Por supuesto, la obra maestra de Park Chan-wook 'Old Boy' no era la primera película coreana en llamar la atención de los espectadores de fuera de Asia. Ese mismo año habíamos tenido el fabuloso thriller rural 'Memories of Murder', del otro director estrella del país, Bong Joon Ho. Y el propio Park Chan-wook había paseado un año antes por festivales internacionales la primera película de su trilogía de la venganza, 'Simpathy for Mr. Vengeance'.
Pero 'Old Boy' conectó de forma especial con los espectadores occidentales al plantear un sentimiento que se ha plasmado en millones de pelóculas de toda procedencia, la venganza, pero con las dosis de extravagancia y atrevimiento visual que desde entonces esperaríamos siempre en el cine coreano. 'Old Boy' se convirtió casi en una película canónica del país, al menos para los espectadores y festivales extranjeros, ya que allí el cine comercial que consume la mayoría de la población, igual que en Europa o Estados Unidos, no se parece en nada a este experimento artie pero contundente.
El enrevesado argumento de 'Old Boy' arranca cuando un hombre de negocios coreano es secuestrado y confinado durante años en una celda en la que sólo hay una televisión. Ignora por qué razón está allí y poco a poco presenciaremos su lento descenso a la locura. Cuando salga, comenzará un meticuloso proceso de venganza de quienes han destruido su vida, violento y con una buena cantidad de revelaciones extremas.
Todos recordamos de 'Old Boy' su magnífica escena rodada en plano secuencia, de un pasillo lleno de enemigos a los que el protagonista despacha expeditivamente y con ayuda de un martillo. Ha sido imitada en series aparentemente tan lejanas a esta película como 'Daredevil', lo que demuestra hasta qué punto el alcance y la influencia de 'Old Boy' la convierten en un icono único del cine coreano. Ahora, con motivo de su vigésimo aniversario, podemos volver a disfrutar de esta película en pantalla grande, ya que se reestrena en cines.
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stranno
La gran contribución de Park Chan-wook fue coger un final absolutamente de mierda, el del manga, y transformarlo en uno de los mejores giros finales de la historia del cine. Además de, obviamente, la escena del pasillo. Cogió una idea interesante, pero regularmente ejecutada, y la pulió lo suficiente para hacer un clásico.
El manga está dibujado de la hostia, pero crea un argumento infinito para un giro final que no tiene ni medio sentido, que es una chorrada total y que has estado esperando durante cien mil páginas para nada. Además de que el protagonista es un hombre normal, no recuerdo si llega siquiera a dar un puñetazo en todo el manga, mientras que el de la película es un poco ejército de un solo hombre.
También es verdad que Park Chan-wook tuvo la ventaja de que el manga estuviera acabado y saliera antes (5-7 años), que no es en absoluto lo habitual. Lo normal en Japón o Corea es que las productoras se lancen a crear un live action o una OVA cuando el manga o anime está en su apogeo, yéndose el argumento completamente a la mierda sencillamente porque está en desarrollo, que es lo que pasó con la absolutamente incomprensible película de Akira o mismamente con Battle Royale, que bueno, la película está decentilla, pero el manga es mucho mejor.
Mención especial a la versión americana, donde Thanos y La Bruja Escarlata se lo montan a tope.