Muchos de los altavoces compactos que se usan para el ordenador están pensados para ofrecer un buen rendimiento en juegos, al ver películas,... pero para los que trabajan con su ordenador en el mundo de la música, por ejemplo mezclando o haciendo grabaciones, es necesario unos altavoces de alta fidelidad, aunque estos no ofrezcan tanta potencia de salida como otros modelos.
Los M-Audio Studiophile AV 40 quieren situarse en esa gama. Con 20 watios por canal y con tecnología OptImage III, garantizan una respuesta precisa y un buen sonido en todas las frecuencias. Están protegidos magnéticamente para que no emitan señales que distorsionen el resto de elementos, como el monitor del ordenador y un amplificador interno en cada uno de ellos.
El precio es de 199.95 dólares, nada exagerado si ofrecen todo lo que prometen.
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