Los viajes en el tiempo son un tema que a menudo está restringido dentro de los márgenes de la ciencia ficción (o la comedia romántica, si nos movemos en la subvariante de los bucles infinitos y existenciales), pero sus mecánicas tienen un potencial único para los thrillers, la acción y el suspense. Por ejemplo: cómo cambiaría la lucha contra el crimen si las fuerzas del orden pudieran controlar el devenir del tiempo.
Eso es lo que plantea 'Dejá Vù (Cambiando el pasado)', una producción de 2006 que puedes ver en Disney+ y en la que un agente interpretado por Denzel Washington descubre que una explosión en un ferry de Nueva Orleans es obra de un terrorista. Su perspicacia le hace entrar en contacto con un equipo de investigación que tiene una máquina que permite manipular el tiempo para viajar al pasado e impedir que vuelva a tener lugar la explosión.
'Dejá Vù' está dirigida por Tony Scott, que antes de su muerte en 2012 rodó en el tramo final de su carreras unas cuantas películas (muchas de ellas protagonizadas por Washinton) que rubricaron un estilo único de rodar acción y suspense: la brutal 'El fuego de la venganza', la inclasificable 'Dominó', la trepidante 'Asalto al tren Pelham 1 2 3' y la divertidísima 'Imparable'. Pero la más extraña y especial de todas es esta trastada de viajes en el tiempo antiterroristas.
Con el brío único que Tony Scott daba a sus películas gracias a su visionario concepto de la edición y la planificación, este thriller se convierte e un peculiar experimento lleno de giros argumentales y sorpresas constantes. Su visión de los viajes en el tiempo tiene más que ver con la obsesión por la vigilancia que Scott ya desarrolló en 'Enemigo público', pero aún así, contó con asesoría científica para que los agujeros de gusano que salen en el film fueran consistentes y tuvieran sentido.
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