Honor 6 Plus, análisis: los phablets de menos de 400 euros se ponen serios

Honor, la segunda marca de Huawei con la que aspira a ganar una zona del mercado donde la competencia es más que feroz, no quería quedarse sin opción phablet y presentó a finales del año pasado un modelo Plus. Sí, con más pantalla.

El Honor 6 Plus y sus 5.5 pulgadas llegó hace unos días a algunos mercados europeos, entre ellos España. En Xataka ya hemos tenido oportunidad de ponerle las manos encima con detenimiento para contarte si la buena línea que hemos visto en los Honor (con el propio Honor 6 a la cabeza) se cumple o no con el mayor de la familia. Ya está aquí el análisis del Honor 6 Plus en Xataka.

Honor 6 Plus, principales características técnicas

Con un precio de 399 euros, el Honor 6 Plus ofrece una completa ficha técnica con apartados donde destaca especialmente, siempre sobre el papel, como es el caso de la memoria interna o la capacidad de la batería. Pero también hay datos de la tabla en que podemos comprobar el por qué de considerarlo por ahora un gama media. Veremos si nos convence esta mezcla.

	Honor 6 Plus, características técnicas
Dimensiones físicas	150,46 x 75,68 x 7,5mm, 165 gramos
Pantalla	IPS LCD 5,5 pulgadas
Resolución	1080 x 1920 píxeles (401 ppp)
Procesador	Kirin 925, 4 núcleos a 1,3 GHz y 4 a 1,8 GHz
RAM	3 GB
Memoria	32 GB (ampliable con tarjetas microSD)
Versión software	Android 4.4.2 con EMUI
Conectividad	LTE, NFC, Bluetooth 4.0, Wi‑Fi n, GPS, IR
Cámaras	Principal doble de 8 MP // Vídeo FullHD // Secundaria 8 MP
Batería	3600 mAh (no extraíble)
Precio	399 euros

Como os hemos adelantado, la capacidad interna del terminal así como su batería son junto con la pantalla los tres puntos más destacados. Por contra, en conectividad (sin Wifi ac o BT 4.1), versión de Android o extras como podría ser la carga rápida, el Honor 6 Plus se merece quedarse en la gama media de smartphones. Justo donde se sitúa su precio.

Honor 6 Plus, análisis en vídeo

Diseño Honor, diseño Huawei

El Honor 6 Plus es llamativo. No por sus colores, blanco y negro en el mercado español, sino por su buena construcción y acabado, algo que no se deja mucho ver en estos precios en los que se mueve este terminal. El nuevo terminal repite detalles del diseño y sensaciones generales que os contamos al analizar a su hermano pequeño, el Honor 6. Pero en este equipo se ha ido todavía más allá.

El acabado del Honor 6 Plus es en cristal pero con matices. No esperes el tacto de un iPhone 4 o el de un Xperia Z porque en realidad, la parte trasera del Honor está fabricada con fibra de vidrio. El resultado es muy curioso: da sensación de calidad y robustez, la apariencia es de cristal, pero el tacto es más parecido al plástico. Esta idea se refuerza con un patrón incluido en el acabado que nos gusta mucho y da bastante juego. El color blanco que hemos probado en Xataka es nuestro preferido básicamente porque con este acabado de cristal brillante en el tono negro la suciedad y huellas son una pesadilla que no sufrimos con este tono tan claro.

Como le pasa quizás demasiado a Huawei y su submarca Honor, el diseño de terminal no inspira una personalidad propia. Basta echar un vistazo al frontal para comprobar la ausencia de elementos o rasgos que nos permitan conocer de qué terminal se trata con un solo vistazo.

En general el Honor 6 Plus es un terminal de muy buen acabado pero soso. A destacar el marco metálico que tan bien le sienta, aunque no recorre la totalidad de los laterales y deja la parte inferior sin rematar, justo donde se encuentra un solitario puerto microUSB. En la parte superior queda la entrada de auriculares, un micrófono y un pequeño puerto de infrarrojos.

