Honda y Nissan están convencidas de que tienen que unir fuerzas para sobrevivir. Pese a todo, han llegado a un acuerdo sin obligaciones explícitas, lo que ha levantado algunas dudas de futuras colaboraciones que son, en palabras de Honda, más que necesarias para garantizar la supervivencia en un mercado que se prevé que cambie por completo en los próximos años.
Tal y como recogen en Financial Times, el acuerdo no se ha traducido en obligaciones concretas vinculantes pero tampoco se ha descartado que en el futuro se den pasos para que cada una de las compañías invierta en su rival para garantizar una colaboración más estrecha, como Nissan ha trabajado con Renault durante los últimos año.
"Todas estas discusiones se llevarán a cabo a partir de ahora", contestó Makoto Uchida, director ejecutivo de Nissan, sobre este tema. El acuerdo de colaboración ha sido visto por algunos analistas como un movimiento de emergencia entre ambas compañías. Honda, que ya tenía un acuerdo con General Motors para el lanzamiento de coches eléctricos, parece que no seguirá explotando esta colaboración y Nissan ha tenido serios encontronazos con Renault en los últimos años, hasta el punto de que han ido desligándose en sus futuros proyectos.
"Esta asociación con Honda es una prueba de que los esfuerzos que Nissan hizo con sus socios de la alianza Renault y Mitsubishi Motors no han dado ningún fruto Parece un acto desesperado. No está claro si los ingenieros de Nissan podrán trabajar junto con los ingenieros de Honda", señala Koji Endo, jefe de investigación de capital de SBI Securities, en palabras recogidas por Financial Times.
Un acuerdo para sobrevivir
Aunque en los próximos meses se decidirá el alcance de la colaboración, sí se sabe que la misma está centrada en el abaratamiento de los costes de producción, el desarrollo de componentes específicos para el vehículo eléctrico, el software y la inteligencia artificial.
En palabras de Toshihiro Mibe, presidente de Honda, el acuerdo es clave para el futuro de la empresa. "Mantuvimos nuestras conversaciones girando sobre si es viable ser uno de los mejores fabricantes o, directamente, sobrevivir en 2030", dejó claro Mibe.
El problema, según Mibe, llega desde China y el aumento de nuevas firmas de coches eléctricos. Aseguró que la competencia es cada vez más complicada pues los rivales "están creciendo rápido y son cada vez más fuertes". Hay que recordar que el Tesla Model Y, por ejemplo, fue el coche más vendido en 2023 en Europa y que BYD es el mayor fabricante de vehículos enchufables y eléctricos del mundo.
En los últimos días hemos conocido que Huawei, con su startup, ya cuenta con el coche eléctrico más vendido en China (dentro de este segmento) y que Xiaomi empezará a vender a finales de mes su propio coche eléctrico, el Xiaomi SU7. La expectación por conocer sus ventas y el futuro de la empresa en este mercado es total.
Desde Automotive News se señala que las sinergias entre ambas compañías podrían alcanzar a 7,65 millones de vehículos y que serán claves en la electrificación de ambas compañías. Hay que recordar que tanto Honda como Nissan tienen el ojo puesto en Europa para una electrificación completa de sus gamas.
Según Automotive News, fuentes internas de Nissan apuntan a que la empresa necesita "acelerar la electrificación. Eso significa inversión y mejorar lograr una escala. Para nosotros, lo más importante es hacer que la base de proveedores sea más eficiente".
La compañía tiene entre sus manos uno de los proyectos de celdas de electrolito sólido más avanzados del mercado pero tanto desde Nissan como desde Toyota han dejado caer que estas baterías se enfocarán a los coches de precios altos. Honda, hasta ahora, también ha dudado de la viabilidad del coche eléctrico barato.
La colaboración en este sentido también se estudiará, según ambas compañías, en los próximos meses. En los últimos meses estamos viendo cómo las marcas anuncian o presentan nuevos modelos en la frontera de los 25.000 euros. Llegar aquí parece clave e, incluso, Renault y Volkswagen están manteniendo conversaciones para poner en el mercado un coche eléctrico de 20.000 euros.
Imagen | Nissan
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