Intel ha desvelado oficialmente que su unidad especializada en la fabricación de circuitos integrados ha arrojado en 2023 unas pérdidas operativas de 7.000 millones de dólares. Es un auténtico tropezón si tenemos presente que Pat Gelsinger, el director general de la compañía, ha apostado desde su regreso a la cúpula directiva por reforzar esta unidad de negocio y volver a colocar a Intel a la cabeza de la industria de los semiconductores.
Para poner la cifra de la que hemos hablado en el párrafo anterior en perspectiva nos interesa saber que las pérdidas que arrojó esta misma unidad de negocio en 2022 ascendieron a 5.200 millones de dólares, por lo que es evidente que la tendencia no es positiva. De hecho, en 2023 las fábricas de chips de Intel ingresaron 18.900 millones de dólares, un 31% menos que en 2022, un año en el que los ingresos de esta unidad de negocio ascendieron a 27.490 millones de dólares.
Pat Gelsinger reconoce que la cúpula directiva ha tomado malas decisiones
Las acciones de Intel han caído un 4,3% poco después de que se hiciese público el mal rendimiento económico de su unidad de fabricación de semiconductores en 2023. Era de esperar. Además, Gelsinger ha adelantado a los inversores de la compañía que 2024 será presumiblemente el peor año para esta unidad de negocio, por lo que es probable que las pérdidas cuando Intel cierre el actual año fiscal sean aún mayores. De hecho, este ejecutivo vaticina que los "brotes verdes" no llegarán posiblemente hasta 2027.
Según Pat Gelsinger este mal resultado económico ha estado provocado por una cadena de malas decisiones tomadas durante los últimos años
Según Pat Gelsinger este mal resultado económico ha estado provocado por una cadena de malas decisiones tomadas durante los últimos años en lo que se refiere a la administración de sus fábricas de circuitos integrados. Este veterano ingeniero defiende que se equivocaron al demorar la utilización de los equipos de litografía de ultravioleta extremo (UVE) que fabrica la compañía neerlandesa ASML. Según Gelsinger de haberlos empezado a utilizar antes su competitividad habría sido mucho mayor debido a que la relación precio/rendimiento de estas máquinas es mucho más favorable que la de los equipos de litografía más antiguos.
En este contexto es importante que no pasemos por alto que los primeros procesadores fabricados por Intel empleando los equipos de litografía UVE que tiene en algunas de sus plantas son los aún recientes 'Meteor Lake', que están producidos en el nodo Intel 4. A corto plazo Intel va a externalizar la fabricación del 30% de sus obleas, de cuya producción se encargará TSMC, y quizá algún otro fabricante de circuitos integrados.
Sea como sea Gelsinger ha defendido que actualmente sus fábricas están volcadas con la utilización de los equipos de litografía UVE, lo que según este directivo les hará más competitivos tanto en precio como en rendimiento. No debemos olvidar que por el momento la planta de Intel de Hillsboro (EEUU) es la única que tiene en fase de pruebas una máquina de litografía UVE de alta apertura, que es sin lugar a la más mínima duda el equipo de fabricación de chips más sofisticado que existe.
Imagen | Intel
Más información | Reuters
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