	Honor 6 Plus	Sony Xperia Z3	Galaxy Note 4	LG G4	iPhone 6 Plus
Pantalla	5,5"	5,2"	5,7"	5,5"	5,5"
Peso	165 gr	152 gr	176 gr	155 gr	172 gr
Grosor	7,5 mm	7,3 mm	8,5 mm	9,8 mm	7,1 mm

El resto de las conexiones y elementos físicos hay que buscarlos en el lateral derecho. Ahí está el control de volumen y encendido, con relieve, acabado metálico y buen recorrido. Y justo bajo ellos están dos ranuras que requieren de una herramienta para abrirlas. Dentro se esconde uno de los secretos de este Honor 6 Plus: doble ranura SIM. En una de ellas hay espacio para una tarjeta microSIM por un lado y una microSD por el otro. El otro compartimento es para una segunda tarjeta SIM, en este casi de tipo microSIM. Ambas las podemos gestionar posteriormente con ayuda del sistema operativo.

El Honor 6 Plus, pese a estar hablando de un smartphone con 5.5 pulgadas de diagonal, es cómodo en mano. No puedes manejarlo con una sola de ellas pero nos ha parecido muy equilibrado a nivel de dimensiones, grosor y peso. No ofrece el dato más reducido de entre los competidores alrededor de las 5.5 pulgadas de diagonal de pantalla en ninguna de ellas y quizás ahí esté el secreto para que nos parezca tan interesante de usar. Algo que nos ha gustado mucho es que, pese al uso del cristal en todo su cuerpo y no contar con marcos que sobresalen, el Honor 6 Plus no está entre los smartphones especialmente delicados por el tema del deslizamiento y el peligro de que se nos caiga de las manos.

Pantalla, el otro gran valor del Honor 6 Plus

Si justo os comentaba que el frontal del Honor 6 Plus era la manera más directa de comprender por qué decimos que a nivel de diseño queríamos algo más de personalidad, no nos importa tanto este aspecto cuando la misma está encendida. Entonces nos da igual qué haya logo o no, botones físicos o no. La calidad del panel IPS que monta este Honor 6 Plus es la protagonista y nos olvidamos de todos esos anteriores males.

El Honor 6 Plus apuesta por una combinación de garantías: panel IPS, tamaño de 5.5 pulgadas y resolución 1080p. La densidad es de 400 ppp, así que no podrás quejarte de poca nitidez al leer contenido o multimedia. La reproducción de color es intensa pero natural, el contraste más que adecuado y los ángulos de visión solo pierden algo de brillo pero más debido a factores externos. La respuesta táctil es buena y tanto brillo máximo como mínimo están dentro de lo que hay que exigirle a un terminal que cuesta 400 euros, aunque nos hubiera convencido más intensidad máxima.

La gran pega de la pantalla del Honor 6 Plus son los reflejos. Tanto en exteriores como en interiores cuando apuramos el ángulo de visión, los reflejos son bastante importantes. Esto le penaliza la visibilidad a la luz intensa del día, donde el brillo máximo es correcto pero no destacable, y no aporta un plus que pueda compensar este defecto. En modo manual el brillo máximo puede subir un poco respecto al que obtenemos en modo automático, pero no lo suficiente.

Asociada con la pantalla, Huawei deja configurar accesos directos a algunas aplicaciones con solo dibujar sobre ella. Así, podemos dibujar una C en la pantalla apagada para ir directamente a la cámara, o una E para el navegador. Esta opción, que podemos activar o desactivar a nuestro gusto, se complementa con el doble toque sobre la pantalla para acceder a la de bloqueo sin tocar el botón de encendido y apagado.

Tu propio procesador: más trabajo del que parece

Huawei es de esas compañías valientes que están apostando por diseñar sus propios procesadores. En el caso de los chinos hay que hablar de los HiSilicon Kirin. En el Honor 6 Plus se ha dejado concretamente el Kirin 925. En él encontramos cuatro núcleos Cortex A15 a 1.8 Ghz y otros cuatro A7 a 1.3 Ghz, con la parte gráfica a cargo de la GPU Mali-T62. Esta combinación va bien acompañada de 3 GB de memoria RAM y 32 GB de memoria interna.

Aquí nos alegra mucho ver que un terminal que está por debajo de los 400 euros no se limita a 8 o 16 GB y se lanza a ofrecer una buena capacidad de memoria interna de serie (32 GB) pero además nos da la posibilidad de ampliarla con tarjetas de memoria microSD. Muy bien Huawei.

Pero vamos ahora con lo interesante de esta sección: el rendimiento del procesador Kirin tanto en fuerza bruta como en la gestión de una batería que promete mucho.

Respecto al procesador Kirin, no estamos ante un chip que pueda plantar cara a los Snapdragon 810 pero sí que podemos considerarlo dentro de la liga de los mejores modelos con rendimiento del año pasado. Y eso es todavía garantía en este 2015. Con matices.

