EEUU pone fin a los abusos de las grandes empresas: adiós al uso de las cláusulas de no competencia

  • Las empresas estaban usando estas cláusulas como método para retener talento, no para evitar fuga de innovación

  • La FTC estima que con la prohibición de uso de estas cláusulas se abre la puerta a la competencia por el talento y subirán los salarios

EE.UU prohíbe las cláusulas de no competencia para los empleados
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La Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos (FTC por sus siglas en inglés), ha puesto coto a las cláusulas que coartaban la libertad de los empleados de las grandes compañías (principalmente tecnológicas) para cambiar de empleo o iniciar sus propios proyectos empresariales.

Con esta medida, la FTC espera que se generen más de 8.500 nuevas empresas al año, aunque las grandes corporaciones ya han mostrado su desacuerdo por el alto riesgo de fuga de innovación que supone dar vía libre a sus empleados para irse (y llevarse con ellos sus ideas) a la competencia.

Qué son las cláusulas de no competencia. La cláusula de no competencia es un elemento muy común en los contratos laborales y de negocios en todo el mundo, pero especialmente común en las empresas tecnológicas o con un gran peso en innovación. Esta cláusula hace referencia a la restricción incluida en el contrato laboral de un empleado que impone que este no pueda trabajar o participar en una actividad similar a la que realiza o ha realizado recientemente para esa empresa, durante un cierto período de tiempo.

Es decir, si trabajas para una empresa que fabrica ventiladores, no puedes dimitir para ir a montarte tu propia empresa de ventiladores, ni aceptar la oferta de su competencia para ir a fabricar ventiladores para ellos.

La FTC se pone dura contra el abuso. La Comisión Federal de Comercio estima en un comunicado que unos 30 millones de empleados (uno de cada cinco empleados) está sujeto a una cláusula de no competencia, lo que les impide cambiar de empleo libremente.

El problema principal es que esta cláusula se ha utilizado como forma para retener talento o evitar que se vaya a la competencia, en lugar de como medida para evitar la fuga de información industrial para la que fue creada. “las cláusulas de no competencia son una práctica generalizada y a menudo de explotación que impone condiciones contractuales que impiden a los trabajadores aceptar un nuevo trabajo o iniciar un nuevo negocio. Estas cláusulas a menudo obligan a los trabajadores a permanecer en un trabajo que quieren dejar o soportar otros daños y perjuicios significativos”, señala la Comisión en su comunicado.

A las empresas no les ha gustado la prohibición. La Cámara de Comercio de EEUU, representante de las empresas, se opone en firme a la prohibición y, según anuncia en un comunicado, planea demandar a la FTC para bloquear la regla. “Es una flagrante toma de poder que socavará la capacidad de las empresas estadounidenses para seguir siendo competitivas”, argumentan en su comunicado.

La gran excepción: los ejecutivos senior. Para mantener el espíritu inicial de las cláusulas de no competencia, la FTC propone una excepción a su prohibición que se aplicaría exclusivamente a los ejecutivos o puestos senior donde realmente se trabaja con información sensible para las estrategias empresariales. No para los empleados base.

La FTC calcula que estos empleados estratégicos suponen el 0,75% del total y los define como aquellos que ganan más de 151.164 dólares anuales y ocupan un puesto de toma de decisiones en el organigrama de la empresa. Con esta norma, la FTC desactiva el abuso de estas cláusulas como medida de retención para el resto de empleados de producción, administración, etc.

Más peso para las NDA. Por otro lado, la prohibición de la FTC da más peso a los contratos de confidencialidad (NDA por las siglas en inglés de Non Disclosure Agreement), que el 95% de estos empleados estratégicos ya tenían. Por ello, las cláusulas de no competencia tenían la única motivación de retener a los empleados más cualificados que, de todos modos, no podrían revelar o utilizar los secretos industriales de sus antiguas empresas.

Abre la puerta a la competencia salarial. La FTC estima que la prohibición del uso indebido de estas cláusulas podría contribuir a la competencia por la captación de talento y mejorar los salarios y condiciones laborales en hasta 488.000 millones en una década.
"Las cláusulas de no competencia mantienen bajos los salarios, suprimen nuevas ideas y roban dinamismo a la economía estadounidense, incluidas las más de 8.500 nuevas empresas que se crearían cada año una vez que se prohíban las cláusulas de no competencia", declaraba la presidenta de la FTC, Lina Khan en el comunicado hecho público.

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Imagen | Pexels (Andrea Piacquadio)

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