Cuatro de julio de 2019. Varios objetos voladores de forma piramidal están suspendidos en los cielos de las principales ciudades del planeta. Después de dos días de quietud aérea, proyectan unos rayos de luz hacia el suelo y unas criaturas descienden de la nave. Años planteando escenarios, riéndonos de los fantasiosos que se tomaban en serio Expediente X, pero finalmente están aquí. Han llegado los alienígenas. Y han venido a violarnos.
Hagamos memoria: años atrás, en febrero de 2017, Jaime Garrido comentaba en el popular programa español de fenómenos paranormales Cuarto Milenio que los ciudadanos estamos desprotegidos en nuestros códigos de este escenario de vejación interespecies. "Si un extraterrestre te viola no existe legislación que lo castigue", decía el especialista en conspiraciones alarmado ante la falta de iniciativa de los gobiernos ante una contingencia que podría llegar a ser muy grave para toda la humanidad.
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— David Bravo (@dbravo) February 21, 2017
Estuviese elucubrando o no de más cuando defendía que los extraterrestres estaban “entrando a mansalva en las casas privadas de la gente”, lo cierto es que Garrido vio antes que nadie lo que se nos venía encima. La gente entonces se rió de él en las redes sociales, pero los mismos callan ahora ante los crímenes que están sufriendo sus cuerpos y algunos de sus seres más queridos.
“De primeras, un alien no puede ser acusado de violación por el código penal, porque no es una persona”
El primer escollo con el que se topó la justicia es el de establecer si estos marcianos eran, de facto, entes a los que podíamos considerar "personas", seres racionales y responsables de sus actos y por tanto enjuiciables, o si debíamos catalogarlos como animales. Los aliens podrían haber sido plantados por otros agentes inteligentes en las naves, podrían haber llegado ahí por una sucesión de casualidades y no ser conscientes de lo que hacen al penetrarnos.
Sí, un caso que hay que tener en cuenta al hablar de esto es que esos aliens de ahí afuera podrían haber sido simples animales, y que si nos hubieran violado no fuese más que una suerte de abuso sexual similar al que podríamos sufrir por parte de un perro o un oso. “Nuestro código penal, el que utilizamos para acusar a un violador, se usa en referencia a personas, así que nuestro código no es aplicable para los aliens porque éstos no son sujetos de derecho penal”.
Todo esto nos lo cuenta Pablo Corrales, abogado especializado en derecho espacial y e-sports en el bufete Abanlex, donde un grupo de especialistas en Derecho del Espacio ayuda a los ciudadanos con este complejo problema desde el punto de vista legislativo. Es un servicio muy solicitado en estos momentos, como es lógico, ante el ataque que buena parte de la población está sufriendo, como sabemos de sobra ante las noticias que nos llegan estos días desde distintos medios.
Caso 1: la violación instantánea y masiva es similar a una plaga animal
Aceptémoslo: hemos tenido suerte de haber podido entablar una relación con ellos. En realidad, si esos aliens hubieran sido más agresivos, si sus impulsos sexuales hubieran sido más fieros y hubieran empezado a violar masivamente a la población nada más bajar de su vehículo, nuestra única manera de combatir a esa especie por la vía legal hubiera sido si el gobierno hubiera ordenado un decreto ley.
“De ocurrir, habría sido un caso similar a si se produjera una plaga con animales que ataquen de alguna forma a las personas, y es el Estado el que se tendría que encargar de la seguridad de la población”. Pero más vale que estas palabras no te dejen tranquilo. Imagina qué difícil lo hubiéramos tenido si hubiesen portado armas más poderosas que las nuestras… Podrían haber llegado a matarnos. O peor aún, podrían habernos esclavizado, también sexualmente, y abusar de nosotros tantas veces como quisieran.
Caso 2: cuando ya hemos incluido a los aliens en nuestro código penal
Pero no, tal y como vemos, pasan los meses y nuestra relación con esa otra raza avanza positivamente. Corrales lo predijo: "lo que ocurriría sería, primero, una serie de contactos con la otra especie que primasen la dimensión de paz política entre nuestros pueblos, y luego en segundo nivel se tratarían temas más secundarios como la inclusión en los códigos legislativos de los extraterrestres".
Y eso es lo que hicimos: les sometimos a un largo y sesudo estudio científico para poder certificar que los aliens son conscientes y responsables de sus actos. Nos ha llevado meses de cooperación internacional con el incansable trabajo de científicos de distintas ramas y países, pero con un poco de paciencia conseguimos tener ese informe.
