Adiós a la Zona de Bajas Emisiones en Barcelona: la justicia pone en jaque la lucha contra los coches contaminantes

Adiós a la Zona de Bajas Emisiones en Barcelona: la justicia pone en jaque la lucha contra los coches contaminantes
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Como ya le sucedió a Madrid Central, la ordenanza que regula la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de Barcelona ha sido anulada, tal y como ha confirmado la cuenta oficial de la Oficina de Comunicación del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya en un tweet. Se anulan, así, más de 95 km2 de restricciones a los vehículos más contaminantes.

El tweet señala que se han estimado seis recursos interpuestos por diez asociaciones distintas y que la ordenanza carece de informes suficientes que avalen las restricciones impuestas, las cuales, además, se exceden en su ámbito geográfico y en el tipo de vehículos afectados.

Qué es la ZBE de Barcelona

La ZBE de Barcelona ha sido el mayor espacio español en el que se ha restringido la circulación a los vehículos más contaminantes. Entre las 7:00h y las 20:00h de los días laborales, los vehículos sin etiqueta medioambiental de la DGT (aquellos vehículos de gasolina anteriores al año 2000 o Euro III y los diésel anteriores a 2006 o Euro IV) no pueden circular por el espacio definido en la ZBE. Al menos, hasta la decisión del Tribunal Supremo de Justicia de Cataluña.

Esta ZBE tiene una extensión de más de 95 km2 y en ella se encuentra la ciudad condal (excepto la Zona Franca Industrial y los barrios de Vallvidrera, El Tibidabo y Les Planes), los municipios de Sant Adrià de Besòs y L'Hospitalet de Llobregat, y parte de los municipios de Esplugues de Llobregat y Cornellà de Llobregat. Para hacernos una idea mejor, Madrid Central, ahora Madrid 360 tiene una extensión de 4'72 km2.

"Excesiva restricción del tipo de vehículos afectados"

La resolución que ha tomado el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña alega que no hay informes que avalen la decisión de restringir el paso a los vehículos más contaminantes y que estas medidas se han excedido en el espacio restrictivo y en el tipo de automóviles afectados.

Este último detalle es importante porque hace referencia a que el Ayuntamiento de Barcelona se excede impidiendo circular a vehículos sin etiqueta medioambiental, los mismos que también quedan fuera de Madrid 360, la única ZBE activa en estos momentos junto a la catalana. ElDiario.es recoge que la justicia señala que estas medidas causan “un efecto negativo en las personas de menor capacidad adquisitiva”, aquellos que no pueden cambiar de coche por otro más moderno.

La decisión llega después de que en julio de 2020 se optara fallar contra a el recurso interpuesto por la Plataforma de Afectados por las Restricciones Circulatorias y la Federación Catalana de Transporte de Viajeros. En aquella ocasión, el Tribunal alegó que los beneficios sobre la salud derivados de la ZBE debían permanecer por encima de las pérdidas económicas del sector del transporte.

Poco después, en el mes de septiembre de 2020 se dieron inicio a las multas que, en un primer momento, iban a imponerse a partir del 1 de abril de aquel mismo año. Sin embargo, la pandemia del coronavirus aplazó la decisión.

Un momento crucial

La sentencia del tribunal catalán es recurrible ante el Tribunal Supremo pero en ella se alegan motivos similares a los que tumbaron Madrid Central. En aquella ocasión se alegó que se carecía de una memoria económica para implantar las medidas. Esta vez también se señala una falta de informes para poder mantener estas restricciones.

La decisión llega en un momento crucial, pues desde el Ayuntamiento barcelonés ya habían lanzado un primer globo sonda avisando de que la prohibición a la circulación de vehículos con etiqueta B estaba sobre la mesa. Quedaba por decidir cómo se iba a llevar esta a cabo, pues también se mencionó la posibilidad de discriminar por normativa europea de emisiones (no solo por etiqueta).

Además, recordemos que 2022 es el año en el que se tienen que estructurar las nuevas zonas de bajas emisiones en todas las ciudades de más de 50.000 habitantes españolas. Una medida aprobada por el Gobierno y que plantea el inicio de las mismas en 2023 pero que deja en manos de los ayuntamientos su configuración.

En la Ley de Cambio Climático y Transición Energética también se recogía la posibilidad de ampliar estas ZBE a aquellas ciudades con más de 20.000 habitantes con mala calidad del aire. La semana pasada, sin embargo, supimos que la Generalitat obligará a todas las ciudades catalanas que superen esta cifra (67 municipios en total) a implantar esta medida, aunque tendrán dos años para llevarla a cabo.

Incluso, en la nueva Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, cuyas nuevas multas entran hoy en vigor, se recoge que quienes incumplan las restricciones de estas ZBE se enfrentan a multas de 200 euros, al considerarse una infracción grave.

Foto | Tamas Debreczeni

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