En plena vorágine de tablets, Microsoft parece que anda cauto. O al menos quiere planificar bien su aterrizaje con un sistema operativo diseñado para estos dispositivos. Así mientras sus principales competidores, Google y Apple, ya están lanzados en carrera, el gigante del software planea lanzarlo no antes del próximo año.
Eso sí, parece ser que para finales de este 2011 el nuevo Windows comenzará a ser testeado por socios y clientes. Aunque todo indica que todo ello se está llevando con mucho sigilo, según un informe de Bloomberg. En principio todo hace indicar que están adaptando Windows 7 a funcionalidades táctiles avanzadas, a un tamaño más reducido y optimizar el consumo de baterías para salir al mercado con buenos argumentos.
Lo cierto es que deben ponerse las pilas porque la carrera de los tablets ya comenzó en 2010 y algunos van muy lanzados. El mercado está asistiendo a un aluvión de nuevos dispositivos y los sistemas operativos no dejan de actualizarse y mejorar casi a diario. En este panorama, mucho va a tener que innovar Microsoft si se quiere presentar como fuerte competidor. A todo esto añadimos la filtración reciente del plan anunciado por Dell para tener un nuevo dispositivo con Windows 8. Veremos qué pasa finalmente.
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