Cuatro puntos de incertidumbre en el coche eléctrico convertidos en oportunidad con la tecnología E-Tech

Renault Electricos 5
1 comentario Facebook Twitter Flipboard E-mail
wbct-colaborador

WSL Branded Content

Expertos en Branded Content

Autonomía, precio, recarga... El coche eléctrico lleva años conviviendo con determinadas incertidumbres que a fecha de hoy han desaparecido o, al menos, no son lo que eran porque ya no suponen un lastre importante. ¿Cómo ha logrado la movilidad eléctrica dejar atrás, en el pasado, a sus viejos fantasmas?

Se podría decir que la historia reciente del coche eléctrico es un relato de éxito tecnológico, al haber evolucionado de una manera sorprendente en un breve lapso de tiempo. No hay más que observar cómo han cambiado las baterías para coches eléctricos, doblando e, incluso, triplicando su capacidad energética y su autonomía en menos de diez años.

Se podría decir que la historia reciente del coche eléctrico es un relato de éxito tecnológico al haber evolucionado en un breve lapso de tiempo

Tan rápida ha sido esa evolución que aquellos defectos asociados al coche eléctrico no han desaparecido del todo del imaginario común, pese a haber sido ya superados, o estar en pleno proceso. Es decir, se han convertido en mitos en un tiempo récord gracias al impulso tecnológico dado por fabricantes punteros en lo que a electrificación se refiere.

Tal es el caso de Renault y su tecnología E-Tech. Después de varios años perfeccionando las motorizaciones 100% eléctricas, el fabricante francés ha integrado y actualizado sus logros a través de una plataforma que le permite explotar al máximo los últimos avances en lo que a modelos híbridos (HEV), híbridos enchufables (PHEV) y 100% eléctricos (BEV) se refiere.

Vamos a revisar los cuatro puntos principales, las cuatro batallas que el coche eléctrico ha librado y de las que está saliendo airoso a base de apostar por la innovación tecnológica.

1) De la ansiedad a la tranquilidad por la autonomía

Renault Electricos 4

La expresión "ansiedad por la autonomía" lleva acompañando al coche eléctrico desde que, a principios de la década anterior se lanzaran los primeros modelos 100% eléctricos que iniciaron la senda del cambio.

Pues bien, ha llegado el momento de pensar en despedir a este viejo mito. En su día, era más que comprensible aplicarlo, teniendo en cuenta que esos eléctricos de primera generación apenas superaban los 100 kilómetros de autonomía eléctrica.

Sin embargo y, gracias al proceso iniciado por algunos fabricantes, las homologaciones, en cuanto a autonomía se refiere, se han multiplicado por cuatro. Por ejemplo, el nuevo Renault Megane E-Tech 100% eléctrico puede alcanzar los 470 kilómetros de autonomía según su homologación más reciente.

Aunque la batería es el corazón del coche eléctrico, no es el único factor sobre el que se ha trabajado. Y es que, si hablamos de autonomía, hay que hablar de eficiencia

Por supuesto, ha sido cuestión de ir invirtiendo en la tecnología de baterías. Si el primer Renault ZOE que salió al mercado montaba un pack de 22 kWh, hoy el mencionado Renault Megane E-Tech 100% eléctrico llega hasta los 60 kWh. Pero no solo se ha incrementado la capacidad energética y mejorado el modo en que se integra en el vehículo para que no reste habitabilidad; también se ha implementado la química asociada a los acumuladores en beneficio de su densidad energética.

Aunque la batería es el corazón del coche eléctrico, no es el único factor sobre el que se ha trabajado. Y es que, si hablamos de autonomía, hay que hablar de eficiencia. La tecnología E-Tech ha alcanzado unas cotas muy altas para la movilidad eléctrica, con motores que ofrecen un mayor rendimiento y nuevos materiales que aligeran la masa de vehículos con diseños más aerodinámicos.

Tiempo de recarga

Renault Electricos 1

Poco a poco, la infraestructura de carga también ha ido mejorando, tanto en su disponibilidad pública y, sobre todo en tecnología. Los detractores de la movilidad eléctrica hablaban hace unos años de que el coche eléctrico no era factible porque la tecnología para cargar grandes packs de baterías era inviable.

La tecnología E-Tech ya permite recargas a una potencia de 130 kW. Esto equivale a devolver 250 kilómetros de autonomía en apenas 25 minutos.

Hoy la vocación por la innovación se ha encargado de refutar esas teorías. La tecnología E-Tech ya permite recargas a una potencia de 130 kW. Esto equivale a devolver 250 kilómetros de autonomía en apenas 25 minutos. Por supuesto, este tipo de cifras están dirigidas hacia la recarga en público. El punto positivo en este caso es que se ha alcanzado un estado de madurez tecnológica que ya lo permite.

Tan positivo como esto ha sido el hecho de que no ha habido un tipo de motorización que se haya impuesto de forma hegemónica. En la actualidad, la tecnología E-Tech ha conseguido integrar híbridos, híbridos enchufables y eléctricos puros, lo que permite una mayor flexibilidad a los hábitos de conducción.

