, que ya tiene lechuga, tomates cherry y cebollín, a pesar de que no lleva tanto en órbita. El problema es que las ensaladas espaciales no son tan seguras para su consumo como pensábamos.

Un equipo de investigadores de la Universidad de Delaware ha descubierto que la lechuga y los demás vegetales cultivados en microgravedad son más propensos a la contaminación por bacterias como la Salmonella.

El estudio, financiado por la NASA, muestra que bajo condiciones de microgravedad, las plantas tienden a abrir más sus estomas (los pequeños poros de sus hojas y tallos) en vez de cerrarlos para impedir la invasión de patógenos.

Para llegar a esta conclusión, el equipo creó un ambiente simulado de microgravedad en el laboratorio con un dispositivo llamado clinostato, que gira las plantas como un pollo en un asador. Los resultados mostraron que, bajo estas condiciones, la Salmonella infecta más fácilmente el tejido de las hojas.

Las bacterias amigas pierden además su efecto protector

Los investigadores exploraron el uso de una bacteria amiga, B. subtilis, como solución al problema. Sin embargo, la bacteria, que en la Tierra ayuda a las plantas a combatir patógenos, no logró protegerlas en el entorno simulado de microgravedad, lo que sugiere que el espacio cambia significativamente la interacción entre plantas y microbios.

El hallazgo es importante. No solo porque pone en duda que las ensaladas de la Estación Espacial Internacional sean totalmente seguras, sino también porque ayuda a comprender los desafíos de la agricultura en futuras colonias espaciales.

Con el crecimiento poblacional en la Tierra y la pérdida de terrenos agrícolas, el espacio es una opción cada vez más realista para el cultivo de alimentos. Pero si quieren evitar un brote de salmonelosis, más les vale a los futuros agricultores del espacio lavarse bien las manos con agua y jabón.

Imagen | NASA/Cory Huston

En Xataka |  Los astronautas de la NASA van a comer hoy su primera lechuga salida de una huerta en el espacio

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