Vamos a explicarte qué es el consentimiento previo de llamadas, un concepto de la Ley General de Telecomunicaciones que muchas empresas aprovechan para seguir molestándonos por teléfono. También te vamos a decir cómo puedes evitar darles este consentimiento.
Esta ley prohibe hacer llamadas publicitarias sin que hayas dado consentimiento, y solo te pueden llamar si tienes o has tenido relación con ellos. Sin embargo, hay algunos artículos en ella que hablan de excepciones y que algunas empresas están utilizando para esquivarla.
Qué es el consentimiento previo de llamadas
En la Ley General de Telecomunicaciones existen dos puntos que hablan de los derechos de los usuarios, y en los que se menciona la posibilidad de que exista un consentimiento previo por parte del usuario que autorice a la empresa a hacer llamadas de Spam.
La ley dice lo siguiente:
"[Los usuarios tenemos derecho] a no recibir llamadas automáticas sin intervención humana o mensajes de fax, con fines de comunicación comercial sin haber prestado su consentimiento previo para ello".
"[Los usuarios tenemos derecho] a no recibir llamadas no deseadas con fines de comunicación comercial, salvo que exista consentimiento previo del propio usuario para recibir este tipo de comunicaciones comerciales".
Vamos, que la ley lo que dice es que las empresas no nos pueden enviar llamadas de spam ni llamadas comerciales que no deseemos... salvo que le hayamos dado a la empresa un consentimiento previo para que nos las pueda realizar. Y lo que hacen las empresas es esconder este consentimiento previo para que se lo des sin saberlo, y que así te puedan seguir mareando con spam.
Las empresas hacen esto con una casilla opcional cuando aceptas las políticas de privacidad al crearte una cuenta con ellas. Esta casilla es la de aceptar recibir comunicaciones comerciales por parte de la empresa, y esto les da consentimiento previo a que si te registras en un producto, te puedan llamar para darte publicidad por cualquier otro.
Normalmente, cuando nos registramos en un producto solemos hacerlo de forma rápida: no solemos leer los términos y condiciones ni prestamos mucha atención a las casillas para aceptarlos. Y es precisamente esto con lo que juegan.
Lo hacen jugando con técnicas de patrones oscuros, con las que intentan "hackear" nuestro cerebro para que les demos consentimiento sin querer. Habrá momentos en los que en las políticas de privacidad se te presente la opción de marcarlas como leídas y aceptarlas, y junto a ellas haya otros permisos que son opcionales pero no lo parecen, y que sirven para darles estos consentimientos.
Cómo evitar dar el consentimiento previo
Lo único que tienes que hacer para evitar dar este consentimiento previo es fijarte muy bien en las casillas para aceptar la política de privacidad, los términos y condiciones o similares.
Aquí, debes saber que aunque se te presenten varias casillas, solo es necesario marcar la de He leído y acepto las condiciones de la política de privacidad, o una que sea similar. Junto a esta casilla habrá otras que son opcionales, y que no es obligatorio marcar.
Con esto, evita marcar la casilla de aceptar Todo si la hubiera al final, ya que con esto aceptarás los términos y condiciones, y aceptarás también las notificaciones comerciales y todas las opciones extra que te pidan. Y aunque no haya casilla de aceptarlo todo. fíjate bien en la de aceptar comunicaciones comerciales, que normalmente estará al lado de la de aceptar la política de privacidad.
La cosa es que marques solo la única casilla que es necesaria, y evites marcar las casillas opcionales para aceptar otro tipo de cosas, entre ellas que te hagan spam. Es complicado, porque las empresas juegan con que casi no te fijes en lo que haces y simplemente lo aceptes todo, pero solo necesitas prestar un poco de atención.
Imagen de cabecera | pexels.com
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