Nexus 6, nuestra experiencia tras un mes de uso

Uno de los análisis más esperados de finales del pasado año fue el del Nexus 6. Y no era para menos. No estábamos ya ante un nuevo Nexus continuista sino que este modelo se adentraba en terrenos desconocidos para la gama.

Pasada la fase de la primera prueba, hemos estado probando de forma intensa y continuada el Nexus 6 para poder contaros lo que ha sido nuestra experiencia tras un mes de uso, un clásico ya en los análisis de los mejores smartphones en Xataka.

Nexus 6 y su tamaño

Aunque la clara tendencia de los terminales de gama alta va hacia diagonales muy grandes, no puedo dejar de admitir que el salto del Nexus a las seis pulgadas fue una sorpresa. Aunque se mantenía el modelo anterior en el mercado en su momento, a nivel competitivo, Google no dejaba más opción que las seis pulgadas si alguien quería un Nexus en sus manos. Incluso Apple con sus iPhone 6 y 6 Plus daba más opciones, quién lo iba a decir.

Esa debe ser pues una de las primeras cuestiones que alguien que se planta la compra del Nexus 6 debe tener en cuenta. Si optamos por él, debemos saber que estamos ante un terminal grande, especialmente problemático a nivel de anchura respecto a los rivales, pero a cuyo manejo uno acaba por acostumbrarse pronto. Solo hay que mentalizarse de que no es terminal para ser usado con una sola mano.

Si conseguimos interiorizar esta faceta, el peso o grosor también más grande que el de la competencia no nos afectará, porque llega un momento en la gama de smartphone de diagonal grande en que 10 gramos no afectan nada a la experiencia de usuario. Sí que lo hace en positivo en este caso la curvatura de la carcasa trasera, que mejora el comportamiento del Nexus 6 en mano.

Tras este mes usándolo de forma intensa, echamos de menos un agarre más fiable del terminal. Su anchura hace que, para usuarios con manos pequeñas, pensemos que le hubiera venido bien un acabado con más agarre que el plástico usado actualmente. Pese a ello, la ausencia de metal o cristal en la carcasa trasera no solo no nos parece un error sino que nos acaba por convencer el acabado del terminal.

Una pantalla a la que le falta brillar

Como muchos otros apartados de este Nexus 6, el precio más alto de lo habitual en las últimas generaciones marca definitivamente nuestra experiencia con él. La pantalla de seis pulgadas, SuperAMOLED y con resolución 1440p es bastante buena. Cumple a nivel de densidad, ángulos de visión, contraste y tan solo en color notamos una ligera tendencia a ofrecer contenidos en tonos cálidos. También su visualización es correcta en exteriores, pero en ningún momento podemos decir "wow" al mirarla.

Y actualmente, esa es una impresión que demandamos a un terminal que quiere estar entre los mejores. El brillo, de 300 nits, es insuficiente, y hace que la pantalla del Nexus 6 no luzca tan espectacular como debería tanto en interiores como en exteriores. Eso sí, luego uno se la pone frente a él para reproducir vídeo y la experiencia es muy satisfactoria.

A ello ayuda el sonido, muy potente y limpio gracias a la situación de los dos altavoces en el frontal. La lástima es que al sobresalir es fácil que acaben acumulando suciedad especialmente si sueles llevar el terminal en un bolsillo.

La batería es su peor característica

Un gama alta con lo máximo a nivel de especificaciones técnicas no nos ofrece ninguna duda en rendimiento. Y si encima tenemos a Android 5.0 de serie, con sus gran sistema de notificaciones, apariencia y sistema de accesos a los controles, mucho mejor.

La experiencia combinada del Nexus 6 con Android 5.0 no nos ha podido parecer mejor, y uno se acaba acostumbrando a que el diseño de la UI, pese a no estar plenamente adaptada a una pantalla tan grande ni tener ventajas en el formato phablet, luzca tan bien.

Todo fluye sin problemas hasta que que das cuenta de que, al contrario que sus teóricos rivales, la batería, pese a su capacidad, no es capaz de ofrecerte más allá de un día escaso de autonomía con el mismo uso y pese a su poco brillo de pantalla. Menos mal que tenemos la carga rápida que nos permite, entre otras cosas, tener un 50% de batería con apenas media hora de carga. Totalmente recomendable usar el que viene de serie y más vale que lo tengáis siempre cerca porque, si necesitas cargar el Nexus 6 desde cero con un cable USB conectado a un ordenador, la espera puede ser más que eterna.

Por ultimo os tengo que hablar de la cámara. Para pocos será realmente un problema excepto por dos aspectos: las escenas casi a oscuras, y sobre todo, la interfaz de serie, demasiado sencilla y sin posibilidad de hacer fotos en RAW, una característica de Android 5.0 que os recomiendo sacar adelante con aplicaciones de terceros.

Ver todos los comentarios en https://www.xataka.com

VER 91 Comentarios

Portada de Xataka