Las cerraduras inteligentes cada vez son más comunes y Securitas Direct hoy anuncia que también quiere aprovechar esta tendencia. La compañía de seguridad presenta la primera alarma con cerradura inteligente, que combina los servicios de emergencia junto a un sistema para la puerta que permitirá que se pueda abrir en remoto.
Nos encontramos ante una cerradura con cilindro antirrobo certificado SKG***, sistema Autolock que cierra la puerta de manera programada cuando el usuario sale de casa o a determinada hora y un sistema de apertura en remoto. ¿Para qué? Según explica la compañía, para que "la Policía, la asistencia sanitaria o los bomberos puedan acceder sin demora".
La alarma está conectada con la central de Securitas Direct y estos, en caso de detectar una intrusión, podrán permitir la entrada a las autoridades. La alarma cuenta con detección de manipulación y asegura enviar una alerta en menos de 20 segundos a la Policía en caso de intrusión.
Según explica la empresa de seguridad, para integrar la cerradura en la suite de alarmas se han necesitado tres años de trabajo y han colaborado más de 200 ingenieros de los centros de Madrid, Ginebra y Mälmo.
Al tratarse de una cerradura inteligente podrá gestionarse desde el móvil, a través de la aplicación My Verisure. El usuario podrá desbloquear la puerta en remoto, sin necesidad de llaves. Todo sea dicho, además del móvil también es utilizable manualmente, por lo que la persona podrá cerrar con llaves por fuera y por dentro.
El auge de las cerraduras inteligentes no está exento de riesgos. Como dispositivos electrónicos, estas se han convertido en un nuevo vector de ataque de los ciberdelincuentes. La apertura en remoto ofrece facilidades y comodidades, pero también abre una nueva vía para los atacantes. Para hacer frente a esto, según asegura la empresa, la cerradura es indetectable por fuera y las comunicaciones están encriptadas y son a prueba de cortes de luz, sabotajes e inhibición.
Según datos de la propia Securitas Direct, el número de pisos con su alarma en España se ha triplicado en los últimos cinco años, alcanzando los 740.000 en 2023. Según datos de la Asociación Profesional de Compañías Privadas de Servicios de Seguridad (Aproser), en total en España existen unos 2,8 millones de pisos y negocios con alarmas. Un auge de este tipo de dispositivos que no se justifica por un aumento de la criminalidad en los domicilios.
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