La maldición de la nave Starliner de Boeing continúa, pero esta vez Boeing no ha tenido nada que ver

  • El cohete Atlas V no despegará, al menos, hasta el 17 de mayo para cambiar una válvula de oxígeno

  • ULA dice estar extremando las precauciones por contar con astronautas a bordo

La nave Starliner de Boeing en el hangar de ensamblaje
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El primer vuelo con astronautas de la nave espacial Starliner de Boeing se ha retrasado al menos hasta el 17 de mayo. Por una vez, el problema es ajeno a la nave y está en el cohete que la iba a lanzar al espacio.

Una válvula defectuosa. Se suponía que la Starliner iba a despegar la noche del lunes 6 de mayo después de siete complicados años de retrasos. Cuatro, si tomamos como referencia el primer vuelo tripulado en 2020 de su única competidora, la nave Crew Dragon de SpaceX.

Sin embargo, United Launch Alliance (ULA) canceló el lanzamiento dos horas antes del despegue por un problema en una válvula de alivio de presión en el cohete Atlas V. En concreto, una válvula de oxígeno líquido que no paraba de abrirse y cerrase intermitentemente en la etapa superior, denominada Centaur.

Del optimismo al hangar. Al principio, los ingenieros de ULA, Boeing y la NASA expresaron su optimismo sobre un nuevo intento de lanzar la nave el viernes 10 de mayo, añadiendo que estaban extremando las precauciones porque había dos astronautas a bordo del cohete. Si la carga fuera un satélite, dijo el CEO de ULA, ya habría despegado.

Pero ahora los tres socios han anunciado que el Atlas V volverá al hangar para reemplazar la válvula defectuosa. El procedimiento retrasará el despegue al menos hasta el 17 de mayo, lo que significa que los astronautas Butch Wilmore y Suni Williams tendrán al menos ocho días de espera antes de poder viajar a la Estación Espacial Internacional (ISS).

La mala racha no termina. La nave CST-100 Starliner de Boeing fue seleccionada en 2010 para el programa comercial de vuelos tripulados de la NASA junto a la Crew Dragon de SpaceX. La NASA concedió a Boeing un contrato fijo de 4.200 millones de dólares para su desarrollo, mientras que SpaceX recibió 2.600 millones de la agencia espacial porque ya partía del desarrollo de la nave Dragon de carga.

Casi una década después, Boeing ha acabado perdiendo 2.000 millones de dólares de su bolsillo por una serie de fallos que retrasaron el primer lanzamiento tripulado de la Starliner hasta ahora. Al menos, esta vez, el problema está en el cohete Atlas V. La familia de cohetes Atlas tiene un historial impecable, pero no lanza humanos al espacio desde los años 60.

Imagen | Boeing

En Xataka | Más vale siete años tarde que nunca: la nave espacial Starliner de Boeing está lista para despegar con dos astronautas

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