Cuando nos toca sustituir un cartucho de tinta muchas veces nos podemos ver tentados de acudir a un producto que no sea original. Al fin y al cabo si comparamos sólo los precios del original frente a otros hay diferencia. Sin embargo calcular la diferencia de precio no es tan sencilla como parece, hay costes ocultos que debemos contabilizar. Vamos a ver 13 ventajas que no se tienen en cuenta de los cartuchos de tinta originales.
Porque no todo es tan sencillo como dividir el coste del cartucho de tinta por el número de páginas que nos permite imprimir, aunque en algunos de los consumibles que no son originales no siempre se incluye esta información y presuponer que es el mismo valor que en el original es un error. Además no todos tienen la misma calidad, ni los mismos precios, hay muchas variaciones dentro de lo que nos ofrece el mercado, remanufacturados, rellenados, compatibles, etc.
13 ventajas de los cartuchos de tinta originales
Vamos a ver alguna de las ventajas de los cartuchos originales, o de los costes ocultos de los que no lo son:
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Máximo aprovechamiento del consumible que imprime correctamente desde el principio hasta el fin del producto, algo que no suele ocurrir con los no originales, que empiezan a imprimir mal cuando tienen poca tinta, entre un 30 y un 15%. Esto tiene dos problemas, por un lado no podemos apurar el consumible hasta el final, y por otro, nos vemos obligados a repetir muchas impresiones que no se han efectuado correctamente, duplicando el gasto de tinta.
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Otro de los problemas que nos dan los cartuchos originales es que sabemos exactamente cuanta tinta nos queda, mientras que en los no originales no coincide lo que nos muestra con lo que realmente nos quedará, algo que nos obliga a tener siempre un pack extra para sustituir si no queremos vernos en un apuro. El chip de estos cartuchos no transmite siempre la información de forma correcta.
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Menores gastos de mantenimiento donde una parte importante de los problemas por los que tenemos que llamar a un servicio técnico son derivados del uso de cartuchos no originales, y los problemas de pérdida de tinta o tóner, impresión con manchas, etc. que pueden provocar.
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Siguiendo con el aspecto del mantenimiento, también tenemos que utilizar menos veces la autolimpieza que gasta tinta para limpiar los cabezales de residuos. Estos residuos que se pueden acumular en el cabezal son mucho más habituales en las tintas no originales, que no han pasado por todo el proceso de pruebas que si hicieron las tintas de los fabricantes originales, diseñados y optimizados para estos cabezales.
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Los fabricantes suelen ofrecer un programa de reciclado gratuito de cartuchos al que nos podemos asociar para que vengan a recoger los cartuchos que ya tenemos vacíos o se los enviemos sin ningún coste. Gran parte de estos plásticos se reutilizan para hacer nuevos cartuchos y las partes que no se pueden aprovechar son destruidos de forma respetuosa con el medioambiente.
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A la vez, muchos de los cartuchos de tinta de las impresoras se incluye el cabezal, por lo que si reutilizamos el cartucho, estamos reutilizando el cabezal más tiempo del aconsejado lo que tarde o temprano acaba por traer problemas. Una cartucho original, implica un nuevo cabezal de impresión.
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Los fabricantes de impresoras realizan un proceso de I+D+i para obtener la mayor calidad de las tintas, con pigmentos de alta calidad que dan una mayor viveza de colores, con negros más profundos y colores más vivos. Las tintas de los consumibles no originales son de una calidad mucho menor.
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Fruto de esta investigación, las tintas originales se fijan en la superficie del papel consiguiendo una mayor definición y más duración de las impresiones. Esto nos va a permitir que las imágenes y los textos resistan mejor el paso del tiempo, haciendo en muchos casos que no se tengan que repetir a los pocos días porque ha estado expuesto al sol y apenas se puede leer.
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Si buscamos una impresora rápida de nada nos servirá si luego tenemos que esperar a que luego se seque la tinta para manipular el documento. La rapidez de secado de los consumibles originales nos garantiza que no nos vamos a manchar las manos de tinta al manipularlo, algo que sobre todo si hay que dar el documento a terceros es muy importante.
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Los cartuchos XL tienen un menor coste por página por lo que si lo que buscamos es compaginar ahorro y calidad, sin duda, esta es la mejor opción. Además se gana en autonomía pues podemos imprimir un número de páginas mucho más alto sin tener que sustituir el cartucho.
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La garantía de los consumibles originales correctamente identificados por su número de serie cada uno de ellos, permite garantizarlos hasta que se agote la tinta o llegue la fecha del fin de la garantía. Esto nos da la tranquilidad de que si tenemos algún problema podemos acudir al fabricante a reclamar.
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En este sentido también es conveniente saber que los cartuchos de tinta originales preservan la garantía de la impresora, por lo que nuestra impresora no se verá dañada por el uso de estos componentes recargados o compatibles, que pueden hacer que se anule la garantía de la misma.
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No se secan al estar sellados herméticamente, algo que no ocurre siempre con los no originales, ya que al recargarlos pueden dejar poros y secarse la tinta, sobre todo si no se utiliza, a los pocos meses y evaporarse el líquido transmisor de los pigmentos teniendo que tirar el consumible al cabo de los pocos usos.
Desde luego si el motivo para utilizar cartuchos no originales, lo mejor es buscar una impresora que sea eficiente en el uso de tinta, buscando la mejor relación calidad precio y estableciendo políticas de ahorro de impresión. Si queréis conocer más acerca de las tintas originales desde el punto de vista de fabricantes os dejamos con esta infografía de HP para conocerlo:
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Esto es de lo que HP presume en calidad de tinta para impresoras
Imagen | innovate 360
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