Eso de la foto no es el salpicadero de un jet, sino el de un coche. O al menos, quiso serlo. En 1986 se presentó el Oldsmobile Incas, un diseño conceptual que apostaba por ideas futuristas como ese interior que parecía sacado de la mítica serie 'El Coche Fantástico'. Aquel coche jamás llegó a la fase de producción, pero planteaba ideas espectaculares.
El salpicadero, por ejemplo, es un despliegue alucinante de botones dispuestos sobre ese singular volante que parece todo menos un volante. Tras él, la "pantalla" compuesta por diversos relojes y marcadores digitales de siete segmentos en los que por ejemplo se mostraba la velocidad, o el cuentakilómetros.
El propio diseño del coche era también singular. La apertura de las puertas es la misma que hoy en día usan los Tesla Model X, y sorprendía también ese techo casi transparente en su totalidad.
Oldsmobile es una de las marcas legendarias en el mundo de la automoción. La empresa, fundada en 1897, tuvo su época dorada en la década de 1970 y 1980, pero acabó abandonando el mercado en 2004 ante unos competidores que poco a poco fueron dejándolo en segundo plano.
El diseño de ese salpicadero desde luego recuerda al del célebre KITT (Knight Industries Two Thousand) de la serie de TV 'El Coche Fantástico'. Aquel modelo era un Pontiac Firebird Trans Am con importantes modificaciones y tecnologías futuristas.
Algunas de ellas han acabado siendo premonitorias, como el asistente de voz con IA —acabaríamos viendo algo así con Siri o Google Assistant—, su sistema de conducción autónoma o los sistemas de prevención de colisiones.
Es probable que buena parte de la inspiración del diseño de Oldsmobile Incas partiera de aquel coche, que por cierto, luego se ha convertido en particular obsesión para quienes crean réplicas de coches legendarios.
Imágenes | General Motors
En Xataka | Los años 60 con coches flotantes: así de bonita es la realidad "retro-futurista" que imaginan estos artistas
Ver 5 comentarios