Los Mossos d'Esquadra han presentado un nuevo y singular dron aprovechando el Mobile World Congress de Barcelona. Se trata de una aeronave muy peculiar porque, como nos comentaba uno de los responsables de su desarrollo, en realidad no es un dron, sino dos.
En primer lugar, un dron de ala fija, que es lo más parecido a un avión con un formato ya conocido y muy reconocible. Sin embargo ese diseño es desmontable y da lugar al segundo formato, que es un tricóptero.
Para lograrlo, se desmontan las alas y la cola del dron de ala fija, se le colocan unos brazos y se convierte en un dron de tres motores, un tricóptero. Esta capacidad de transformación hace que el dron se pueda adaptar a diferentes escenarios y necesidades policiales.
Así, si se necesita autonomía y distancia de vuelo, el dron de ala fija ofrece las mejores prestaciones, ya que es capaz de volar durante 120 minutos, una cifra notable tenemos en cuenta que los drones convencionales rondan los 30 o 40 minutos.
La distancia también es espectacular: puede recorrer hasta 30 kilómetros, cuando uno con un multirotor normal recorre 500 metros o un kilómetro como máximo, apuntaban los responsables del proyecto.
Además el dron incorpora una cámara Raptor tanto electroóptica como infrarroja. El sensor fotográfico tiene un óptico 40x y uno digital 80x. El de infrarrojos, por su parte, tiene un zoom de 8 aumentos, lo que hace que tanto durante el día como durante la noche "se pueden obtener imágenes que sean de interés policial".
El dron utiliza un sistema táctico de comunicaciones usado en el ámbito militar, y el dron está gobernado por una estación de tierra que hace uso de un programa de planificación de la misión.
Así es posible establecer los parámetros de la misión, tanto si se realiza en tierra como en mar, y se determinan ciertos puntos en los que se pueden realizar acciones concretas, como tomar ciertas imágenes. Es especialmente curioso que para ciertas funciones de control el mando utilizado es un mando de Xbox.
El operador de vuelo de la estación de tierra se encarga de vigiliar los parámetros del vuelo como la velocidad del viento, la altura, el estado de las baterías, o de las comunicaciones. También puede dirigir la cámara, pero esta está además controlada por un sistema de inteligencia artificial que la dirige a los puntos preprogramados.
Ese sistema de IA se encarga además de regular altura y velocidad de crucero en función de las condiciones meteorológicas, algo que permite optimizar la batería.
Para recolectar esas condiciones el dron cuenta con un pequeño sensor que mide la dirección y velocidad del viento, por ejemplo, y además se comunica con estaciones meteorológicas. Si el dron por ejemplo detecta que no tiene suficiente batería, descarta la misión y vuelve a la base.
Estamos, eso sí, ante un dron caro: cuesta 263.000 euros. Está fabricado por la empresa alemana Quantum Systems —en concreto, el modelo Vector—, y los Mossos explican que son la primera policía del sur de Europa con un equipo como este. Al parecer, solo la policía alemana tiene alguna otra unidad.
Las misiones para las que los Mossos d'Esquadra utilizarán este dron son múltiples. En el entorno marítimo vigilarán el narcotráfico, y en el terrestre también misiones de vigilancia del crimen organizado y el terrorismo". Habrá también otro tipo de escenarios, como por ejemplo "la vigilancia de vías férreas" para evitar robos de cobre que pueden afectar a los trenes de alta velocidad o a los trenes convencionales.
En Xataka | Vigilantes silenciosos: Así son los drones que utiliza el ejército español
(Imágenes e información de Ricardo Aguilar).
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