A nivel de fuerza bruta, el procesador Kirin 925 cumple con tareas exigentes como el navegador con varias pestañas abiertas, con juegos con importantes cargas gráficas o edición de fotos y multimedia intensivo en el terminal. Los datos de los benchmarks nos dejan cifras buenas aunque alejadas de los gama alta de este 2015, como estaba previsto.

	Honor 6 Plus	Galaxy S6 Edge	HTC One M9	Huawei P8	Sony Xperia Z3	Galaxy Note 4	iPhone 6 Plus
Antutu	44595	63422	56335	44595	41271	46248	46942
Geekbench (Single/Multi)	893 / 3078	1442 / 4469	1145 / 3758	1101 / 2096	--	--	1623 / 2906
Quadrant	9901	36379	--	23186	20808	23222	--

Pero otra cosa es el día a día con el terminal. Aquí hemos vivido una experiencia donde no eran extraños los tirones cuando se trataba de multitarea o especialmente en transiciones del sistema operativo, abrir carpetas o movernos por los menús de configuración. El caso más claro está cuando pulsamos en el botón para ver las aplicaciones abiertas: siempre nos tarda más de un segundo en mostrarnos la pantalla.

Mirando los datos de las pruebas que le hemos hecho, el principal responsable a nivel de rendimiento real del equipo es el sistema operativo. La potencia teórica la tiene este Kirin pero las sensaciones en el trabajo diario con el terminal no nos transmiten lo mismo.

Como veremos en la sección de software, no llegar al mercado con la última versión de Android y encima que sea el culpable de una experiencia con dudas a nivel de rendimiento no es buena noticia para Huawei ni su capa EMUI.

Por cierto, cuando jugamos o le exigimos un poco al Honor 6 Plus, el calor en la parte trasera del terminal (y no solo en una zona concreta) es muy apreciable, algo a lo que no ayuda el acabado en cristal.

Buena capacidad de batería, no tan buena autonomía

Otra no muy buena noticia asociada a la aventura con el procesador Kirin es la autonomía. Un terminal con una batería cuya capacidad es de 3600 mAh y que cuenta con una pantalla FullHD debería ser una combinación sencillamente aterradora para sus rivales. Pero no termina de ser así.

En la prueba con PC Mark la cifra que nos ha dejado el test es de 3 horas y 18 minutos, casi una hora menos que el Honor 6, mientras que en nuestro día día nos ha costado mucho superar habitualmente las 2.5 horas de pantalla encendida.

Aquí nos tememos que el trabajo del procesador y la optimización a nivel de software que es capaz de hacer Huawei no están en sintonía. Con esa gran capacidad de batería y nada que haga saltar las alarmas a nivel de un apartado especialmente devorador de energía, apenas hemos llegado al final del día con batería suficiente. Para el test hemos usado el terminal con juego, reproducción multimedia y sobre todo mucha navegación web, redes sociales y notificaciones, demandando tanto conectividad como uso de pantalla especialmente.

También probamos a darle un uso más común donde no se abusara de la pantalla ni tampoco de la conectividad. En esa situación, el Honor 6 Plus sí que puede alcanzar dos días de uso, pero insisto, con el terminal la mayor parte del tiempo en modo de espera, donde el Kirin y Huawei sí parecen haber hecho los deberes. Estos datos de nuestras pruebas se corresponden con otros test donde el Honor 6 Plus destacaba en autonomía en modo espera pero no tanto cuando se le exigía.

Por otro lado, poner en un terminal una batería de gran capacidad tiene otro foco de peligro: el tiempo de carga. Usando un puerto USB de un ordenador son más de 4,5 las horas necesarias para tener el equipo con la batería al 100%. En el caso de usar un conector de red, la carga llega prácticamente a las tres horas, un dato que nos parece alto. Y aquí no tenemos carga rápida que nos enmiende algo.

Cámara del Honor 6 Plus: dos no siempre es mejor que uno

Tres cámaras de 8 megapíxeles. Ése es el argumento principal que le hace a Huawei presumir de la función de cámara de fotos de su Honor 6 Plus. ¿Tres cámaras?

Exacto, pero como anteriores iniciativas similares, en realidad la segunda cámara principal se usa como apoyo para determinados "trucos" que prometen mejorar algunas fotos que hacemos con el smartphone.

