Según datos de GamesIndustry y Research and Markets, el gaming móvil fue responsable del 57 % de los beneficios de la industria del videojuego en 2020, que ascendieron a nada menos que 162.320 millones de dólares. Por su parte, Business of Apps y Statista señalan que, en el mismo año, más de 2.500 millones de personas jugaron desde su smartphone. Estas impresionantes cifras subrayan el éxito del gaming móvil como una tendencia cada vez más avalada por los usuarios.
Así, no es extraño que los fabricantes apuesten por diseños y gamas de smartphones pensados para el gaming. Como ocurre con la veterana Black Shark, empresa en la que Xiaomi tiene participaciones, que ya lanzaba sus primeros terminales para este segmento en 2018.
Un smartphone con alma de consola portátil
El reto para los fabricantes estriba en mantener las ventajas de uso de un smartphone, al tiempo que ofrecen una experiencia de usuario a la altura de una consola portátil. El nuevo Black Shark 5 Pro y su hermano pequeño Black Shark 5 han conseguido un notable equilibrio en este sentido, adoptando soluciones ergonómicas, tecnológicas y experienciales muy inteligentes.
El aspecto más evidente es el de los gatillos magnéticos, que definen en buena medida la identidad gaming en estos móviles. Pero hay más elementos que contribuyen a amplificar estas habilidades, como la pantalla sensible a la presión o las funcionalidades específicas del sistema operativo JoyUI.
Black Shark 5 Pro: especificaciones al máximo
Black Shark 5 Pro es el modelo más avanzado de la familia. Integra el procesador Snapdragon 8 Gen 1 de Qualcomm, el SoC más solvente en CPU, GPU, IA o procesamiento de imagen y conectividad. Además, se presenta en configuraciones de 8 GB + 128 GB (RAM + almacenamiento), 12 GB + 256 GB y la potentísima 16 GB + 256 GB.
La memoria es LPDDR5 a 6.400 MHz, lo que contribuye a maximizar el rendimiento en juegos, más aún al combinarla con un almacenamiento Enhanced UFS 3.1. Se trata de una tecnología que logra un comportamiento equiparable al de las de los equipos gaming, brindando una agilidad sobresaliente al abrir o instalar aplicaciones y juegos.
Refrigeración tipo sándwich
Semejante configuración exige un sistema de refrigeración tan eficiente como el Anti-gravity Dual VC Liquid Cooling. Este exhibe dos placas con tecnología de cámara de vapor mejorada (Vapor Chamber), alcanzando una superficie combinada de 5.320 mm2.
Asimismo, usa cobre para maximizar la disipación de calor desde los componentes activos de la electrónica, como el SoC o los circuitos que se encargan de regular la alimentación de los chips. Y es que la refrigeración es especialmente importante en un teléfono gaming para que las tasas de frames sean lo más estables posible.
Gatillos magnéticos: mejor si los botones son físicos
La familia Black Shark 5 cuenta con botones físicos como marca de la casa. En esta generación vienen con una presión de 160 gramos y una durabilidad refrendada por más de 1.000.000 de pulsaciones como tiempo de vida.
Es posible mapear botones táctiles hacia los gatillos para derivar la interacción en pantalla hacia la interacción física. Cuando no se usan, los botones se escamotean en los laterales del terminal. También es factible configurar los gatillos para activar funcionalidades del sistema operativo.
La forma de hacerlo es a través de Shark Space, el entorno de tuneado del terminal para todo lo relacionado con gaming en el que nos detendremos más adelante.
Pantalla OLED E4: la mejor para gaming
La pantalla OLED de 10 bits es compatible con HDR10+ y está cuidada al máximo para proporcionar una experiencia de juego perfecta. Con 6,67’’ de tamaño, brillo máximo de 1.300 nits y un contraste de 5.000.000:1, registra un consumo energético menor que otras pantallas.
Tenemos el 100 % del espacio de color DCI-P3 más tecnología MEMC (Motion Estimation, Motion Compensation), así como hasta 144 Hz de tasa de refresco y 720 Hz de tasa de muestreo táctil. Además, contamos con la tecnología Magic Press de Black Shark, que permite mapear zonas con diferentes sensibilidades a la presión y dispone de hasta siete niveles donde elegir.
El sonido también importa en el gaming
El audio, tradicionalmente, ha sido tratado con cierto desdén en telefonía móvil. Tiene su razón de ser: es complicado integrar un buen sonido en las dimensiones de un smartphone, por lo que muchos fabricantes directamente “tiran la toalla” y usan tecnologías de sonido “mainstream” supeditadas a otros elementos del terminal.
El Black Shark 5 Pro, en cambio, ha priorizado este apartado con un sistema de altavoces estéreo dual-symetrical lineales con amplificadores de alta potencia y una cavidad de sonido diseñada con un tamaño superior a otras propuestas. En concreto, 1,5 centímetros cúbicos. Igualmente, integra tecnologías de procesamiento de audio de DTS y Cirrus Logic. La parte de grabación de audio también está maximizada, con cuatro micrófonos y cancelación de ruido. El resultado: estar en el top del ranking DXOMARK.
