BlackBerry no quiere que con los coches le pase lo mismo que con los teléfonos y se prepara para pelear con Google

A BlackBerry la sacaron del mapa de los smartphones, ya eso parece que tiene poca solución a pesar de unos últimos coletazos bastante interesantes, como su acercamiento a Android con Priv. Pero la empresa canadiense tiene una larga historia y diferentes campos de actuación, como para seguir viviendo, muchos creemos que todavía hay capacidad de evolución.

Uno de esos territorios donde se siente fuerte es el de los coches, concretamente en lo que se conoce como “infotainment”, que podríamos describir como el hardware y software que da vida al sistema de navegación, entretenimiento, comunicación, e información que va empotrado en el salpicadero.

BlackBerry no le tiene miedo a Google, QNX se ha hecho necesario en la industria del automóvil

Podríamos decir que BlackBerry es líder en la industria del automóvil, como prácticamente lo era en el mercado de los teléfonos inteligentes, y casi sin darse cuenta le comieron la tostada.

La realidad es que ahora está muy bien posicionada, pero nuevos actores entran en juego con ganas de robarle terreno, esperemos que en esta ocasión sepa moverse mejor.

El núcleo de todo este asunto se llama QNX, un sistema operativo basado en Unix-like, que la empresa canadiense adquirió allá por 2010. Para hacernos una idea de la implantación de su plataforma, está presente en más de sesenta millones de vehículos que se vendieron el año pasado.


En la última década la gente de QNX y BlackBerry han estado picando piedra para colarse en sistemas bien conocidos en la industria, como por ejemplo el Sync de Ford, [Entune por parte de Toyota](

), o el [MyLink de General Motors](

). Todos ellos usan la plataforma de QNX. La tendencia es que cada vez más coches tengan una buena pantalla, independientemente de su precio, así que el negocio no va a parar de crecer.

Los puntos fuertes de QNX

En BlackBerry creo que ya reconocen a la competencia, y si no es así, mal van a empezar la contienda. Ellos venden su solución como robusta, rápida y segura - ya se habla de coches hackeados -, características que se repiten en la filosofía de la empresa canadiense. También presumen de cartera de patentes útiles en el desarrollo de un auto, y una red de empresas filiales especializadas en Internet de las cosas o cifrado.

Para mi su punto más destacado es que ya están ahí, con la relaciones montadas con los fabricantes de coches, y funcionando, sin el halo de versión beta que siempre cuelga sobre Android, y que en el mundo de los coches suena menos interesante. El problema es que esos mismos fabricantes también son socios de Apple o Google.

Google no necesita intermediarios

Curiosamente aquellos que vinieron a echarla de los móviles, son los mismos que lo quieren hacer en el coche - o al menos compartir negocio -. Google y Apple están como locas buscando la forma de entrar en nuestro automóvil, bien sea con soluciones intermedias en las que hace falta QNX para llegar hasta la pantalla del salpicadero, bien sea metiéndose directamente en el coche, como es el caso de Android Auto.

QNX se coló en más de 60 millones de coches nuevos durante 2014

Derek Kuhn, director de ventas de QNX ha declarado que las condiciones actuales son muy diferentes a las que vivieron años atrás.

Ellos ven a Apple y Google como socios, han estado trabajando juntos en la integración de CarPlay y Android en los coches de los grandes fabricantes, estableciendo lo que se conoce como un "espejo" de los teléfonos en el coche.

Lo dicho, a Google no le importa saltarse el elemento intermedio que es QNX, y montar directamente Android Auto en el coche. La primera prueba la tenemos en Honda, que está trabajando para que un catálogo tan vendido como el suyo - Accord, CR-V y Pilot -, utilice Android Auto, argumentando que hay una comunidad de desarrolladores muy potente detrás.


¿BlackBerry y el coche autónomo? En el CES 2016 tendremos novedades

El otro asunto a trabajar por todos los actores, y que Google tiene muy claro, es la independencia del teléfono. Ahora prácticamente se piensa en replicar la pantalla y servicios de nuestro smartphone en la pantalla del coche, cuando es posible que el coche en sí sea un elemento con aplicaciones y conectividad. Google va a incentivar el desarrollo en esta dirección.

Sobre los coches con asistencia, en el camino hacia la autonomía en la conducción, QNX también tiene algo que decir, pero claramente el mundo mira hacia Silicon Valley en este sentido. En el próximo CES 2016 nos van a presentar un coche conceptual en el que se implementa tecnología para hacer funcionar a coches autónomos, y podrán licenciar terceros.

Nos recuerdan que, aunque menos sonados, tienen proyectos con socios militares, médicos, especialistas en robótica, en los que se desarrollan sistemas autónomos, en los que no hay interacción por parte del ser humano.

QNX en la instrumentación


Vale, imaginamos que se tienen que repartir el mercado del infotainment con más propuestas, pues en esta ocasión van a intentar diversificar su oferta dentro del coche.

Allí donde se necesite potencia de proceso dentro del coche, QNX tendrá algo que decir

Un buen ejemplo está en la instrumentación digital de los vehículos: velocímetro, revoluciones, indicaciones, todo se muestra dibujado en una pantalla, nada de elementos físicos, a la larga más caros de producir y con mayores problemas en su ciclo de vida.

QNX ya ha presentado junto a Audi este tipo de solución en coches como el Audi TT o el R8, de carácter deportivo, pero se irá extendiendo a diferentes gamas y precios, por lo que ellos tendrán algo que decir en este nuevo negocio.

Más información | The Disruptors | QNX

Ver todos los comentarios en https://www.xataka.com

VER 16 Comentarios

Portada de Xataka