Todos los récords de velocidad han caído: un objeto construido por la NASA acaba de alcanzar los 630.000 km/h

  • Hay que irse a 1976 para encontrar un objeto más rápido que la Sonda Solar Parker

  • Si todo sale bien, la sonda volverá a batir su récord de velocidad en 2024

Imagen conceptual de la Sonda Solar Parker batiendo un récord de velocidad
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Ni el avión supersónico más moderno, ni el coche más rápido atado a varios cohetes puede medirse con el objeto más veloz jamás construido por el ser humano: la Sonda Solar Parker. Su nuevo récord de velocidad supera por primera vez la barrera de los 600.000 km/h.

La nueva hazaña de la Sonda Solar Parker. La sonda espacial de la NASA completó el pasado 27 de septiembre su décimo séptimo acercamiento al Sol. Acelerada por el masivo empuje gravitatorio de la estrella, la nave batió su propio récord de velocidad hasta alcanzar la insólita cifra de 635.266 km/h, según confirmaron más tarde los controladores de la misión.

El único precedente es la propia Sonda Solar Parker, que en un acercamiento anterior de noviembre de 2021 clavó el velocímetro en 586.863 km/h. En cada una de estas pasadas la sonda Parker acelera cada vez más y se acerca progresivamente al Sol.

No es el principal récord que batió ese día. El décimo séptimo acercamiento de la sonda batió además un récord de distancia: en el punto más cercano al Sol de su trayectoria, conocido como perihelio, la sonda estuvo a solo 7,26 millones de kilómetros de la superficie solar, más cerca de lo que ninguna otra nave espacial ha estado de la estrella.

Si todo sale bien, ambos récords volverán a batirse a finales de 2024, cuando Parker pase a solo 6,16 millones de kilómetros de la superficie del Sol. Por comparar la distancia media entre la Tierra y el Sol es de 150 millones de kilómetros, pero hay que tener en cuenta también la corona solar, que es la parte exterior de la atmósfera de la estrella y puede extenderse varios millones de kilómetros en el espacio.

Un violento entorno de interés científico. Aproximándose al Sol más que ninguna otra nave, la Sonda Solar Parker está penetrando regiones del entorno solar que resultan de alto interés científico para los astrónomos y que nunca antes habían sido exploradas tan de cerca. La sonda ha sobrevivido a varios eventos violentos que permitieron a los científicos entender la estructura del viento solar y detalles antes desconocidos de los campos magnéticos.

Mucho antes de la Sonda Solar Parker, una colaboración germano-estadounidense llevó al espacio la sonda Helios 2. Los récords de velocidad y acercamiento al Sol de esta sonda datan de 1976, unos respetables 246.960 km/h y 43.4 millones de kilómetros de distancia. Asombrosamente, no se superaron hasta después del lanzamiento de Parker en agosto de 2018.,

Por qué no se derrite. Para evitar una muerte segura, la Sonda Solar Parker está equipada con un escudo térmico de carbono capaz de soportar temperaturas de hasta 1.377 grados Celsius. El escudo está acabado en color blanco para reflejar parte de la radiación térmica solar y mantiene a salvo una amplia variedad de instrumentos diseñados para medir campos eléctricos y magnéticos, detectar partículas solares y tomar imágenes de alta resolución del Sol y otros objetos.

Además de ampliar nuestra comprensión de las estrellas, los hallazgos de la Sonda Solar Parker están contribuyendo al desarrollo de sistemas de alerta temprana para las tormentas solares, un fenómeno que podría tener un impacto catastrófico en nuestras redes eléctricas y satélites de navegación.

Imagen | NASA

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