Belkin acaba de anunciar el cierre de la operación por la que compra Linksys. Con este movimiento, la compañía californiana gana el 30% del mercado estadounidense de dispositivos de red. Por su parte Cisco (propietaria de Linksys desde 2003) se deshace de su división de dispositivos domésticos, que llevaba intentando vender desde hace meses para centrarse en el ámbito empresarial.
Los términos económicos del acuerdo no han sido hechos públicos, pero fuentes no oficiales apuntan a una cifra de unos 275 millones de dólares, poco más de la mitad de lo que Cisco pagó en su día por Linksys, y es que el mercado de routers está ya maduro y los márgenes son escasos.
Todos contentos en definitiva con la nueva unión ¿Y el consumidor? De momento, desde Belkin han manifestado su intención de dejar que Linksys siga siendo Linksys. La gama de productos del fabricante de routers continuará evolucionando bajo su propio nombre.
Belkin también ha asegurado que mantendrá el soporte técnico a los clientes que hayan comprado un producto Linksys y que las garantías de compra se respetarán en todos los casos.
A largo plazo es complicado saber qué ocurrirá con ambas marcas. Linksys tiene buen nombre entre los fabricantes de dispositivos de red mientras que Belkin tiene más fama por sus cables y accesorios que por dispositivos de conexión. Si la unión servirá para mejorar Belkin o para empeorar Linksys sólo el tiempo lo dirá.
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