A los franceses se le pueden achacar decenas de inventos que han revolucionado el mundo: el globo aerostático, las aspirinas, el bolígrafo, el sistema Braille o el cinematógrafo. El orgullo francés es presumir de todo eso, también de artistas y escritores como Victor Hugo, Alejandro Dumas o Paul Cézanne. O de haberse rebelado ante la autoridad monárquica hace unos siglos, aunque algunos sólo lo demuestren cantando la Marsellesa en algún que otro partido de fútbol.
Para otros, el orgullo francés es crear la tortilla más grande del mundo.
Fraternidad ante todo, como dice el lema, los miembros de la Hermandad Mundial de los Caballeros de la Tortilla Gigante de Bessières, un pequeño pueblo en el sur de Francia cerca de Touluse, recolectan miles de huevos cada Pascua para llevar a cabo una tradición que ya tiene 50 años: una tortilla de proporciones bíblicas.
Este evento de tres días, que combina actividades, desfiles y actuaciones, termina con una gran misión culinaria: la preparación de una titánica tortilla de 15.000 huevos, lo suficientemente grande como para alimentar a 2.000 personas. Este año, con una coyuntura económica a la espalda bastante gris, incluida la gripe aviar y el altísimo precio de los huevos por la inflación, el precio para degustarla no ha cambiado: gratis.
Los voluntarios, vestidos con camisas de color amarillo yema, pantalones blancos y gorros de chef, forman parte de una de las hermandades gastronómicas que existen en Francia y que promueven los productos locales. De hecho, en el país galo existen cofradías de este tipo para cada alimento: el vino, el queso y otros platos tradicionales de pueblos remotos.
Una sartén de 850 kg y paletas industriales
El evento comenzó el Lunes de Pascua a las 6 de la mañana, cuando los primeros asistentes empezaron a llevar la sartén de 850 kg y más de 4 metros a la hoguera con la ayuda de una carretilla elevadora. Y más tarde echaron 70 litros de grasa de pato en la sartén para que se calentara. Después, los voluntarios transfirieron los huevos a enormes ollas de aluminio para batirlos con paletas (normalmente utilizadas para mezclar cemento), a las que se le agregaron cebolletas picadas, sal, pimienta y el piment d'Espelette de chile suave.
Para concluir, se vertió la mezcla de huevo en la sartén gigante, cuyo asa está hecha con un poste de teléfono, donde se revolvió durante varios minutos con enormes paletas de madera para evitar que se pegara y se quemara. El Festival incluso tiene asignados varios catadores para asegurarse de que la tortilla tenga suficiente sal y pimienta.
Esta tortilla gigantesca tarda alrededor de media hora en cocinarse y luego se sirve en 6.000 platos de papel, que se distribuyen junto con tenedores y un buen trozo de pan francés a los visitantes reunidos en la plaza.
Una tradición que persiste en el tiempo
Según comentan algunos locales, la leyenda cuenta que la tradición comenzó con el paso de Napoleón y su ejército por Bessières. Se dice que un posadero del pueblo le cocinó un revuelto tan exquisito que al día siguiente, el general pidió que todos los huevos del pueblo fueran recogidos y convertidos en tortilla para sus soldados.
En la pascua de 1973, un grupo de amigos decidió rendir homenaje a ese acto y prepararon la primera "tortilla gigante" para los ciudadanos de Bessières. Los comerciantes locales se unieron y la tradición siguió repitiéndose cada año. "Es una historia de amistad, es una historia de compartir", señala Aliette Vernheres, presidenta y gran maestra de la Confrérie, en este reportaje de Washington Post.
Y es que la fiesta de la Tortilla Gigante ya no sólo existe en Francia, sino que se celebra en muchos rincones del mundo. Hasta el momento, se realizan tortillas de grandes proporciones en seis ciudades a través de la misma organización, incluidas Fréjus (Francia), Pigüe (Argentina), Dumbea (Nueva Caledonia), Abbeville (Luisiana, EE. UU.), Granby (Canadá) y Malmedy (Bélgica). Eso sí, cada ciudad ha decidido celebrarla en diferentes épocas del año. Así que si estás interesado en acudir, te recomendamos que mires los diferentes calendarios de actividades.
Imágenes: Giant Omelette Festival
