“Tírala con el tuyo, que sale mejor”. Y lo guardas en el bolsillo, resignado, derrotado, consciente de que tu móvil no da la talla. Esta escena se repite en cada viaje de colegas, cada vacaciones familiares. Un móvil destaca sobre el resto y los demás saben, con cierta envidia o sin ella, que la tecnología juega a su favor. Porque la fotografía es un oficio de destreza, pero también de disponibilidad, de herramientas y de timings.
La foto cambió para siempre con la irrupción del digital. El cine, de hecho, también. Por muy conservadora que sea nuestra postura respecto a la cinematografía tradicional o la foto analógica, un creativo nunca hará ascos a una nueva herramienta. La tecnología existe para proponer soluciones y a más —y mejores— soluciones, más alternativas para crear.
Tras diez años trabajando para obtener la mejor cámara móvil posible, podemos decir que hay un fabricante que ha dado ese paso y ha desarrollado una nueva herramienta creativa. Hablamos del abrumador vivo X90 Pro, el hito prémium en telefonía que en cada análisis deja anonadados a los amantes de la foto.
Las mejores especificaciones, el mejor resultado
Ha pasado casi un año desde que el vivo X80 Pro sorprendiera a miles de miradas por sus capacidades fotográficas. Y, ahora, ya os podemos confirmar, el vivo X90 Pro fuerza cualquier límite y va mucho más allá de lo esperable. Por detrás, una trasera de cuero que evita las manchas y facilita el agarre; por delante, un pantallón de infarto basado en un panel AMOLED de 6,78 pulgadas, relación de aspecto de 20:9, 120Hz de refresco y resolución de 2.800 x 1.260 píxeles. Ahí es nada.
Por si fuera poco, el procesador más versátil del mercado, una gigantesca cámara con un sensor de imagen principal de 1 pulgada, una batería de 4.870 mAh con carga endiabladamente rápida de 120W que alcanza el 50 % en solo ocho minutos —y carga inalámbrica de 50W, para decir adiós definitivamente a los cables— y una pantalla inmersiva 3D que convierte a este smartphone en un centro de ocio, gaming o foto profesional. Tú eliges.
En fotografía existe una máxima: la buena foto no es mérito de la cámara, sino del fotógrafo. Pero esta es, como muchas, una tendencia sesgada. ¿Podría el mejor piloto de F1 del planeta ganar una sola carrera con el peor coche de la parrilla? Evidentemente, no. Sirvan ambas sentencias para reflejar lo obvio: si tu móvil tiene una mala cámara, rara vez podrás disfrutar de los resultados.
El vivo X90 Pro va mucho más allá de lo que entendemos por “buena cámara”. Solo hay que fijarse en esa “X” para tener la primera pista: la línea más ambiciosa de vivo. Este modelo representa la tercera iteración de una colaboración entre vivo y el prestigioso fabricante ZEISS, una de las empresas de mayor reconocimiento en el mundo de la fotografía. Tres años de desarrollo codo con codo.
Este nuevo modelo cuenta con un procesador de imagen propio, el vivo V2, alimentado por una versión personalizada del Dimensity 9200, el chip más potente jamás fabricado por MediaTek. Pero es que, por otro lado, también integra un gigantesco sensor de 1 pulgada, único en su especie. Lo mejor de ambos mundos: las mejores fotos vitaminadas con tecnología computacional, para conseguir resultados de primer nivel, incluso en escenas con poca luz, y la robustez de un hardware que garantiza unos resultados excelsos más allá de la IA.
Cuando una imagen ‘cuesta’ más que mil palabras
Las cámaras móviles parten de limitaciones evidentes: no pueden ser ni demasiado grandes ni demasiado costosas. Y ya se sabe, a menor coste, peores resultados. Las cámaras móviles recurren a lentes de plástico, con ajustes coherentes al tamaño del propio terminal. Por eso tiene tanto mérito lo conseguido con este vivo X90 Pro: un terminal estilizado, delgadísimo, pero capaz de montar un sensor IMX989 de 1 pulgada, el más grande hasta la fecha, bajo un módulo de siete lentes de plástico y una de cristal de alta transmitancia. Una réflex en tu bolsillo.
Este extra de tamaño permite una mayor apertura, mayor entrada de luz por píxel y, por tanto, una mayor capacidad de absorción lumínica. En fotografía, una de las grandes claves reside en la luz. La luz lo es todo: define el color, el contraste y afecta a todo lo demás. De hecho, esta cámara cuenta con un sensor principal de 50 megapíxeles con apertura de f/1,75.
Una auténtica burrada y un hito tecnológico que va más allá de lo evidente: el sensor principal se complementa con la cámara retrato —equipada con sensor IMX758 y apertura de f/1,6— y una cámara gran angular, con sensor IMX663 de 12 megapíxeles y apertura f/2,0, para corregir la distorsión en disparos tanto a larga como a distancia ultracorta.