Entonces, en segunda instancia, “se emite un mandato por parte de la ONU de que estos bichos serán, a partir de ahora, nuestros iguales a nivel legal, y ese mandato va bajando jerárquicamente a los diferentes Estados, comunidades autónomas, etcétera para ir incorporándolos a las leyes de cada región”.
"Eso sí, si nos ponemos estrictos legalmente, una vez se les ha reconocido como personas no se deberían poder quedar aquí porque no tienen documentación humana, y si tuvieran documentación alienígena, de su planeta, debería ser un planeta reconocido por nuestras naciones para poder acceder a un permiso de residencia". Como muchos juristas han lamentado en distintas redes, las naciones han estado tolerando su estancia en la tierra sin permiso legal. Y de ahí el desastre social en el que estamos inmersos.
Caso 3: el alien te viola y luego se va a Urano
Es uno de los casos más frecuentes de los que estamos leyendo estos días entre las decenas, cientos de afectados de los actos de estos monstruos espaciales que vinieron primero como amigos y se han revelado como abusadores. Plantan sus naves en nuestras ciudades, violan a nuestros ciudadanos y luego se marchan, dejando a sus víctimas con una mezcla de sensaciones que pasan de la incredulidad a la vergüenza.
Para ellos, Corrales tiene una buena noticia: lo que dicen ahora mismo nuestras leyes es que “tanto la luna como todos los cuerpos celestes pertenecen a toda la humanidad, con lo cual, en un principio, estos sujetos están bajo la soberanía de la humanidad, y actualmente es como si su hogar nos perteneciese a nosotros”.
Así que, si conseguimos traerlos de vuelta o logramos que desde su planeta los organismos jurídicos firmen un tratado de extradición, cada uno de esos violadores podrá ser juzgado en nuestras salas de justicia. Ahora bien, como recalca Corrales, lo que deberían haber hecho inicialmente los Gobiernos de todo el mundo “habría sido limitar los movimientos de estos seres, no dejarles corretear por ahí en primera instancia. Tendrían que haberles hecho, como mínimo, controles biológicos para detectar que no son dañinos para los humanos, y en general evitar el contacto directo con otros humanos de forma regular".
Caso 4: sin pruebas no hay violación, alienígena o no
También, como era de esperar, hay muchas denuncias a las que tampoco sabemos si podemos dar cabida. Algunas de las víctimas tienen en sus cuerpos huellas del ataque sexual, líquidos de extraña consistencia que han ido entregando a los agentes de las comisarías de medio mundo. Pero también los hay que dicen haber sido violados pese a no tener absolutamente ninguna prueba de ello. Ni testigos ni marcas físicas. Según comentan algunos, "los marcianos pueden ponerse en un estado que les hace intangibles, pero lo que yo viví es una violación en toda regla".
En ese caso, sintiéndolo mucho, Corrales cree que se juzgará de la misma manera que le ocurre a las víctimas de abusos sexuales que no tienen pruebas físicas o testimonios ajenos. "Se asume una presunción de inocencia del acusado y sin pruebas, testigos o grabaciones no se les podría condenar. Exactamente igual que ocurre en los casos entre humanos".
Caso 5: ¿y qué hago si las autoridades son mentalmente abducidas?
Pero, tal y como están las cosas, ya no nos podemos fiar de nada. Ni de nuestros propios gobiernos. Sabemos que esos seres son muy inteligentes, así que tampoco nos extrañaría que, si la escalada de violencia aumenta, tuvieran la capacidad de suprimir la voluntad de nuestros policías y gobernantes y someternos a estos abusos.
En tal caso, y si la humanidad consiguiera reconquistar sus capacidades mentales tiempos después... ¿Podrías seguir llevando al estrado al culpable del abuso que tú sufriste?
Corrales es optimista y cree que sí podría perseguirse el delito. "Primero se tendría que identificar quién te lo ha hecho y luego en qué condiciones se ha logrado la victoria sobre los extraterrestres. Yo entiendo que se habrán firmado los tratados, pero siempre y cuando no haya prescrito el delito, el procedimiento será la emisión de una orden de búsqueda intergaláctica por parte del juez que requiera al extraterrestre en cuestión, el responsable de tu violación, para ser extraditado a tu país y ser juzgado por una corte de tu territorio".
Ahora ya lo sabes, la justicia está (más o menos) de tu parte.
