Soy el comentarista número 1 de Amazon: muchas noches en vela para escribir más de 2.000 opiniones

Soy el comentarista número 1 de Amazon: muchas noches en vela para escribir más de 2.000 opiniones

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Soy el comentarista número 1 de Amazon: muchas noches en vela para escribir más de 2.000 opiniones

Mucho antes de que Amazon desembarcase en España, cuando el nombre de la multinacional todavía era desconocido para la inmensa mayoría, Rafa García se dedicaba ya a escribir reseñas de productos en su blog personal. Hoy es el comentarista número 1 de Amazon en español. Con más de 2.000 opiniones y 19.300 votos útiles está a años luz del resto de revisores del ranking. La mayoría de las noches, tras un descanso fugaz, García —quien se mueve en Twitter y Youtube como Tester and Gamer— se levanta de madrugada para probar productos en su casa. Cuando se ha hecho una idea de su calidad se encasqueta los auriculares, selecciona un archivo de música clásica y teclea en un iPad sus impresiones sobre el último smartphone, taladro, olla, detergente, auriculares, altavoces... que ha testado. Cada una de sus palabras las devoran luego cientos de usuarios de Amazon que quieren despejar dudas antes de sacar la tarjeta de crédito.

La pasión de García por las reseñas se remonta a finales de los años 90, cuando era un veinteañero que vivía en una pequeño pueblo de Granada y escribía en un blog sus impresiones sobre los productos que compraba. De vez en cuando también dejaba opiniones en las páginas de Amazon en USA y UK.

“Recuerdo andar por distintos foros (moderando algunos) en los que la gente hacía preguntas muy repetitivas sobre cosas que yo había comprado, con las que trabajaba, tenía en casa o había tenido ocasión de probar con antelación, así que, cansado de responder los mensajes de los usuarios uno por uno, decidí escribir pequeños artículos en el blog y luego pasar los links a los foros para ahorrarme tiempo”, rememora García: “Descubrí que aquello me gustaba, no solo porque me satisfacía a mí mismo, sino porque me sentía muy realizado al ayudar a otras personas y recibir de ellos un feedback positivo. Me reconfortaba”.

Con el tiempo el trabajo le obligó a aparcar su afición. “Eran tiempos de mucha actividad y escribiendo para otros no pagaba las facturas, por lo que no podía compaginar ambas cosas. Decidí dejarlo por un tiempo”, comparte el actual comentarista Nº 1 de Amazon España. Ese parón terminó prolongándose más de lo que García había pensado en un principio. Mucho más, en realidad. “Un problema personal importante” lo sumió en una profunda depresión que lo lastró seis años durante los que tuvo que medicarse. La salida de aquel pozo que en apariencia carecía de fondo la encontró… ¡En el blog de reseñas que escribía cuando era veinteañero!

Un blog para salir del pozo de la depresión

“Cuando ya no veía salida me recomendaron un psicólogo diferente y después de contarle un poco mi vida me planteó la idea de que retomara aquel blog e hiciera lo que me gustaba”, explica. A modo de terapia y para “mantener la cabeza ocupada”, García volvió a escribir valoraciones de mercancías. No fue una tarea sencilla. Su economía estaba bajo mínimos, así que tuvo que centrarse en gadgets y componentes de poco valor. Del blog terminó pasando a la página de Amazon USA y UK, otro salto que tampoco le resultó fácil. “Mi inglés era pésimo, así que escribía con el traductor de Google. A veces recibía votos positivos y eso me ayudaba a sentirme útil de nuevo”.

Lo de escribir para usuarios que vivían en otro continente le resultaba sin embargo demasiado frío. “No empatizaba con alguien a miles de kilómetros de distancia”, recuerda. La solución llegó con el aterrizaje de Amazon en España, en 2011. “Abrió con un montón de productos baratos, sin aduanas y con una gran facilidad de compra. Ahora sí podía comprar a un clic de distancia productos que además no tenían comentarios” —relata García— “Hice de beta tester y retomé los consejos de mi psicólogo, pero en esta ocasión en mi propia lengua. Vi que la gente que me leía lo agradecía con votos útiles y comentarios. No solo me gustaba hacerlo. Sentía además que era útil para otras personas. Me estaba ayudando a mí mismo, pero también a otros que ya no tendrían que comprar a ciegas. Era una experiencia placentera y me ayudó a salir de la depresión”.

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Una de las opiniones elaboradas por Rafa García para Amazon.

Reseña a reseña, voto a voto, hace casi tres años García consiguió auparse a lo más alto del podio de comentaristas de Amazon. Alcanzar ese hito —explica— fue una satisfacción, pero no un objetivo que persiguiese ni al que aspirase. “Desde que tengo conocimiento del ranking creo que siempre estuve entre los diez primeros. Nunca le di demasiada importancia a pesar de que sobre mi nombre siempre hubiera una etiqueta que rezaba ‘Top 10 Comentaristas’. Mi intención nunca fue ser el 1º”.

Más de 2.000 reseñas en ocho años supone escribir alrededor de cinco a la semana. García, que desde hace una década reside en Málaga, está casado y tiene dos hijos pequeños —un niño de tres años y una niña de seis—, reconoce que no resulta fácil afrontar esa carga de trabajo. Aunque puede encadenar períodos muy intensos —durante los que escribe un artículo tras otro— con semanas en las que apenas coge su iPad, sí sigue algunas pautas. La principal es que siempre trabaja por las noches, vieja herencia de los 16 años que ejerció como DJ residente en una discoteca.

Durante el día García se dedica a cuidar del hogar y de sus dos retoños con la ayuda de su mujer, profesional de la hostelería. A él una serie de “negligencias médicas” le han limitado la movilidad de su mano derecha, un hándicap —lamenta el granadino— que le dificulta encontrar empleo.