Carga rápida con dos modos a elegir y conectividad optimizada
La batería de 4.650 mAh del Black Shark 5 Pro se carga a 120 W, por lo que puede pasar de 0 a 100 en solo unos 15 minutos. No obstante, los Black Shark 5 permiten definir dos modos de carga bien diferenciados.
Frente al más veloz Speed Flash, a temperatura constante, el terminal ajusta la tasa de carga para que no sufra sobrecalentamiento, lo que extenderá la recarga a unos 24 minutos. En un terminal gaming, en no pocas ocasiones, tendremos que jugar cargando el móvil, por lo que se agradece que la temperatura esté bajo control.
La conectividad también es un aspecto muy relevante. El Black Shark 5 Pro está dotado de Wi-Fi 6E con bandas de 2,4 GHz, 5 GHz y 6 GHz, así como 5G SA y NSA, claves para maximizar la jugabilidad en red por su reducida latencia. De la misma forma, el diseño de antena en X está pensado para maximizar la recepción de la señal.
Shark Space 4.0: gaming a la medida de cada gamer
Un gamer suele imprimir su carácter tanto en su estilo de juego como en la estética de su equipo. En consecuencia, Black Shark ha desarrollado el entorno de personalización Shark Space, que llega a la cuarta generación.
Desde Shark Space 4, los gamers pueden definir macros, ajustar la respuesta del terminal a los movimientos del mismo (Motion Sensing) con hasta seis gestos controlados por movimiento o tunear el rendimiento o la tasa de refresco de la pantalla dependiendo de las tasas de frames de los juegos. Por ejemplo, ‘Asphalt 9’ ofrece 60 fps, por lo que podremos ajustar la tasa de refresco a 60 Hz o 120 Hz.
La configuración de macros es otro punto que los gamers aprovechan para “hacer suyo” un dispositivo gaming y agilizar la ejecución de secuencias de pulsaciones a su medida. Y hay opciones para definir efectos de iluminación a través de Shark Eye Lightning Effect y ambientar el entorno.
Black Shark 5: la democratización del smartphone gaming
El Black Shark 5 Pro es el paradigma de los terminales gaming más exigentes, pero también contamos con el modelo Black Shark 5, que se posiciona un escalón más bajo en precio para ponerse al alcance de una audiencia más amplia.
Mantiene los gatillos magnéticos, la sensibilidad a la presión de la pantalla, la configuración de macros, el sistema de refrigeración o la carga rápida de 120 W. Sin embargo, integra el Snapdragon 870, un SoC de gama alta, pero por detrás del Snapdragon 8 Gen 1. Además, prescinde de la tecnología UFS 3.1+ y la memoria señala un máximo de 12 GB más 256 GB de almacenamiento con velocidad de 5.500 MHz para los módulos LPDDR5.
La pantalla es esencialmente la misma, aunque en este caso AMOLED y sin compatibilidad con HDR10+. En definitiva, se mantiene como una propuesta capaz de competir con las consolas portátiles.
Fotografía: tampoco defraudan
A pesar de que hayamos descrito con profusión su esencia gaming, no podemos perder de vista la experiencia de uso que ambos modelos brindan como teléfonos móviles, donde las cámaras son indispensables.
El Black Shark 5 Pro cuenta con una cámara principal de 108 Mpx y óptica 7P con apertura F1.75 y tecnologías como IA, modo nocturno o autofoco PDAF y HDR. La ultra gran angular de 13 Mpx luce apertura F2.4 y óptica 5P de cinco elementos, y la cámara macro es de 5 Mpx con autofoco.
El Black Shark 5, por su lado, posee un sensor principal de 64 Mpx con apertura F1.79 y óptica 6P de seis elementos más la misma ultra gran angular del modelo Pro y macro de 2 Mpx. La cámara frontal es de 16 Mpx en ambos modelos, con óptica 5P.
No son móviles pensados para fotógrafos, pero sí cumplen perfectamente su cometido para un uso cotidiano.
Teléfonos móviles con una identidad gaming marcada y nada invasiva
Ya hemos visto que los Black Shark 5 Pro y Black Shark 5 son teléfonos móviles que pueden funcionar como consolas, pero sin renunciar a una experiencia como smartphones óptima. Con un peso comedido, el grosor es algo mayor que en otros modelos, pero se justifica por la presencia de los botones físicos o el sistema de refrigeración de tipo sándwich.
Igualmente, la estética está enfocada hacia una audiencia entusiasta que aprecia los elementos diferenciadores, pero sin caer en la estridencia. Por ello, los Black Shark 5 se presentan en colores Explorer Grey y Mirror Black, mientras que los Black Shark 5 Pro se decantan por el Nebula White y Stellar Black. Se trata de tonalidades muy adecuadas para amantes de los videojuegos que buscan cierta “neutralidad”.
Disponibilidad y precios
Black Shark 5 Series estará disponible justo después de su lanzamiento, el día 9 de junio a las 8:00 PM horario GMT+8, 13:00 PM en España. Se podrá comprar en la tienda oficial de Black Shark, también en Amazon y Aliexpress.
La familia Black Shark 5 Series tendrá estos precios:
- Black Shark 5 (8+128): 549€
- Black Shark 5 (12+256): 649€
- Black Shark 5 Pro (8+128): 799€
- Black Shark 5 Pro (12+256): 899€
- Black Shark 5 Pro (16+256): 999€
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