Estamos en la era de las pantallas. Las estadísticas que reflejan el tiempo que pasamos delante de ellas lo corroboran. Según datos de Earthweb, en 2024, el promedio mundial de tiempo que pasamos frente a una pantalla es de 6 horas y 57 minutos, y en países como Estados Unidos llega a 7 horas y 4 minutos.
Por otro lado, el tiempo medio global en Internet fue de más de 6 horas y media en 2023, lo cual apunta a que es el uso de pantallas personales, tales como las de tabletas, smartphones o portátiles, el que predomina por encima de la televisión.
El reto de los fabricantes está en ofrecer dispositivos con una tecnología de pantalla óptima, tanto para la salud visual como para la experiencia de lectura, creación o visionado de contenidos
Más allá de las estadísticas, no hace falta más que echar un vistazo a nuestro alrededor para comprobar que los dispositivos móviles cada vez requieren más nuestra atención. Esta circunstancia supone tanto una oportunidad como un reto para los fabricantes.
La oportunidad está en un mercado muy amplio que precisa de dispositivos para, entre otras actividades, consumir contenidos online, acceder a redes sociales, compartir contenidos propios, trabajar o comunicarse con otras personas a través de aplicaciones de mensajería.
El reto está en ofrecer dispositivos con una tecnología de pantalla óptima, tanto para la salud visual como para la experiencia de lectura, creación o visionado de contenidos. Sobre el papel, como se suele decir, parece fácil, aunque es precisamente reproducir la experiencia de lectura del papel en condiciones adecuadas de luz lo que los fabricantes de pantallas han intentado reproducir, sin demasiado éxito. Hasta ahora.
Una experiencia de lectura similar a la del papel
Los primeros papiros egipcios datan de hace más de 5.000 años. El pergamino fue otro soporte usado como paso previo al papel, que empezó a usarse en China en el siglo II en sus primeras acepciones, para ir evolucionando paulatinamente durante varios siglos en el seno de culturas como la japonesa o árabe, hasta convertirse en el soporte que conocemos hoy en día.
El problema con las pantallas radica en su naturaleza emisiva, frente a la reflectiva del papel. Es decir, en general, emiten luz que pasa a través de diferentes filtros de color para conformar imágenes estáticas o en movimiento
La imprenta moderna llegó en el siglo XV de la mano de Gutenberg, logrando que el papel se convirtiera en el soporte universal de contenidos de texto e imagen (estática, claro). Con la llegada de los procesadores y las tecnologías digitales, sin embargo, hemos asistido a un proceso de digitalización de los soportes analógicos, tales como los vinilos, las cintas de casete y otros soportes magnéticos. Y también el papel, esta vez, en forma de las pantallas electrónicas.
El problema con las pantallas radica en su naturaleza emisiva, frente a la reflectiva del papel. Es decir, las pantallas, en general, emiten luz que pasa a través de diferentes filtros de color para conformar las imágenes estáticas o en movimiento que ven nuestros ojos. El papel, sin embargo, refleja la luz que incide sobre las hojas impregnadas en tinta. La experiencia más cómoda de visionado, con diferencia, la encontramos en el papel.
La luz azul y los reflejos no son buenos para la salud visual
Las emisiones de luz de las pantallas están compuestas por los colores rojo, verde y azul del espectro visible de radiofrecuencia. Cada color tiene componentes de frecuencia progresivamente más altas (longitudes de onda progresivamente más cortas). El rojo tiene frecuencias entre los 400 y 480 THz (Terahercios), mientras que el verde está en los 530 – 600 THz y el azul entre los 600 y 670 THz.
Si nos vamos a las longitudes de onda, el rojo está en el rango de 620 – 750 nm, el verde entre los 495 – 570 nm y el azul entre los 380 – 495 nm, aproximadamente. A más frecuencia y menor longitud de onda, más energía contienen las ondas electromagnéticas y más dañinas pueden resultar para nuestros ojos. Es por eso que el color azul es el que supone un mayor riesgo para la integridad de nuestra vista.
En concreto, las frecuencias entre los 415 y los 455 nm del espectro de color azul son las que están consideradas como dañinas para el ojo cuando está expuesto a ellas.
Al margen de que las frecuencias entre los 415 y los 455 nm del espectro de color azul son consideradas como dañinas para el ojo humano, los reflejos de las pantallas son otro elemento que distorsiona la experiencia de visionado
Por otro lado, los reflejos de las pantallas, generalmente recubiertas de paneles de cristal o materiales sintéticos transparentes, son otro elemento que distorsiona la experiencia de visionado, al introducir elementos en el campo de visión que se encuentran frente a los contenidos que queremos leer.
La tinta electrónica, sin ir más lejos, imita al papel en tanto en cuanto los contenidos en pantalla se forman a partir de partículas de tinta electrónica no emisivas. La experiencia de lectura es buena, pero no así la experiencia de uso como pantalla electrónica, al ser tecnologías lentas a la hora de refrescar los contenidos y precisar de fuentes de luz estables para que los contenidos se vean correctamente.
TCL NXTPAPER, la tecnología óptima para las pantallas electrónicas
TCL ha estado desarrollando la tecnología de pantalla TCL NXTPAPER, capaz de conjugar lo mejor de las pantallas electrónicas (independencia de fuentes de luz externas y velocidad de refresco de los contenidos) con lo mejor del papel (ausencia de reflejos y de frecuencias de luz azul dañinas para los ojos). El resultado es una pantalla que, a simple vista, puede pasar perfectamente por una hoja de papel o una pantalla de tinta electrónica.
