Si hay algo que nos llamó verdaderamente la atención durante las pasadas elecciones norteamericanas fue ver cómo, en muchos informativos, sus presentadores hacían uso de una pantalla interactiva para mostrarnos la evolución de los votos. O incluso para adelantarnos cuál sería la previsión meteorológica durante los próximos días. Y es que hemos llegado a un punto en el que una simple pantalla ya no es suficiente para transmitir conocimientos o información sino que es necesario hacer un buen uso de la interactividad.
De esta forma, cada vez es más habitual ver pantallas interactivas tanto en empresas como en centros educativos. El auge del teletrabajo y de las clases virtuales provocado por la COVID-19 es un claro ejemplo de ello por la manera en la que ha cambiado la forma de comunicarnos e interactuar. Atrás quedan esas reuniones o clases en las que usábamos el Powerpoint y donde sabíamos que nuestro éxito dependía de si las dispositivas se veían bien y no se atascaban.
¿Para qué sirve una pantalla interactiva?
En este nuevo escenario tenemos que hablar de las pantallas interactivas de Newline que, gracias a su tecnología y fácil uso, se han vuelto esenciales tanto en el ámbito laboral como en el sector educativo.
Si hablamos de trabajo, nos hemos acostumbrado a que nuestras reuniones sean virtuales o semipresenciales y se realicen a través de videoconferencias. Y para que sean un éxito, es necesario contar, entre otras cosas, con una excelente conectividad y con equipos tecnológicos óptimos que van más allá del ordenador o el smartphone.
Ahora pensemos en una reunión un lunes por la mañana en la que tengamos una pantalla interactiva en la sala: sin dramas a la hora de enlazar dispositivos con la pantalla, haciendo todo más colaborativo y pudiendo conectar varios dispositivos a la vez a la pantalla. Y lo que es más importante: pudiendo hacer anotaciones, tanto los que están de manera presencial en la oficina o escuela como los que se conecten en remoto, sin tener que recurrir a la pizarra blanca de toda la vida.
¿Qué ganan las empresas con ello?
En primer lugar, ahorro, ya que buena parte de los gastos anuales de cualquier empresa se destinan a partidas tan diversas como material de oficina, reuniones y viajes. Las pantallas interactivas son, además de una apuesta por la innovación, una herramienta que permitirá reducir drásticamente los gastos derivados de papel, bolígrafos, cuadernos, viajes y dietas.
En segundo lugar, cuidan el medioambiente. Al reducir los viajes se reducen también las emisiones de CO2 a la atmósfera, lo que sumado a un menor uso de papel a favor de las pantallas interactivas contribuirá a la preservación medioambiental.
En tercer lugar, la digitalización. Más allá del popular uso de internet o del archivo de documentación en la nube, existen otras herramientas con las que convertir los espacios en los lugares más eficientes posibles. Las pantallas interactivas de Newline se enmarcan en esa última categoría.
En cuarto lugar, una mayor colaboración. El trabajo en equipo es una de las claves del éxito en todas las etapas de la vida. Las empresas no escapan a esa realidad, razón por la cual en los últimos años han fomentado las dinámicas de brainstorming y cooperación entre sus empleados. Gracias a estas pantallas interactivas es posible compartir documentos, hacer cambios y anotaciones en tiempo real o conectar con expertos en otros lugares del mundo.
Al ser interactivas, los estudiantes estarán mucho más atentos
El curso 2020/2021 ha empezado teniendo que hacer frente a múltiples desafíos. El inicio de las clases en plena pandemia ha obligado a las instituciones educativas y a los responsables públicos a diseñar una estrategia que permita dar respuesta a las necesidades de los estudiantes de todo el país. Tampoco podemos dejar pasar que el uso de contenidos digitales en el aula es cada vez más importante, así como las propuestas que impulsan la interacción entre los alumnos.
En este sentido, y para conseguir que el modelo de doble presencialidad se lleve a cabo con éxito, es imprescindible apoyarse en las nuevas tecnologías. Y es ahí donde, además de herramientas como ordenadores, software o red de conexión a internet, las pantallas interactivas se han vuelto imprescindibles en los últimos meses gracias a los múltiples beneficios que ofrece.
Three times more fun! Have up to three pupils use the whiteboard at the same time with their own toolbar. Check the Newline Whiteboard 3.6 for more new features 👇#interactivedisplay #whiteboard #splitscreen #newnorm #education #blendedlearning #intuitiveinterface #whiteboarding
— Newline Interactive EMEA (@NewlineEurope) September 25, 2020
Las pantallas interactivas de Newline han llegado al campo de la educación para realizar cambios en la forma en que los maestros enseñan y los alumnos aprenden. Las razones para usarlas en un aula van desde el aumento de la participación y el rendimiento en los estudiantes hasta la eficiencia al impartir la clase por parte de los profesores.
Sin olvidar que fomentan el aprendizaje activo y la colaboración ya que gracias a sus funciones multitáctiles permiten a varios estudiantes manipular el contenido en pantalla de forma simultánea, trabajando en equipo. Además, estas pantallas táctiles son compatibles con cualquier herramienta de software educativo o aplicación de videoconferencia, pudiendo interactuar de forma intuitiva con cualquier otro dispositivo.
Newline cuenta con una variedad de modelos que se adaptan tanto a las exigencias de nuestra empresa como de nuestros centros educativos. Se trata de pantallas interactivas muy intuitivas, que permiten que cualquiera se sienta cómodo utilizándolos sin apenas nociones previas. De toda su gama de pantallas interactivas, destacamos dos modelos, el RS+ y el MIRA.
La serie Mira es una alternativa a las pantallas interactivas tradicionales
La serie RS+ está específicamente diseñada para el ámbito educativo. Gracias a estas pantallas, alumnos y profesores pueden acceder a un mayor espacio de colaboración ya que soporta hasta 20 toques simultáneos, a su calidad de imagen y a las herramientas que trae integradas. Este modelo cuenta con un diseño ligero pero resistente y una interfaz de usuario personalizada. Está disponible en tres tamaños: 65″, 75″ y 86″ de manera que se adapta fácilmente a cualquier tipo de habitación.
La serie MIRA trae de serie cámara y cuatro micrófonos con reducción de ruido y un alcance de 8 metros. Es la solución perfecta para videoconferencias. Además, cuenta con la tecnología certificada Optical Bonding Newline gracias a la cual se consigue una gran calidad de imagen, colores vibrantes y un ángulo de visión de 178º.
De esta forma, la imagen es siempre nítida desde cualquier lugar de la sala. Está disponible en tres tamaños diferentes (65", 75" y 86") y es la solución ideal para conferencias ya que incorpora una cámara full HD y cuatro micrófonos con cancelación de eco y reducción de ruido.
Ayudas para la digitalización de empresas
A raíz de la crisis sanitaria se ha acelerado el proceso de digitalización de las empresas. Es por eso que los gobiernos, tanto central como autonómicos, han empezado a ofrecer ayudas y subvenciones para la adquisición de software y nuevas tecnologías que faciliten aspectos como el teletrabajo para reducir los efectos de la pandemia. Por eso, no es extraño que empresas y escuelas opten por incluir pantallas interactivas como prioridad para, de esta forma, dar el paso definitivo a la nueva normalidad.
Una nueva normalidad que, como vemos cada día, pasa por adaptar las herramientas laborales y educativas. Y en las pantallas interactivas de Newline podemos encontrar, ahora, lo que necesitamos.