Si el tiempo en verano te parece raro, prepárate para lo que viene: va a llover en el desierto del Sáhara como no se recuerda

No sólo es un fenómeno rarísimo: tiene consecuencias para todo el planeta

Plantilla Xtk
15 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail

Desde hace días, los meteorólogos están obsesionados con el Sáhara y no es para menos. Todo parece indicar que estamos a punto de ver un fenómeno completamente excepcional en el desierto más grande del mundo: en los próximos días y en pocas horas, amplias regiones van a recibir más de 500 veces lo que suele caer en todo el verano.

Evidentemente, esto no es nada normal.

De hecho, es muy raro. Muy poco frecuente. Por lo que sabemos, de media, este tipo de fenómenos tienen una cadencia de más de diez años. En términos generales, el Sáhara es uno de los lugares más secos, calurosos y áridos de la Tierra. En sus más de 9,2 millones de kilómetros cuadrados, hay zonas que rivalizan con el mismísimo desierto de Atacama.

Sin embargo, no siempre fue así. Hace unos 6.000 años, lo que hoy conocemos como Sáhara era una región fértil llena de lagos, ríos y vegetación abundante. Pero hubo una serie de cambios climáticos que lo convirtieron en el epicentro de una célula de Hadley, el mismo sistema de altas presiones que provoca la aparición de los vientos alisios.

De la misma forma que el anticiclón de las Azores "garantiza" el tiempo veraniego en la Península, esa célula está detrás de la circulación atmosférica que convierte al Sáhara en un desierto.

¿Qué está pasando ahora? Justo debajo de esas células de Hadley, hay unas zonas de alta humedad y precipitaciones que rodean el ecuador. Se la conoce como Zona de Convergencia Intertropical. Lo que está ocurriendo es que desde junio esa Zona de Convergencia se está desplazando cada vez más al norte y eso ha provocado una extraordinaria entrada de aire húmedo en una región poco acostumbrada a ello.

Por contextualizar, en muchas regiones del Sáhara las precipitaciones anuales no alcanzan los 25 litros por metro cuadro y, de hecho, hay lugares donde puede no caer ni una gota en el año entero. El desplazamiento al norte (en las condiciones que estamos viendo) puede ocasionar acumulados de lluvias realmente históricos. Aunque hemos registrado cuatro intrusiones fuertes de la Zona de Convergencia en el Sáhara en los últimos 50 años, ninguna es tan fuerte como la que dibujan los modelos.

Y muchas más cosas. Porque este cambio es sustancial. El miércoles, el Centro Europeo de Predicción Meteorológica llegó a plantear la posibilidad de que ese "monzón tropical" llegara a España. La posibilidad es remota, pero nos ayuda a ver el impacto de este fenómeno en cosas como la temporada de huracanes.

El desplazamiento de la Zona de Convergencia hace que los vientos se muevan al norte y que las posibles tormentas tropicales empiecen a "plantarse" en aguas más frías de lo normal. Esto puede dar alguna sopresa a la Península ibérica, pero en general significa menos huracanes.

Imagen | Savvas Kalimeris | ECMWF

En Xataka | Hemos descubierto una entrada "al inframundo" bajo la iglesia de Mitla en Oaxaca. Y sin cavar un solo túnel

Inicio