El café, como el resto de alimentos que incorporamos al cuerpo cada día, tienen un impacto en nuestra salud. También es uno de esos alimentos que ha estado acompañado por numerosos mitos sobre su impacto en el organismo (algunos de ellos aún persisten en la creencia popular), pero poco a poco vamos conociendo más sobre los efectos positivos del café para nuestra salud.
Muchos de esos mitos se centran en el consumo de cafeína y sus efectos, pero donde parecía que no había dudas sobre el uso de la cafeína era en el plano deportivo para maximizar el rendimiento y el control del peso, algo estrictamente físico. Pero… ¿qué ocurre con el plano cognitivo? Esos efectos de la cafeína en nuestro cerebro es lo que la Universidad de Staffordshire ha investigado. Y hay buenas y malas noticias.
Cafeína como suplemento. No es un secreto que la cafeína es un buen suplemento para la práctica deportiva. Debido a su efecto en la oxidación de las grasas, consumir cafeína mediante el café o gracias a suplementos deportivos es algo que estimula la 'quema de grasa'. Según diferentes estudios, la ingesta de 3 mg de cafeína por kilo de peso corporal unos 30 minutos antes de la realización de un ejercicio de intensidad moderada incrementa la quema de grasas.
Por tanto, es un buen suplemento que, aparte de ayudarnos a perder grasa y rendir más, tiene otros muchos efectos positivos sobre la salud. También algunos negativos, como casi todo.
Análisis cognitivo en el fútbol. Sin embargo, y como decíamos, aún quedan algunas dudas en lo que respecta a sus efectos sobre nuestro cerebro. Hay estudios de lo más diversos que van desde los que apuntan a que puede causar ansiedad hasta los que apuntan que puede ser una protección contra el Alzhéimer. La Universidad de Staffordshire y la Universidad de Shiraz han realizado un estudio con una muestra pequeña, pero con unos datos bastante reveladores que nos dejan ver el papel de la cafeína en el cerebro cuando realizamos un deporte como el fútbol.
La Doctora Pooya Soltani ha sido una de las encargadas de la investigación y afirma que, aunque la cafeína es uno de los suplementos dietéticos más utilizados y sus beneficios deportivos en precisión, atención y velocidad están demostrados, “los efectos sobre las funciones cognitivas superiores como la resolución de problemas y la toma de decisiones seguían siendo objeto de debate”. Y en ello han centrado su investigación.
La prueba. Para el experimento han contado con la colaboración de 12 futbolistas de 16 y 17 años que participaron en una serie de tareas para explorar el impacto de la cafeína en algo muy concreto: toma de decisiones y precisión de los pases.
Para eso, la prueba consistía en medir la precisión en cinco pases cortos (de 10 metros), cinco pases largos (de 30 metros) y las habilidades en el Loughboroigh Soccer Passing Test que mide aptitudes como el pase, el regate, el control y la toma de decisiones. Los participantes completaron las diferentes pruebas después de tomar una dosis de 3 mg/kg de masa corporal de cafeína y también después de consumir una cantidad similar de placebo.
Luces. Los resultados fueron interesantes. Para empezar, los futbolistas fueron un 1,67% más precisos en los pases cortos y un 13,48% más certeros en los pases largos cuando realizaron la prueba tras consumir cafeína. Negar Jafari, de la Universidad de Shiraz, destacó precisamente que, si bien la precisión en los pases largos se mantuvo casi constante (son mucho más sencillos y sin cafeína ya se realizaban correctamente), se vio una sustancial mejora en el rendimiento de en los pases largos.
Y sombras. El problema es que en el fútbol, como deporte de equipo que es, no sólo hay que pasar: también tomar decisiones de forma muy rápida. Y, según este estudio, la toma de decisiones de los participantes fue un 7,14% peor tras consumir cafeína y los resultados en el Loughborough Soccer Passing Test que presenta una situación similar a la de un partido real fueron un 3,49% menores tras esa ingesta de cafeína. Jafari considera que "las tareas más complejas, con un mayor número de pases, podrían verse afectadas negativamente por las dosis bajas de cafeína".
Depende de la posición. Está claro que también hablamos de participantes muy jóvenes y habría que replicar el experimento en futbolistas profesionales, pero algo que afirman los investigadores es que estos resultados no sugieren que lo mejor sea evitar la cafeína en estos deportes. Soltano asegura que "nuestros hallazgos muestran que la ingesta de cafeína puede afectar en el aspecto cognitivo y los entrenadores pueden considerar esto para sus entrenamientos".
Y algo a lo que apuntan es a la posición de los jugadores, ya que "una ligera disminución en la precisión de los pases puede ser crucial para un centrocampista, pero menos impactante para un portero", puesto que ese jugador no se ve sometido, generalmente, a un control rápido y a la misma toma de decisiones que un mediocampista creador, por ejemplo.
Otro mundo. Pero bueno, para el tipo de deporte que solemos realizar la mayoría, donde la toma de decisiones se basa en si esperamos más o menos entre series, la cafeína tiene efectos muy positivos. En el mismo estudio se afirma que la ingesta de cafeína mejora el reclutamiento neuromuscular y mejorar ciertos tipos de movimientos explosivos, así como potenciar deportes de resistencia, producir mejoras en ejercicio intermitente de alta intensidad, en los de resistencia y de cara a la producción de fuerza muscular en entrenamientos isométricos.
Imagen | Creada con Dall-E
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