Cómo internet fastidió el secreto mejor guardado de donde vivo

Cómo internet fastidió el secreto mejor guardado de donde vivo

35 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail
Cómo internet fastidió el secreto mejor guardado de donde vivo

Vivas en una ciudad relativamente pequeña o en una gran metrópolis, seguro que sabías acerca de un rincón de la urbe sólo conocida por los locales. Con su encanto, su tranquilidad... pueden ser plazas o quizás algún pequeño tesoro en forma de restaurante con platos inmejorables.

Pero lamentablemente, internet también ha llegado a esos sitios. La masa de turistas o simplemente la gente de alrededor que no conocía ese rincón lo ha invadido, acabando con ese encanto y tranquilidad. Las Ramblas de Barcelona, que han pasado de ser un excelente paseo dominical repleto de tiendas de flores y animales a desaparecer pasto del turismo masificado, es uno de los ejemplos más famosos. ¿Crees que esto no ha afectado a nada cerca de ti? Echemos un vistazo a más lugares que se han perdido.

Plaça de Sant Felip Neri (Barcelona)

Está en pleno centro de Barcelona, pero relativamente escondida del bullicio de los turistas. Ha sido un rincón tranquilo donde ver los restos de metralla en la Iglesia que hay en esa plaza (provenientes de una bomba lanzada en la Guerra Civil), pero ahora Google Maps y otras webs guían a todos los turistas a hacerse fotografías. El lugar sigue teniendo cierto encanto, pero la tranquilidad ha desaparecido.

Los muelles de la Albufera (Valencia)

Hasta hace poco un sitio usado principalmente para fotografías de bodas, comuniones y otros eventos. Ahora es pasto de todos los instagrammers con ganas de hacer uno de esos #nofilter que tanto sirven para presumir de paisaje, e incluso tiene su fama de "picadero".

Parque de las siete tetas (Madrid)

Este vídeo es el ejemplo perfecto de la razón por la que este parque se ha visto invadido de gente: miles y miles de personas quieren su selfie ante el atardecer madrileño que ofrecen sus cerros. Por cierto, su nombre se debe a los siete montículos que tiene.

Mirador de San Miguel Alto (Granada)

De un mirador esperas buenas vistas, tranquilidad y algún que otro bar o restaurante donde poder tomar algo. Pero el de San Miguel Alto en Granada se ha convertido en un lounge donde muchas más personas de las que te gustaría ver aplauden los atardeceres andaluces.

La Casa Azul de Frida Kahlo (Ciudad de Mexico)

Lo que en un principio era un museo dedicado a la vida de la artista mexicana se ha convertido en un punto de encuentro para muchos amantes de la moda y el postureo. Los culpables: las revistas Vogue y Louis Vuitton que destacaron la "casa azul" como un sitio de moda.

Plaza de Olavide (Madrid)

Tapas

Amplia, con un mercado hasta 1974 y remodelada en 2002, ahora es pasto de eventos de baile y bullicios en sus terrazas donde tomar copas y comer a cualquier hora.

Bar Can Paixano (Barcelona)

¿Qué podemos esperar de un bar situado cerca de la playa de la Barceloneta en la Ciudad Condal, que apenas tiene letrero y que no tiene demasiada pinta de ser tourist friendly? Pues lo que ves en el vídeo: aforo completo durante la mayor parte del día. Da igual que no sirvan cerveza y que sus bocadillos estén grasientos: las reseñas en multitud de webs lo han convertido en un destino a evitar si buscas tranquilidad.

La Playa del Amor (Islas Marietas, México)

Esta playa ha aparecido en todas parte por estar dentro de un "agujero" en las Islas Marietas, y pasó de ser un paraíso escondido a pasto del turismo masificado. Tanto de bajo coste como del de lujo. La consecuencia ha sido el cierre de la playa por las autoridades por daños a nivel ecológico.

Muelle Marzana (Bilbao)

"Espacio novedoso en el que jóvenes emprendedores han abierto nuevos negocios". Así describen el Muelle Marzana en EITB. El "Soho Bilbaíno" se ha convertido en un punto de encuentro de la capital vasca por el encanto de sus bares, que no han cambiado su decoración desde que abrieron. Entre eso y entre que los alquileres (aún) no son tan altos como el de otras zonas de la ciudad, las calles de esta zona reciben ahora una afluencia continuada de personas.

