La industria fotovoltaica ha crecido tanto que ya no compite solo por el coste, la eficiencia y la durabilidad de los paneles solares: también lo hace por su estética. Y la solución más estética para integrar células fotovoltaicas en el tejado de una casa son las tejas solares. Tejas que generan electricidad.
Qué son las tejas solares y de qué materiales están hechas
Las tejas solares son una evolución de los paneles fotovoltaicos que se integran directamente en el tejado de una casa, reemplazando a las tejas originales. Esto las hace menos visibles que los módulos tradicionales, pero cumplen la misma función: capturar la luz del sol y convertirla en electricidad para el autoconsumo o el almacenamiento en baterías.
Las tejas solares se fabrican con materiales específicos para su uso como tejado de una casa. No tienen el marco de aluminio de los módulos tradicionales y se fabrican en materiales muy resistentes para soportar condiciones climáticas como el granizo, el viento o el peso de la nieve.
Los materiales más comunes en las tejas solares son el vidrio templado, los polímeros de alta resistencia y otros materiales compuestos que puedan soportar décadas de exposición a la climatología; pero también a la decoloración y el desgaste que causa la propia luz solar.
Los tejados solares de empresas como Tesla combinan células fotovoltaicas de vidrio de 72 W de potencia con tejas de acero resistentes a la corrosión. La durabilidad añadida del acero hay que pagarla, pero permite a Tesla ofrecer una garantía de 25 años contra el viento, el fuego y al granizo.
Otras empresas combinan las tejas solares con una capa cerámica. Su aspecto es el de una teja plana y lisa con forma de escama, adaptable al patrón poligonal de una cubierta. Pero en realidad es un módulo fotovoltaico que actúa a la vez como aislante térmico con nanopartículas metálicas que reducen la radiación infrarroja.
Hay que tener en cuenta que las tejas solares pueden ser más pesadas que las tejas tradicionales y requerir refuerzos adicionales en la estructura del techo. Nada que no ocurra también con los módulos fotovoltaicos convencionales que se instalan sobre los tejados.
¿Tejas solares o paneles solares convencionales? Una cuestión de precio
Imagen: Tesla
La ventaja de las tejas solares respecto a los paneles solares convencionales es su estética. No hace falta darle muchas vueltas a este argumento: los paneles solares pueden colocarse en soportes elevados o a ras del tejado o de la cubierta, pero las tejas solares son en sí el tejado.
Todo el tejado de una casa se puede convertir en un gigantesco módulo fotovoltaico si el instalador ofrece la opción de adaptar las tejas solares a la inclinación y la forma del techo de la casa. Las tejas solares son una solución más integrada y no rompen el aspecto del hogar.
Entonces ¿por qué no es una opción más extendida? Sobre todo, por el coste inicial. Las tejas solares suponen un desembolso más elevado que los paneles solares convencionales, y además requieren una instalación especializada, lo que acarrea gastos de mano de obra más altos, a menos que sea una obra nueva y la mano de obra se diluya con los gastos de instalación del tejado en sí.
Los precios pueden variar mucho de un instalador a otro. Un tejado solar de unos 5 KW de potencia en España parte de los 16.000 euros. Otros pueden ser prohibitivos. Por ejemplo, el Tesla Solar Roof cuesta unos 100.000 dólares con dos baterías Powerwall para cubrir 100 metros cuadrados y producir 6,31 KW. Hay incentivos y subvenciones para su instalación, pero aun así son caros.
Estos gastos podrían trasladarse al mantenimiento. Aunque se fabrican en materiales duraderos, las tejas solares pueden requerir más cuidados y reemplazos que los paneles tradicionales, debido a su integración en el tejado. Se pueden reemplazar tejas individuales, pero siguen siendo más caras que los módulos.
Por último, hay una diferencia en la eficiencia energética de ambos productos. Las células fotovoltaicas han mejorado mucho en los últimos años, pero las tejas solares suelen tener una eficiencia de conversión más baja que los módulos convencionales, generalmente del 10% al 20%.
La diferencia podría compensarse teniendo en cuenta que todo el tejado pasa a ser un captador de energía, pero los resultados dependerán siempre de la orientación de la casa y la cantidad de luz solar que llega al techo a lo largo del día.
Lo que nos devuelve al primer punto: las tejas solares son una mejora estética para los que se las puedan permitir. Para los que ni siquiera tenemos una casa independiente, siempre están los paneles solares para balcones, cada vez más frecuentes en Alemania y España.
Imagen | ML System
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