El sensor principal de la cámara del Honor 6 Plus es uno de 8 megapíxeles, sin muchos más datos de ningún tipo que la apertura de f2.0. Con él se toman la mayoría de las imágenes. Pero hay una segunda cámara idéntica a la primera situada justo al lado y con la que según Huawei conseguimos una ayuda extraordinaria que permite mejorar las fotos con poca luz y también podemos usar para conseguir imágenes con resolución de 13 megapixeles. ¿Por qué estos experimentos cuando se puede optar directamente por un sensor de 13 megapixeles?

Vamos a comprobar hasta dónde llegan las promesas de Huawei. De forma global, la cámara del Honor 6 Plus es rápida disparando pero no queda lista inmediatamente para el siguiente disparo. Hay como un par de segundos de espera que ya pensábamos que en 2015 estaban superados.

La interfaz es muy sencilla, teniendo lo básico al alcance: botón de disparo, cambio de modo (Foto, Vídeo y Apertura amplia), acceso a la galería de imágenes de la cámara, a los filtros, a la cámara frontal, al flash o el menú secundario.

En esa nueva pantalla encontramos los modos especiales donde está el de Belleza, la panorámica o el HDR, y los menos habituales Marca de Agua (que nos añade lo que promete con los datos de la toma y su posicionamiento), Mejor Foto (toma varias a modo de ráfaga y podemos escoger nosotros la mejor si no nos convence la que seleccione el terminal de forma automática) o el misterioso Modo Noche.

Ese modo nocturno es la principal ayuda en la que confía Huawei cuando la luz escasea. Efectivamente permite conseguir imágenes más luminosas mediante el disparo de varias tomas en las que la cámara varía la sensibilidad poco a poco pero esa acción se realiza durante casi 20 segundos. En ese tiempo, el más mínimo movimiento de la cámara puede provocar que como resultado final obtengamos una imagen movida. Más luminosa, cierto, pero movida. Y eso no nos vale.

Otro modo especial del que presume el Honor 6 Plus gracias a la doble cámara se llama Apertura Máxima. Con él podemos de forma artificial reducir la apertura hasta menos de f1.0, lo que nos permite tomar imágenes con muy poca profundidad de campo o incluso reenfocarlas después del disparo. En ambos casos lo que Huawei promete funciona, pero el resultado nos parece algo artificial.

Si nos centramos en las fotos clásicas, la cámara del Honor 6 Plus nos deja buenos resultados si no salimos de la pantalla del smartphone. Con buena luz podemos conseguir imágenes resultonas, con rango dinámico amplio pero no extraordinario (aquí mucho mejor tirar de HDR siempre), buena reproducción del color pero que en cuanto nos acercamos ya se dejan ver deficiencias de la cámara a nivel de detalle. Algo de lo que peca mucho la cámara del Honor 6 Plus es de subexponer bastante algunas tomas donde no debería haber problema alguno.

Esa resolución de 8 megapíxeles, como comentamos con el iPhone 6 Plus, no permite ampliaciones grandes, y a poco que queramos tener detalles de una fotografía en concreto, nos quedamos sin píxeles con los que trabajar. En el caso del iPhone le salva el procesado, algo en lo que no acaba de acertar del todo Huawei, dejándonos con fotos sin demasiados detalles. En la pantalla del smartphone se verán bien pero no más allá.

Cuando la luz se reduce podemos recurrir al doble flash LED, no de dos tonos ojo, pero si no lo hacemos, ya comenzamos a ver que la cámara sufre para recoger luz y no perder todo el detalle en ese proceso para reducir el ruido que se manifiesta en las imágenes.

Huawei da una opción que nos gusta para acceder de forma directa a la cámara: doble pulsación sobre la tecla volumen bajo. Cuando lo hacemos el terminal salta automáticamente a la aplicación de cámara, cuestión de 2-3 segundos, pero todavía podemos tratar de ganar uno segundos si preferimos que, además de activar la cámara, con esa doble pulsación se tome una fotografía al instante.

Otro detalle que nos gusta de la interfaz de cámara del Honor 6 Plus es que una vez seleccionado un modo de disparo, para desactivarlo no hay que ir de nuevo a la opción y retractarnos, sino que hay una cruz que directamente anula esa selección.

Por último, en la configuración podemos modificar la resolución de la cámara, decidir dónde se almacenan las imágenes por defecto (tarjeta o memoria interna), aplicar el temporizador (algo que nos gustaría que estuviera más a la mano) o funciones como capturar sonrisas o seguimiento de objetos por parte del enfoque automático.

