Tesla Motors presentó resultados con algunos números muy interesantes a resaltar, y una prioridad - u obsesión - flotando en el ambiente: cumplir con las metas de producción que tienen para finales de año. El dato económico más llamativo son las pérdidas registradas en el último trimestre, algo que por otra parte era esperado por la industria.
Si nos vamos al cuarto trimestre del año 2015, podemos recordar que Elon Musk prometió que su compañía de coches eléctricos iba a ser rentable antes de llegar al verano de 2016. Eso no ha ocurrido, los citados problemas de producción son los que le traen por la calle de la amargura y terminan afectando a las cuentas.
Tesla Motors no está contenta con esto pero también asegura que en las últimas cuatro semanas del trimestre analizado la maquinaria se ha puesto a tope, creando 2.000 vehículos por semana, y eso es algo que se notará en próximas cuentas.
293 millones en pérdidas
No creo que hubiera nadie en Wall Street esperando beneficios, y lo que ocurrió lo resumimos en 293,2 millones de dólares en pérdidas, que es el doble de lo esperado por algunos analistas. Los ingresos en el trimestre se marcharon a 1.270 millones de dólares. Todo esto tuvo una pequeña repercusión en el valor de las acciones, que cayeron algo menos de un 1%.
La compañía ha recogido mucho dinero en caja, tanto como 150 millones de dólares, principalmente por los depósitos que han recibido del Model 3: 400.000 reservas a 1.000 dólares cada una, y las que tienen que llegar. Pero se han gastado 295 millones en servicio al cliente, 833 millones en marketing, y una gran cantidad no definida en ampliar la producción de la Gigafactory. Por no hablar de lo que haya relacionado con SolarCity.
Solución interna para Mobileye
Sí, la prioridad en la línea de trabajo de Tesla Motors es el Model 3, pero también hay un campo de desarrollo casi tan importante como el nuevo coche, y ese es el desarrollo de la autonomía de conducción completa de los vehículos. El mes pasado rompieron con Mobileye, la compañía que les hace los sensores para que los coches “vean”, y posiblemente esté relacionado con los accidentes registrados en los últimos meses.
¿Un sustituto para Mobileye? Pues no contaron nada concreto pero Musk dijo que tienen anuncios importantes que hacer al respecto a lo largo del año: hay una solución interna para esto, parece que Tesla Motors se encargará de crear la tecnología, que en boca del jefe será sorprendente.
Dicho sea de paso, la gente de Mobileye trabajan codo con codo con Intel y BMW en la conducción autónoma, lo mismo esto tiene algo que ver con el divorcio.
14.370 coches en el segundo trimestre
Tesla Motors quiere llegar a poner en la mano de los clientes 50.000 unidades de Model S y Model X en la segunda mitad del año. Por lo pronto no han cumplido con lo que querían hacer en este trimestre analizado que termina en junio: 14.370 coches en la calle, de los 17.000 estimados.
Si seguimos tirando de estimaciones, esos 50.000 vehículos prometidos tampoco cumplen con los 80-90.000 coches que deberían vender en la segunda mitad del año, pero en Tesla siempre ven el vaso medio lleno:
En cuanto a producción pura y dura - no es lo mismo que ventas a clientes - tenemos que Tesla Motors ha sido capaz de crear 18.345 coches en el trimestre, lo que es un 18% más que en el periodo anterior del año. La intención de Musk es que se creen 2.200 vehículos por semana al terminar el tercer trimestre, y crear 2.400 coches semanales a finales de año.
Las baterias son la clave: Gigafactory
La fábrica de baterías en medio del desierto de Nevada es la clave de todo. Mirando a 2018 tenemos a Tesla creando medio millón de coches anuales, eso está muy lejos de los 50.000 coches producidos en 2015, y el componente más complicado de conseguir son las baterías.
Actualmente la Gigafactory tiene ocupado un 14% del area planeada, con una extensión total de 100 campos de fútbol. Tesla y sus socios - Panasonic - se están gastando 5.000 millones de dólares en ella. Su expansión y objetivos no parecen muy fáciles de gestionar, Tesla ha perdido 5 vicepresidentes este año, entre ellos los responsables de producción y fabricación.
La competencia aprieta fuerte, no están solos en este negocio y nombres como la china BYD, Samsung SDI o LG Chem, son creadores y suministradores de baterías para protagonistas importantes de la industria. Esta situación tiene que conseguir que los precios bajen.
Nos presentarán a un camión y un minibus en 2017
Como en buena conferencia de resultados, hay que contar cosas que animen al personal, y eso es algo que se le da bien a Tesla Motors y su jefe. Entre sus planes a medio plazo ya sabemos que está la diversificación de los vehículos, y ponerle fechas es algo que seguro que gusta.
Nos olvidamos de “Models” y pasamos a pequeños buses y camiones eléctricos, ambos están en la agenda de 2017, y aunque no vayan a ser una realidad el año que viene, sí que habrá eventos para enseñárnoslos. A mediados del año que viene sabremos algo, lo que parece una fecha bastante agresiva, que coincidirá con el comienzo de la producción del Model 3.
Sabemos que el minibus utilizará la estructura diseñada para el vehículo grande de la casa, el Model X. Obviamente el camión, a pesar de no esperarse un modelo gigante, contará con una plataforma nueva. En ambos casos se seguirán desarrollando los pilares de la casa: tecnologías de propulsión eléctricas y conducción autónoma.
También un SUV compacto: Model Y
Si nos olvidamos de los problemas para crear tantas baterías y de fechas, podemos animarnos aun más sabiendo que hay un nuevo proyecto en desarrollo, que cumple con el tipo de vehículo que más se está vendiendo: un SUV de reducidas dimensiones, o al menos más pequeño que Model X.
@RoadandTrack @TeslaMotors Model Y (compact SUV) off Model 3 chassis. Tesla Bus/Minibus/Spacebus off Model X.
— Elon Musk (@elonmusk) 31 de julio de 2016
Este compacto SUV estaría derivado del Model 3 y responde al nombre de Model Y. En las estimaciones de ventas se habla de una demanda de un millón de coches por año. Esta es una idea que ya se puso sobre la mesa en 2012, pero parece que habrá que esperar bastante tiempo para verla convertida en realidad.
En unos años el catálogo de Tesla Motors quedará configurado con dos vehículos sedan: Model S y Model 3, con una diferencia significativa de precio y tamaño. Lo mismo ocurrirá con los SUV: Model X y Model Y.
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