TCL NXTPAPER conjuga lo mejor de las pantallas electrónicas con lo mejor del papel, dando por resultado una pantalla que, a simple vista, puede pasar perfectamente por una hoja de papel o una pantalla de tinta electrónica
Sin embargo, cuando interactuamos con los dispositivos que vienen con esta tecnología de pantalla NXTPAPER, ya sea un smartphone o una tableta, la experiencia de uso es la de una pantalla LED LCD u OLED en tanto en cuanto las tasas de refresco y la intensidad de la iluminación permiten desde jugar hasta ver vídeos, pasando por leer contenidos de texto o ver imágenes con total fluidez, nitidez y niveles de brillo.
Esta solución de TCL para las pantallas está sustentada tanto sobre hardware como software que hacen posible que la luz azul de los LED esté en la banda de frecuencia segura de entre 457 y 462,5 nm, reduciendo las emisiones de luz azul dañina en hasta un 61%.
Además, estas frecuencias permiten que los usuarios se beneficien de los efectos saludables de la luz azul sobre la regulación de los ritmos circadianos.
Eliminando los reflejos de la ecuación
TCL NXTPAPER, por otro lado, también destaca por la eliminación de reflejos. Lo logra a través de una innovadora tecnología consistente en el recubrimiento de la pantalla con nanopartículas que dispersan la luz emitida y reflejada. Al mismo tiempo, se consigue un acabado mate, no brillante, similar al papel, con un tacto que también recuerda en gran medida al del papel.
TCL NXTPAPER 2.0, de hecho, mejora el brillo de la pantalla en un 150% frente a la primera generación, al tiempo que añade la temperatura de color adaptativa que ajusta el balance de blancos a las condiciones de luz ambiente. Además, reduce aún más la luz azul, superando los mínimos exigidos por el estándar TÜV para conseguir dicha certificación. Las pantallas TCL NXTPAPER, de hecho, han sido pioneras a la hora de conseguir la certificación Reflection Free, también de TÜV.
El TCL 40 NXTPAPER fu galardonado con el Premio a la Innovación para Dispositivos Móviles en el pasado CES.
TCL NXTPAPER 3.0, presentada a principios de este mismo año, introduce un filtro polarizado circular (CPL) que ayuda a reproducir el recorrido de la luz natural (emisión, reflexión, refracción). El objetivo es que la experiencia de lectura se parezca aún más a la de la de un libro con luz natural. También cuenta con una frecuencia de refresco más elevada y tecnología de atenuación DC para evitar parpadeos.
Seguimos teniendo una fuente de luz emisiva, lo cual hace que TCL NXTPAPER no precise de una fuente de luz externa para ver los contenidos de la pantalla, como sucede con la tinta electrónica o el propio papel, aunque con una experiencia de uso que es, prácticamente, la de una hoja de papel.
Por otro lado, se mejora notablemente la lectura y el visionado de contenidos a plena luz del día. Esto también contribuye a reducir el riesgo de cansancio cuando se está delante de una pantalla muchas horas, en diferentes escenarios de luminosidad.
La gama TCL NXTPAPER
TCL ha pasado de la teoría a la práctica, integrando tecnología de última generación a precio asequible en las pantallas de dos smartphones y una tableta. Concretamente, hablamos de los terminales TCL 40 NXTPAPER y TCL 40 NXTPAPER 5G y la tableta TCL NXTPAPER 11.
Con un precio desde 179,99€, el nuevo TCL 40 NXTPAPER incorpora una pantalla de 6,78", altavoces duales y sonido boom 3D, una cámara frontal de 32 MP, un sistema de triple cámara trasera de 50 MP, con una cámara ultra gran angular de 5 MP y un sensor macro de 2 MP, 256 GB de almacenamiento y 8 GB de RAM (ampliación adicional de 8 GB de RAM virtual).
Por su parte, junto a su conectividad ultrarrápida, TCL 40 NXTPAPER 5G destaca con una HD+ NXTPAPER de 6,6", 256 GB de almacenamiento, 6 GB de RAM (ampliables a 6 GB adicionales). Disponible solo a través de operadoras, se completa con una cámara frontal de 8 MP y un sistema trasero con una principal de 50 MP, un sensor de profundidad de 2 MP y un sensor macro de 2 MP.
En lo que respecta TCL NXTPAPER 11, es una tablet de 11" y resolución 2K. Con un precio desde 199,99€ y un peso de apenas 462 gramos, viene optimizada para Android 13 y cuenta con procesador octa-core Mediatek Helio P60T, con 4GB de RAM y 128GB de almacenamiento.
Tanto los smartphones como la tableta vienen con la tecnología NXTPAPER 2.0. Si estáis pensando en comprar uno de estos dispositivos, aprovechad el momento, ya que TCL cuenta con ofertas especiales en toda la gama NXTPAPER, tanto en operadores como en mercado libre. Además, se espera que, de cara a finales de verano, TCL anuncie más novedades en esta familia de productos, incluyendo dos nuevos smartphones con conectividad 5G y, más adelante, una tablet de hasta 14 pulgadas, todos ellos con la versión 3.0 de esta innovadora tecnología.
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