La muñeca hinchable de Leticia Sabater es tan sólo una muestra de lo que le espera a la industria

Antaño faro televisivo para toda una generación de pequeños españoles, Leticia Sabater emprendió un camino de no retorno hacia los márgenes más sórdidos e inexplicables de la cultura mediática española. Entre sus múltiples excentricidades recientes, hay una que destaca por encima de todas las demás: el lanzamiento de una muñeca hinchable de plástico que le replica y duplica para mayor goce de su fetiche consumidor.

Literalmente, el objetivo es que disfrutes con una imitación inanimada de Leticia Sabater.

¿Cómo? Según Fórmula TV, la autora intelectual de 'La Salchipapa' habría firmado un contrato con una empresa internacional dedicada a la producción y distribución de márketing personalizado. Entre los productos, destacan las "Leti muñecas", sofisticados productos que reproducen las líneas faciales y corpóreas de Sabater a tamaño real. No se especifica si será posible, ejem, practicar sexo con ellos, pero sí que servirán para hacer compañía, "dormir" o ver la tele juntos.

La tendencia. Cuenten o no con un carácter sexual, lo cierto es que la línea de "Leti muñecas" casaría a la perfección con las tendencias actuales de la industria. El negocio de las muñecas, ya sean de plástico o de silicona, vive un pequeño boom tecnológico. Ya hay empresas que comercializan réplicas de algunas estrellas del porno, y otras que se ofrecen a reconstruir a tu "amante fallecido" por un módico precio.

El virtuosismo técnico de numerosos fabricantes permite personalizar hasta un inquietante grado a muchas muñecas de lujo. Algunas se dedican específicamente a construir juguetes sexuales con el aspecto de adolescentes. Otras producen bocas femeninas que imitan a una felación. Tu imaginación transformada en un aparato de silicona de 40 kilos.

iSexo. A largo plazo, el sexo afronta dilemas trascendentales. ¿Qué pasará cuando la inteligencia artificial transforme a las tradicionales muñecas de plástico en auténticos robots sexuales? Este mismo año se presentó Real Doll X, un hito tecnológico capaz de proporcionarte sexo y charlas sucias, al tiempo que fraternal compañía. Las empresas chinas llevan años trabajando en muñecas que hablen, se muevan, te miren y sean, cada día, más parecidas a una mujer humana.

Es una carrera infinita hacia la imitación, hacia la sustitución. Es cuestión de tiempo que surjan más "iLeticias Sabater" más y más sofisticadas. Algunas de las imitaciones más avanzadas hoy, al menos en lo estético, guardan un inquietante parecido con una mujer real. Se pueden comprar en Amazon.

Lo legal. ¿Será legal? Pues es difícil de decir. Ahora mismo las legislaciones no contemplan el sexo con objetos. En París, por ejemplo, el ayuntamiento no pudo cerrar el primer prostíbulo de muñecas hinchables porque la ley no abarcaba a las prácticas sexuales con robots. Existen otros tantos en diversas ciudades (entre ellas Barcelona) y disocian definitivamente el aspecto humano del sexual. En Japón llevan años sumergidos en la dinámica.

Imagen: GTRES

Ver todos los comentarios en https://www.xataka.com

VER 0 Comentario

Portada de Xataka