El teletrabajo no es una moda pasajera, apareció en nuestras vidas como una situación impuesta, pero estamos aprendiendo a valorar muchas de las cosas positivas que trae bajo el brazo y nos están llevando a aprender a conciliar nuestra vida profesional y personal de la forma más óptima posible sin sacrificar la productividad. Quedan pocas dudas de que el teletrabajo ha llegado para quedarse.
Igualmente, ha generado un montón de necesidades que tenemos que cubrir, también nuevos hábitos que tenemos que encajar en nuestro estilo de vida. Es tarea de todos asimilar que se pueden realizar actividades laborales en casa, en las mejores condiciones, y para ello tenemos que saber rodearnos de los mejores dispositivos.