Google se nos había despistado en el segmento de los relojes inteligentes, pero parece que vuelve a la carga. Además, no lo hace solo: se alía con Samsung, y aprovechará la pasada adquisición Fitbit para lograr volver a impulsar su plataforma, que ahora se llama Wear, y no Wear OS.
Esa alianza con Samsung es llamativa, y Wear será el resultado de fusionar lo mejor de Tizen con lo mejor de Wear OS. Hay aquí muchas promesas de futuro para competir con el omnipresente Apple Watch, y precisamente para ayudar estará Fitbit y su experiencia en el ámbito de la salud y los cuantificadores de actividad física.
Para hablar de todo ello contamos en el episodio de hoy de Despeja la X con Enrique Pérez (@lyzanor), editor en Xataka, y con un servidor, Javier Pastor (@javipas), también editor en esta casa. La producción corre como siempre a cargo de Santi Araújo (@santiaraujo).
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Tizen y Wear OS unen fuerzas
El anuncio de Google y Samsung es importante y marca un potencial punto de inflexión para una plataforma que durante años ha estado languideciendo.
A pesar de su prometedor lanzamiento en 2013, Android Wear nunca llegó a acabar de convencer a los consumidores. Los fabricantes pronto abandonaron esta plataforma, que no les daba tanta libertad de personalización, y algunos apostaron por lanzar relojes con sistemas operativos propios, como Samsung con Tizen.
Google no lanzaba apenas actualizaciones relevantes, y tampoco sirvió de mucho el salto a Wear OS, que siguió difuminándose mientras los fabricantes iban cada uno a la suya. El Apple Watch aprovechaba esa situación y se convertía en referente absoluto de ese mercado.
Eso, no obstante, podría cambiar con esta nueva alianza entre Google y Samsung a la que se une Fitbit, que fue adquirida por Google en noviembre de 2019. Las tres colaborarán para crear relojes inteligentes más fluidos y con más autonomía que nunca, y está claro que esto mejora la situación para desarrolladores y también para usuarios, que podrían por fin ver relojes mucho más competitivos.
Se espera de hecho que el futuro Samsung Galaxy Watch basado en Wear aproveche esas ventajas y dé algunas sorpresas en materia de hardware, y lo que está claro es que si además Fitbit logra aportar esos importantes elementos dedicados a la salud y la cuantificación de la actividad física, tendremos con nosotros dispositivos mucho más atractivos. Veremos si este anuncio logra hacer que Wear se convierta por fin en todo lo que no ha podido ser durante estos últimos años.
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