Es una de las bibliotecas más importantes del mundo. Junto con hitos como el Monasterio de Santa Catalina del Monte Sinaí o la Biblioteca Nacional China, La Biblioteca Palatina y todo lo que ella incluía, especialmente todos los manuscritos saqueados por la Iglesia católica siglos atrás, ha recopilado al norte de los Alpes buena parte del saber de los hombres, razón por la que fue denominada "madre de las Bibliotecas".
Fundada en la década de 1430, es uno de los archivos más importantes del Renacimiento. Ahora, gracias al extenso trabajo de digitalización realizado por la Universidad de Heidelberg en colaboración con el Vaticano, que también ha desbloqueado sus tesoros, podemos acceder a muchos de los textos de la “madre”. 3.524 manuscritos elaborados desde 1622 redactados tanto en alemán como en griego y en latín antiguo y a los que podemos acceder ahora.
Si ocurre, como es probable, que no comprendas alguno de estos idiomas, el descubrimiento también puede interesarte, al menos desde un punto de vista estético. Los códices anteriores a la invención de la imprenta eran, como sabemos, obras de arte manual en sí mismas. Cientos, miles de ilustraciones acompañan a una cantidad de poemas y escritos que varían también en sus formas de escritura.
Palatini latini, Codex Manesse… no importa que perdamos contacto con el núcleo de la producción científica y literaria, siguen quedando unas interesantes escenas que nos reconectan con nuestros antepasados, aquellos que todavía no tenían un gran manejo de la perspectiva pero sí, como vemos, una significativa inventiva a la hora de imaginar escenas diabólicas o hiperviolentas con las que asustar a los fieles. Es cuestión de tiempo que páginas como Buzzfeed y Bored Panda o personalidades como el Hematocrítico se aprovechen de estos nuevos hallazgos para realizar sus nuevos memes medievales. Una serie de retratos tan relevantes para el erudito como fascinantes para el profano.