iRobot acaba de anunciar el lanzamiento de dos nuevos modelos dentro de su gama de aspiradoras robot de mayores prestaciones. Se trata de las Roomba 765 y 775, dos asistentes de limpieza un poco más inteligentes y robustos.
Ambos modelos han sido dotados de una nueva versión de depósito de limpieza que mejora la potencia de aspiración, y un cabezal mejorado para optimizar la recogida de las partículas en el suelo. Este cabezal está guiado por un sensor acústico (distinto en ambos modelos) que calcula el tamaño de la suciedad y ajusta el comportamiento de los cepillos.
Las Roomba 765 y 775 incorporan un nuevo filtro HEPA capaz de atrapar partículas de hasta 0.3 micras para mejorar aún más la calidad del aire que expulsan. La batería también se ha mejorado para aumentar la autonomía en un 50% hasta los 90 minutos.
Las nuevas aspiradoras robot están preparadas para librarse ellas mismas de los líos con cables o flecos de alfombra y su nuevo sistema de navegación inteligente iAdapt hace que gestionen la limpieza en función de lo sucio que esté el suelo, dedicando menos tiempo a los suelos limpios.
Ambos modelos incorporan en su caja un nuevo tipo de pared virtual llamada Halo que crea un círculo de protección de 50 centímetros de diámetro a su alrededor. Las Roomba 765 y 775 salen a la venta desde este mismo mes de diciembre a un precio de 559 y 599 euros.
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