Los controles manuales brillan por su ausencia y apenas podemos escoger la ISO o el balance de blancos. Y todo ello desde este submenú, por lo que los pasos hasta llegar ahí nos parecen excesivos. Sí que es más útil el poder fijar fácilmente un punto de enfoque y exposición diferente, lo que nos abre las posibilidades para sacar mejor provecho de la cámara.

El Honor 6 Plus permite la grabación de vídeo con calidad 1080p. En nuestras pruebas ha cumplido pero no destacado especialmente. Echamos sobre todo de menos un sistema de estabilización que le da más serenidad a las grabaciones a mano alzada, que es como se realizarán en la inmensa mayoría de ellos.

En cuanto a la cámara secundaria, es de 8 MP con sello Sony como la principal, y la calidad de imagen incluso en situaciones de poca luz nos ha gustado bastante. Huawei nos ayuda a salir mejor con una miniatura del resultado en la esquina superior, a donde nos invita a echar al vista para que salgamos mirando a la cámara y no a la pantalla. Y sí, hay modo de belleza, aunque no hace milagros ni tampoco es tan exagerado como en otros terminales.

Huawei, EMIU necesita Android 5.0

Si los fabricantes más habituales y podríamos decir que occidentalizados desde Android 4.0 han dejado casi atrás sus capas de personalización, con los fabricantes asiáticos, especialmente chinos, el camino es contrario. Allí puede que guste personalizar al máximo el terminal incluso de una manera que podríamos llamar agresiva, pero en los nuevos mercados a los que quieren abrirse de forma más seria no hay ya cabida para temas de este tipo.

La capa protagonista de los terminales de Huawei es EMUI. Y da rabia hablar del apartado software de este Honor de manera negativa porque la capa de Huawei tiene buenas ideas. Pero ninguna es tan importante (no podría serlo) como para compensar un fallo garrafal de este Honor: llegar a mediados de 2015 sin Android 5.0. Sí, parece increíble pero lo hace con KitKat.

Partiendo de ahí, la valoración del terminal pierde uno de los pilares que debemos exigirle a un smartphone importante a estas alturas. Incluso en esta gama media.

En el día a día con EMUI nos hemos encontrado con que la disposición de las aplicaciones en la capa EMUI no es la habitual en los terminales con Android sino la de iOS. No hay hub central con todas las aplicaciones sino escritorios donde quedan todas las aplicaciones, las cuales podemos mover entre ellos o agrupar en carpetas. Aquí depende de las preferencias de cada uno, pero en hub de Android es una buena solución que no se ve mejorada con esta opción.

Una idea que nos gusta bastante es la organización temporal de las notificaciones y todo lo que podemos hacer con ellas. O el poder buscar una determinada aplicación solamente deslizando el dedo en cualquier escritorio, justo como pasa en iOS. Sí, hay buenas ideas, pero quedan superadas por las malas noticias que nos deja la capa más a menudo.

Aquí nos queda la duda de cómo sería la experiencia en este Honor 6 Plus con una versión actual de Android sin una capa superior tan demandante de protagonismo. En este caso además viene adornada con una cantidad de software preinstalado y funciones básicas duplicadas sobre el sistema operativo que no es habitual ver.

Honor 6 Plus, la opinión y nota de Xataka

Hay que ver cómo está de competida la gama justo por debajo de la alta. Terminales que por precio no encajan en la idea de un gama alta, que presentan más compromisos que los de la gama alta, pero que nos dan un resultado más que notable. El Honor 6 Plus, con precio de 399 euros, es un gran ejemplo.

Este terminal puede presumir de una pantalla de calidad y un diseño que nos convence a pesar de que nos parezca que carece de un efecto de atracción que creemos necesario en un terminal hoy en día. Incluso a nivel de especificaciones, con su procesador propio, 3 GB de memoria RAM y una memoria interna de 32 GB que además podemos ampliar, es un smartphone bien completo.

Pero llegar al mercado con una capa que resta más que aporta, como hace años la mayoría, y encima sin un Android 5.0 de base, es un fallo importante que además afecta a la experiencia y la autonomía, de la que esperábamos más. En cuanto a la cámara, ni brilla ni decepciona, quedándose en un terreno de indecisión que se palpa claramente por la inclusión de ese tercer sensor que no acaba de ofrecer nada extra.

Otro detalle que no beneficia nada a este Honor 6 Plus es que no puede quedar claro que, con Huawei ya bien nombrado en Europa, se intente desdoblar la marca, especialmente en una gama donde la propia Huawei está compitiendo con equipos como el P8.