Baños del Carmen (Málaga)

Los atardeceres de las playas de Málaga ya no son lo que eran. El Balneario tiene muchísima historia detrás, tanta que sus orígenes se remontan hasta principios del siglo XX cuando los bañistas de la playa tenían que separarse por sexos. Si miramos en Tripadvisor adivinamos que el estilo ha cambiado hacia menús bastante caros y platos nada malagueños como el sushi.

La Piedra del Peñol (Medellín, Colombia)

Localizada en Antioquía y cerca de la ciudad de Medellín, esta roca está considerada una de las más grandes del mundo y servía como punto en el que contactar con la naturaleza y salir de la civilización. Pero el simple hecho de que todo el mundo ha querido hacer eso al mismo tiempo ha hecho que la Piedra pierda parte de su encanto.

Chueca (Madrid)

Barrio impopular por la droga en el pasado, ahora es el sitio referencia para la comunidad LGBT y un lugar lleno de bares para poder tomar algo. Todo un ejemplo de que la transformación que puede hacer la gente no tiene por qué destruir el encanto de un lugar sino crearlo.

Bajo realejo (Granada)

El Realejo ha pasado de ser un barrio primordialmente judío, a pasar a ser cristiano y finalmente a sufrir los estragos de la red por su encanto. Llena de bares perfectos para hipsters, el barrio se ha convertido en un punto de encuentro para muchos granadinos.

Mercado de San Miguel (Madrid)

Antes era un mercado más, pero desde 2009 se ha convertido en un lugar en el que ir a comer tapas en medio de un bullicio de personas que han acabado con el encanto tradicional del lugar. Sólo hace falta ver la de veces que repiten la palabra "gourmet" en el vídeo superior para ver en qué se ha convertido.

Playa del Clotal (Oliva)

Me encantaría ver la cara que se le debe de quedar a ls habitantes más mayores de Oliva cuando van a su playa de toda la vida y se encuentran dos cabezas de Moai, propias de la Isla de Pascua, presidiendo un chiringuito venido a más con ritmos ibicencos que podéis ver en el vídeo. El ambiente y las reseñas en sitios como Tripadvisor se encargan de atraer a más gente de lo normal.

El Born (Barcelona)

Si alguien que vive en Barcelona te dice que el Born es un sitio tranquilo y resguardado, miente. Forma parte del casco antiguo de la ciudad, pero poco a poco se ha ido gentrificando hasta ser una extensión más del distrito turístico de Ciutat Vella. También se llena por las noches, debido a los bares que han abierto en la zona donde tomar algo, y ha sido un foco de gente por iniciativas como el Centro Cultural o la tienda temporal de IKEA. ¿Recuerdas la polémica de la estatua de Franco que acabó destrozada? Fue ahí.

Los almendros en Flor del Parque de la Quinta de los Molinos (Madrid)

Volvemos a la capital para ver florecer los almendros del Parque de la Quinta de los Molinos, al final de la Calle Alcalá, durante febrero y marzo. Curiosamente son muchas las webs que lo consideran "un secreto" de los madrileños, pero ya hay empresas dedicadas a organizar bodas en él. Sólo hace falta comprobar el postureo de los usuarios de Instagram para entender que poco queda de ese secreto

Badajoz

Terminamos con un sitio no demasiado concreto, más general: la ciudad de Badajoz. Antiguamente no muy visitada, ahora sus habitantes han tenido que acostumbrarse a ser el "campamento base" de incontables coches que utilizan la ciudad como punto de partida para visitar varias ciudades de alrededor que son patrimonio de la humanidad: la arqueología de Mérida, el Monasterio de Santa María de Guadalupe, los llanos de Cáceres...

Imágenes | Wikimedia, Gabriel Rodríguez
En Magnet | Hay gente haciendo cola bajo la lluvia en Madrid para comerse un plato de cereales

Comentarios cerrados
Inicio