El sistema Braille ha sido crucial para ofrecer a las personas ciegas la posibilidad de acceder a casi todo tipo de textos, pero hasta ahora era difícil ofrecerles obras gráficas como los cómics.
Sin embargo un holandés llamado Phillipp Meyer, experto en diseño de interacción, ha elaborado un cómic para invidentes llamado "Life", que cuenta una historia basada únicamente en la presencia de distintos círculos que proporcionan distintas sensaciones táctiles.
Meyer utilizó círculos con distintas alturas y tamaños para representar a los distintos personajes de la historia --en este caso, una pareja que se enamora y tiene un niño-- y la evolución de esos círculos permitía ir comprendiendo la historia.
De hecho, este diseñador comprendió a lo largo de varias entrevistas que trasladar una imagen plana a una réplica en papel con un sistema tipo Braille no funcionaba. Era demasiado compleja, y obviaba la forma en que los ciegos perciben la entrada táctil.
El uso de formas simples y reconocibles y su conjunción con títulos contextuales y con una narrativa simple fue suficiente para que los invidentes que contribuyeron al desarrollo de Life comprendieran la historia y, aún más, la completaran con su propia imaginación.