Hay veces que hay Óscar que son difíciles de repartir. La batalla suele estar reñida y en ese selecto club de actores, y actrices nominados se quedan fuera otros grandes. Sin embargo, en esa pelea por ganar el galardón hay unos protagonistas que nunca suben a recoger estatuillas ni entran en las quinielas de de muchos de vosotros.
¿Es por qué están muertos? No, para eso están los títulos póstumos. Hablamos de actores virtuales, o de actores de carne y hueco con un poco de modificación gracias, en ambos casos, a la mano creativa de un modelador 3D. Para nosotros hay siete actores que nunca subirán a recoger uno de estos premios al teatro Kodak de Los Ángeles pero no nos queda duda de que se los merece. Y el Óscar va para…
Siete actores que merecen un Óscar pero no podrían recogerlo ( 7 fotos)
Wall-E
Pixar arrasó en 2008 con Wall-E en el mundo de la animación. Hubo quienes lo intentaron pero el simpático, y algo averiado, robot no sólo limpiaba el mundo sino que también barrió a su competencia. Es cierto que sus diálogos no pasarán a la historia del cine pero su soberbia interpretación, así como sus derroches de carisma, bien le hubieran servido para ganar una estatuilla a mejor actor.
Gollum
El anillo único era su amado tesoro pero si en la Tierra Media repartieran Óscars seguro que a Gollum le hubiera encantado tener una estatuilla en su cueva. Es cierto que igual no daba la talla para ganar el de actor principal pero nos parece un candidato muy serio para ganar el de reparto.
Woody
Los vaqueros son tíos duros, se baten en duelos en mitad del desierto y buscan su fortuna y destino a lo largo del salvaje oeste. Sin embargo Woody es un poco atípico, quizá el hecho de que sea un juguete de trapo que repite frases cuando le tiras de una cuerda no le da ese toque chungo pero agallas nunca le han faltado para estar siempre con su dueño. Protagonista indiscutible de la trilogía de animación 3D más icónica
Número 5
El abuelo de Wall-E, del que aprendió algún que otro truco, nos deleitó a todos con Cortocircuito, dos delirantes comedias donde Número 5 se las veía en todo tipo de situaciones. Quizá su actuación era un poco torpe pero para ser un robot, hay que reconocerle el mérito de ponerse delante de la cámara a liarla parda.
King Kong
En Los Ángeles bien pueden dar gracias de que King Kong, el de Peter Jackson, no exista. Su entrada en escena sería todo un desastre y su actuación, poniendo todo para patas arriba, fue demoledora. Quizá la cinta no tenía lo suficiente para optar a los Óscar pero la actuación del mono más grande del mundo de la ficción, aunque anda cerca de los Ozaru de Bola de Dragón, bien se merece un Óscar.
Tintin
Detrás del Tintín de Steven Spielberg se escondía un actor de carne y hueso. El trabajo de animación y 3D fue excelente y bien las aventuras de este singular periodista se merecían un premio a semejante actuación y trabajo. Haddock también se hubiera ganado el reconocimiento por su excelente, aunque algo soez, papel secundario.
Roger Rabbit
En buen lío se metió Roger Rabbit. Una de las películas que mejor combinó la animación clásica con el rodaje convencional. ¿Sabías que los actores utilizaban una especie de peluche para representar al conejo? Un gran trabajo por todas las partes que bien podrían haber cuajado en un Óscar.
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