Bajo el argumento de que en un futuro los seres humanos seremos obsoletos ante la llegada de los robots a los puestos de trabajo, existen varias preguntas en torno a nuestro papel en dicha sociedad. Algunos creen que la renta básica será la solución, mientras que otros apuestan por un mayor grado de capacitación para otro tipo de trabajos, pero también hay quienes creen que podemos aprovechar nuestras ventajas biológicas para recibir un ingreso mensual, esto a través de la minería de criptomonedas con el calor de nuestro cuerpo.
Según una startup bautizada bajo el curioso nombre de 'Instituto de Obsolescencia Humana' (IoHO), se pueden aprovechar algunas características innatas del ser humano para seguir teniendo ventajas ante los robots, las cuales nos servirían para seguir impulsando nuestra economía ahora que los puestos de trabajo empiecen a escasear.
Una visión a futuro para cuando los humanos sean obsoletos
IoHO fue fundada en 2015 en Holanda bajo una visión de que los humanos deben usar sus cuerpos para producir dinero, pero no de la manera que muchos imaginan, sino a través de trabajo biológico y la producción de datos por medio de proyectos de arte e investigación.
IoHO cree que si hoy día damos nuestros datos de forma gratuita a Google y Facebook sin recibir nada a cambio, es momento de monetizar toda esta información que somos capaces de generar. Vamos, suena interesante la propuesta pero hasta el momento todo se ha quedado en palabras y no hay pruebas claras de cómo se realizaría todo esto. Por ello, están presentando un primer proyecto de minería de criptomonedas usando el calor excedente de nuestro cuerpo como electricidad.
Como sabemos, la minería de criptodivisas no es especialmente sencilla, se requiere mucha electricidad y potencia de cómputo, además de que es poco rentable si no se hace a gran escala. La idea de IoHO consiste en un traje con generadores termoeléctricos que almacenan el calor corporal y lo transforman en electricidad, la cual es usada en tareas de minería.
La compañía asegura que estuvo realizando pruebas con 37 de sus trabajadores, quienes estuvieron conectados a estos trajes durante 212 horas, tiempo en el que lograron generar 127.210 milivatios de electricidad y extrajeron 16.954 monedas. IoHO menciona que el 80% de las ganancias fueron para estos trabajadores y el Instituto sólo se quedó con el 20%.
La startup aún no ha dado a conocer los planes a gran escala que tienen con estos trajes y método para minar criptodivisas, pero se cree que están buscando financiación o vender la idea a un compañía más grande para desarrollarla. Sin embargo, la idea resulta atractiva y por ademas curiosa, aunque no se tengan muchos detalles y aún tengamos muchas dudas acerca de su funcionamiento e implementación.
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