Un grupo de investigadores de la Universidad de Central Florida han desarrollado una forma de almacenar y transmitir electricidad a través de un único cable de cobre especialmente fino y ligero. El trabajo, que ya se ha publicado en revistas como Nature podría ser aplicado a tejidos que se encargasen de recargar nuestros dispositivos móviles, por ejemplo.
El profesor Jayan Thomas y su estudiante de doctorado Zenan Yu han trabajado en fibras especiales basadas en nanoestructuras que podrían almacenar y conducir la electricidad. Las aplicaciones van más allá de esos tejidos, y permitirían hacer que los propios materiales con los que se construyen por ejemplo vehículos eléctricos o dispositivos electrónicos fueran capaces de almacenar la electricidad que necesitan para funcionar. ¿Adiós a las baterías?
Es la idea de estos científicos, que creen que se podría obviar el espacio necesario para las baterías, y reducir el peso, algo que sería vital para aumentar la autonomía de los vehículos eléctricos. Lo mismo ocurriría con otras aplicaciones que ganarían muchos enteros con ese singular sistema para poder funcionar.
La base del trabajo de Thomas y Yu es el desarrollo de unos supercondensadores que rodean al filamento de cobre. La energía almacenada en esos elementos permitiría alimentar el funcionamiento de los dispositivos, y según sus desarrolladores la idea es la de combinar esas estructuras con otras que cuentan con células solares para combinar ese almacenamiento de electricidad con su recolección en tejidos especiales.
Vía | University of Central Florida
En Xataka | Descubierta por accidente una forma para mejorar un 40.000% la conductividad de un cristal
Ver 9 comentarios