Hace unas pocas décadas era relativamente habitual que los alumnos de instituto, sobre todo a final de curso, diesen falsos avisos de bomba en sus centros para que el colegio fuese desalojado y así echarse unas risas o evitar un examen. Era la época en la que estas amenazas tenían como contexto una ETA que asesinaba a decenas de personas al año, a menudo con explosivos, así que la seriedad con la que se trataban estas amenazas era mayor. Era tan habitual que hasta una canción de Attaque 77 publicada en 1992 hablaba de ello.
Está habiendo cierto repunte de este tipo de amenazas en centros escolares. Hace cuatro semanas en un instituto de Toledo se recibió el aviso de que había un artefacto explosivo bajo la mesa de un profesor. Resultó ser la broma de un alumno porque "estaban de exámenes".
Esta misma semana, en Rincón de Soto (La Rioja), otro colegio recibió otro aviso de bomba a través de una llamada al 112. La Guardia Civil se desplazó hasta allí junto a las unidades de Seguridad Ciudadana, el Servicio de Información y el Grupo Especialista en Desactivación de Explosivos, así como las unidades caninas entrenadas para detectar dichos explosivos.
Casi cien personas entre alumnos, profesores y personal fueron desalojadas y se hizo un reconocimiento por todo el centro hasta descartar la presencia de bomba alguna. En ese caso, la llamada la hizo una joven de 14 años utilizando un distorsionador de voz.
En el mismo día, otro instituto de La Vila Joiosa (Alicante) recibió un aviso similar, con idénticas consecuencias en forma de actuación de la Guardia Civil hasta descartar que hubiese ningún explosivo. Justo ese día y a esas horas había programado un examen que terminó siendo suspendido y aplazado.
Un profesor tenía sospechas de que esta broma pudiese partir de un reto en TikTok. Uno del instituto del caso alicantino, que también es concejal de Educación, según Onda Cero. Algo fundado en vídeos como el del usuario de TikTok 'izanoviedo', que explica que tras hablar de este tipo de prácticas empezó a recibir mensajes de usuarios que las habían hecho en sus centros.
No solo ha sido cosa de adolescentes. Una semana antes, otro instituto canario recibió el mismo aviso, con el mismo procedimiento por parte de las autoridades: desalojo y mañana perdida. Y en estos mismos días, dos hombres fueron detenidos en Murcia por dar otro falso aviso de bomba, al igual que otro individuo que hizo lo propio en el aeropuerto de Tenerife Norte. En ambos casos, mayores de edad en entornos no-escolares simplemente por armar revuelo.
Un Guardia Civil de La Rioja, la autonomía donde tuvo lugar una de las llamadas, explicó al programa de laSexta 'Más Vale Tarde' que hacía "muchos años" que no recibían uno de estos falsos avisos de bomba, y que la Ley de Protección Civil prevé sanciones desde los 100.001 hasta los dos millones de euros para los infractores.
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Imagen destacada | Javier Lacort con Midjourney.
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