Tampoco falta el estabilizador óptico de imagen (OIS), desarrollado como el zapato de Cenicienta, a medida de este terminal. No en vano, posee la categoría Nivel 4 de estabilización de imagen CIPA, según el “método de medición y descripción para el rendimiento de estabilización de imagen de cámaras digitales” internacional. Los resultados, por mucho que intentemos describirlos, hablan mejor por sí solos.
Una cámara profesional dentro de un ‘smartphone’ profesional
Pero profundicemos un poco más, porque el nuevo vivo X90 Pro no es un móvil con una cámara ‘pegada’. Es la unión perfecta entre las distintas partes. Cada detalle ha sido cuidado, como ese revestimiento T* de ZEISS que aumenta la sensibilidad para los disparos en fotografía nocturna y astrofotografía. Capturar un cielo estrellado es tan fácil como darle a grabar. Del resto se encarga la IA, la cual reconocerá el modo noche y realizará los ajustes de precisión, balance e ISO para obtener el resultado deseado.
La captura perfecta, sin estelas, sin retardos, tal y como la imaginas, es capturada por el sistema. Y mucho ojo al ZEISS Natural Color Display, el perfil que garantiza que los colores capturados son los que ves en pantalla. Por supuesto, podrás modificar la temperatura del color, pero también puedes estar seguro de que cada pantalla de cada vivo X90 Pro se calibra individualmente para que el rendimiento sea óptimo.
Potencia y control, salud y seguridad
Con una puntuación en el AnTuTu Benchmark de 1,26 millones de puntos, ten la tranquilidad de que el nuevo vivo X90 Pro va sobrado de potencia. Sumemos al procesador nada menos que 12 GB de RAM LPDDR5X y un almacenamiento UFS 4.0 de 256 GB, potenciados con RAM extendida 3.0 —la cual permite virtualizar hasta 8GB y convertirlos en una memoria virtual extra—, con el fin de acelerar y cubrir la demanda de cualquier proceso. Y ahí lo tienes: no hay multitarea que se resista. El rendimiento será fluido o no será.
Y bajo el capó de esta bestia se aloja el aliento del dragón: un sistema mejorado de refrigeración líquida de 24 capas con cámara de vapor, cubriendo un área total de 4.002 mm cuadrados, capaces de reducir drásticamente la temperatura cuando arranques algún juego exigente como ‘Genshin Impact’. La construcción del mismo, además, tiene en cuenta cómo lo coges, manteniendo frías las zonas donde las manos sujetan el teléfono y desviando y disipando hacia los marcos exteriores ese excedente de calor.
El despliegue de potencia se culmina con una batería de doble celda con capacidad de 4870 mAh y una carga rápida de 120 W. El 50 % de carga en ocho minutos y 10 segundos. No obstante, también cuenta con un modo equilibrado pensado para la carga diaria, diseñada con el fin de extender al máximo la durabilidad y vida útil de la batería. Y no tendrás que preocuparte por la seguridad de tu smartphone en ningún caso: la certificación TÜV Rheinland Safe Fast-Charge System garantiza que esta carga hiperrápida es segura.
Pero más allá del motor reside la salud, la eficiente. Por esto mismo, la pantalla de este vivo X90 Pro está fabricada con un material luminiscente Q9 que bloquea la mayor parte de luz azul y garantiza una eficiencia energética superior. La atenuación es suave y progresiva, los bordes curvos de efecto cascada dan sensación de infinitud y los altavoces de sonido envolvente culminan con una experiencia de cine en tu mano. Cualquier director de renombre lo desearía.
Esta pantalla no solo es capaz de reproducir 1.070 millones de colores, cubrir el 100 % del gamut DCI-P3 y sumar las certificaciones HDR10 y HDR10+. También cuenta con filtrado de protección ocular para baja luz azul, además de un ajuste de bajo desenfoque de movimiento y bajo parpadeo, lo que evita la vista cansada y el agotamiento general tras largos periodos de uso.
Y quienes utilizan el mismo dispositivo para trabajar y jugar o como teléfono multipropósito también agradecerán la capacidad del X90 Pro para alojar hasta 2 tarjetas SIM físicas o una SIM física y una eSIM. Puedes configurar la friolera de hasta 10 perfiles de eSIM dentro del mismo terminal.
Y podríamos seguir y seguir. Por ejemplo, hablando de sus tres micros con un condicionamiento acústico y filtrado de ruido perfecto o de ese vibrador háptico que lo transforma en una consola portátil idónea para jugar, ya sea de Xbox Cloud Gaming o cualquier otro servicio. Pero será mejor que seas tú quien descubra el vivo X90 Pro. Al fin y al cabo, ya es hora de tirar esa foto; de que seas tú quien lleve la batuta y quien tenga la última apuesta tecnológica en la mano.
Fotos y materiales | vivo
Ver 5 comentarios