El robot repartidor de pizzas ya existe y se está probando en Nueva Zelanda

El robot repartidor de pizzas ya existe y se está probando en Nueva Zelanda
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¿Y si los restaurantes de comida a domicilio prescindieran de los tradicionales repartidores para recurrir a la tecnología y llevar de forma automática tu pedido hasta tu casa? En Domino Nueva Zelanda acaban de anunciar la puesta en marcha de un programa piloto en el que comenzarán a utilizar un robot repartidor especial que llevará directamente las pizzas que pidas hasta tu hogar.

El robot, que no mide más de un metro de alto, posee un receptáculo donde se pueden introducir hasta 10 pizzas, manteniéndose el interior a una temperatura óptima gracias a los dos compartimentos que incluye: uno frío para las bebidas y otro que da calor para los alimentos. Una vez lista la carga, DRU (así lo han llamado) comienza su recorrido hasta la dirección que se le indica desde el control central. Aquí puedes verlo en acción:

Domino's World First Autonomous Pizza Delivery Vehicle

Meet DRU - The newest team member to join the Domino's family! He's the world's first autonomous pizza delivery vehicle!DRU has a passion for delivering piping hot meals and a nice warm smile to customers. While he won't be taking to the streets tomorrow, he is enjoying his early progress as a prototype and giving customers a glimpse into the future of what is possible.We're excited to welcome DRU into the team and we're sure you'll love getting to know him and his cheeky personality!#DRU #DominosNZ #MoreThanJustPizza #TheFuture #GameChanger

Posted by Domino's New Zealand on jueves, 17 de marzo de 2016

El robot incluye sensor de obstáculos para poder evitar los problemas que se encuentre en su camino, y tiene una autonomía estimada de hasta 20 kilómetros por cada carga de batería. Cuando llega a su destino, los clientes que han hecho el pedido especifican el código que se les ha entregado al hacer el pago y el robot les entrega la mercancía.

Por ahora, como decimos, se trata de un programa piloto que se pondrá en marcha en Nueva Zelanda con el apoyo del gobierno local y que nos deja bastantes preguntas. ¿Cómo evitarán que la gente los robe/ataque? ¿Será capaz de solventar obstáculos complicados? ¿Puede obedecer las señales de tráfico? Está por ver si la iniciativa se extiende a otros países o si simplemente se queda en algo que han propuesto como simple campaña de publicidad.

Vía | The Verge

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