2) Del desconocimiento al reconocimiento tecnológico

Renault Electricos 8

Como toda nueva tecnología, muchas de las incertidumbres que han crecido en torno al coche eléctrico han tenido que ver, sencillamente, con su desconocimiento.

Era casi inevitable que los pioneros, los primeros en adquirir un coche eléctrico hace unos años, recibieran miradas de incredulidad cuando enchufaban su coche en público. No en vano, este gesto que marca la movilidad eléctrica rompía de lleno con una costumbre muy arraigada, la de repostar y llenar el depósito.

Hoy ver a alguien que enchufa un coche no genera sorpresa, desconfianza o escepticismo, sino que se ha convertido en síntoma de conducir un vehículo tecnológicamente más avanzado.

Pero es que, ese efecto de popularidad eléctrica se ha asentado sobre hechos palpables. Los conductores de modelos eléctricos conocen bien a qué nos referimos. La experiencia que proporciona el empuje eléctrico es única y define por sí sola las ventajas de conducir un vehículo de respuesta inmediata y limpio de ruidos, vibraciones y emisiones.

3) La revolución en costes y precios

Renault Electricos 3

"El coche eléctrico es caro". Con la autonomía, este es quizá el mantra más repetido en la breve, pero interesante historia reciente del coche eléctrico. El fenómeno ya ha empezado a difuminarse por falta de peso específico.

Cada vez más, el precio de los modelos electrificados tiende a equipararse al de los modelos de combustión. La integración de las motorizaciones eléctricas está en una fase tan avanzada que ya es complicado contrastar el coste-beneficio entre un modelo eléctrico y su teórico equivalente térmico.

La integración de las motorizaciones eléctricas está en una fase tan avanzada que ya es complicado contrastar el coste-beneficio entre un modelo eléctrico y su teórico equivalente térmico

Es más, si hacemos un análisis exhaustivo en el que tenemos en cuenta todo el ciclo de vida de los vehículos y el coste total de propiedad, la balanza suele inclinarse sin remedio a favor de los modelos 100% eléctricos. Entre los principales factores que explican esto encontramos:

  • El menor coste del combustible e, incluso, la posibilidad de negociar tarifas con las suministradoras eléctricas para que nos salga más rentable la carga (¿nos imaginamos negociando las tarifas del combustible con el operario de la gasolinera?).
  • Mantenimientos mucho más económicos debido a la sencillez mecánica y menor número de componentes de los bloques eléctricos.
  • Ayudas directas a la compra, como las que reparte el Plan MOVES, en combinación con las subvenciones autonómicas y locales.
  • Ventajas fiscales y descuentos en los impuestos de circulación y matriculación.
  • Ventajas concretas y por zonas. Por ejemplo, a la hora de estacionar en grandes ciudades de forma gratuita; o de circular sin restricciones por las ZBE.

Todas estas variables sonríen más al coche eléctrico y terminan por compensar y hacer que salga más rentable adquirir un modelo eléctrico. A esto hay que sumar que el coche en propiedad tal y como lo conocemos ya no es la única manera de adquirir un vehículo. Cada vez conviven más con otras fórmulas como el 'renting' o 'leasing', algo que está acelerando la introducción de modelos con mejores prestaciones y, entre estas, con naturaleza eléctrica.

4) De la falta de interés a la revalorización de lo eléctrico

Renault Electricos 2

Como hemos mencionado, el coche eléctrico está acumulando una atracción considerable para una gran mayoría de conductores y, sobre todo, entre aquellos que apuestan por la innovación. Según una encuesta del Observatorio Cetelem realizada este mismo año, el 60% de los conductores que está pensando hoy en acceder a un turismo optaría por un coche híbrido o 100 % eléctrico.

La tendencia hacia lo eléctrico sigue, además, al alza en la medida en que la tecnología ha madurado y sigue con margen para seguir haciéndolo; y que el desconocimiento por la tecnología del coche eléctrico desaparece.

Otro fenómeno que refuerza el gran interés que comienza a despertar el coche eléctrico es que la oferta y variedad de estos modelos aumenta en los concesionarios

Otro fenómeno que refuerza el gran interés que comienza a despertar el coche eléctrico es que la oferta y variedad de estos modelos aumenta en los concesionarios. Esto se nota, en especial, en fabricantes que llevan años cocinando la revolución eléctrica. Un ejemplo es la gama E-Tech 100% eléctrica que presenta todo tipo de soluciones eléctricas, adaptándose a las necesidades de cualquier conductor.

Como añadido, copa los segmentos. Si hace no tanto una motorización eléctrica solo era posible en ciudad, hoy la oferta se extiende desde el mítico Renault Twingo, hasta todo tipo de crossovers, SUV (como el Renault Austral E-Tech full hybrid) y, por supuesto, vehículos comerciales.

En definitiva, el coche eléctrico ha roto los límites e incertidumbres que lo encajonaban dentro de un nicho de mercado, para convertirse hoy en una tendencia tecnológica de movilidad sostenible que ya resulta imparable.

Comentarios cerrados
Inicio