García publicó más de 2.000 reseñas en ocho años, lo que arroja una media de cinco por semana. Para probar productos y escribir comentarios se levanta de madrugada después de un descanso fugaz de apenas cinco horas

“Compaginar la escritura de opiniones en Amazon y la vida familiar en ocasiones resulta complicado. Lo más difícil es conciliar los tiempos cuando mi mujer está”, comenta. Para no renunciar a su pasión por las reviews, García suele acostarse a las nueve de la noche —“como mis peques”, bromea— y levantarse al cabo de unas cinco horas, entre la una y media o las dos de la madrugada. “Entonces es cuando escribo, pruebo productos con más tranquilidad… Los fines de semana intento pasar más rato con mi esposa e hijos. Al final es todo una cuestión de prioridades. Puede que los horarios que llevo no sean saludables, pero es lo que me gusta hacer e intento que no afecte a mi familia. Mi mujer me ayuda muchísimo en esto y es el pilar fundamental, por lo que si algún día hubiese un conflicto lo dejaría”.

Curiosidad omnívora: del bricolaje a la música

En Amazon se pueden encontrar reseñas de García sobre dispositivos tecnológicos, productos del hogar y para la cocina, bricolaje, piezas de coche y moto… Incluso sobre mercancía para los más pequeños de casa. “Cuando abrió Amazon en España mis compras fueron casi en su totalidad en esta web, así que empecé a destacar evaluando los productos menos accesibles en tiendas físicas o que directamente eran demasiado caros en estas. Por entonces solían ser artículos de bebé que compraba para mis sobrinos, herramientas y electrónica de consumo”, anota.

¿Cómo puede un mismo comentarista escribir sobre temas tan diversos y escalar hasta lo más alto del TOP 10 de Amazon en España? En el caso de García la clave está en su infancia, en el ambiente que respiró en casa. “Mi personalidad e intereses siempre fueron marcados porque mi familia estaba llena de mentes maravillosas que me inculcaron conocimientos y valores sin los que a día de hoy no sería nadie”, confiesa el comentarista, quien se crió en un pequeño pueblo de Granada, en un hogar de clase media. “Las salidas laborables eran escasas, así que compaginé mis estudios de EGB ayudando a mis tíos en una empresa familiar que englobaba carpintería, mecánica, instalaciones y carpintería metálica. Me gustaba venir de clase, hacer los deberes y colaborar en lo que podía según mi edad”, recuerda.

“Empecé barriendo los talleres, ordenando herramientas… y de vez en cuando me dejaban hacer pequeños trabajos o ayudar. Así aprendí mecánica, algo de electricidad y fontanería, a soldar con máquinas de arco, trabajar la madera… Era un taller pequeño, pero se hacía de todo. Lo mejor era experimentar con todo aquel abanico de posibilidades cuando el taller estaba cerrado y no me veía nadie” —apunta el granadino al rememorar su infancia— “Además mi padre tenía una retro excavadora y desde pequeño me sentaba entre sus piernas para conducirla. Recuerdo sentirme el rey del mundo usando una máquina de nueve toneladas con solo ocho años mientras él estaba a mi lado. Eran otros tiempos”.

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Cajas de Amazon en casa de García tras recibir diferentes productos.

Gracias a uno de sus tíos, aficionado a la música y la electrónica, entró en contacto con el mundo de la radio. “Tenía una emisora FM casera de 2W y a veces me subía con él a poner vinilos para los escasísimos oyentes que teníamos, pero molaba saber que había alguien al otro lado”, anota García. Décadas después sentiría una emoción similar al colgar sus comentarios en Amazon y recibir las valoraciones de los usuarios. Aquellos pinitos con la radiodifusión le permitieron conocer los temas de Bob Dylan, Zeppelin, The Doors, AC/DC, Jimmi Hendrix, The Beatles, Lennon, Deep Purple, Creedence Clearwater Revival, Eagles, Rolling Stones, Scorpions, Queen… “Y un centenar de grupos que sigo escuchando con nostalgia”, apostilla.

Su curiosidad omnívora le llevó también a adentrarse en el mundo del radio control, el bricolaje, la música, el cine… Incluso el ajedrez, juego en el que García consiguió despuntar con 10 años al convertirse en subcampeón de Andalucía. Con la llegada de Internet su sed de saber se aguzó. Primero se dedicó a montar PCs modulares para sus vecinos y de allí pasó al gaming jugando a través de LAN a Age of Empires, Counter, Diablo, Half-Life… “Resumiendo, tengo muchos más hobbies e intereses, pero se podría decir que me encanta descubrir cosas, experimentar, probarlas y pasar por fases distintas que no me hagan sentir vacío en ningún momento”, explica el reviewer.

Durante su infancia en Granada, García se interesó por el bricolaje, la electrónica, el radio control, la música, la radiodifusión aficionada... Con solo 10 años se convirtió incluso en subcampeón de Andalucía de ajedrez

El afán por ampliar sus conocimientos no se reflejó sin embargo en las aulas. “Me interesaba por todo lo que fuera un cacharro con piezas móviles o cables y, en cierto modo, me llevó a que la enseñanza me aburriera sobremanera”, admite. A pesar de que terminó el primer curso de bachillerato con una nota media de 8,9, García dejó la escuela con 14 años. Tiempo después completó un módulo de electricidad y fontanería y empezó a trabajar en instalaciones. “Con los años aprendí a no dejar pasar oportunidades que pudieran aportarme algo”, añade.

A la hora de preparar sus comentarios García busca claridad y aportar información útil al usuario. “Se trata de dar tu punto de vista de un producto tal como lo percibes. En algunas reviews el cliente prefiere un texto técnico y en otras simplemente un feedback del producto. Tengo reviews de 20 o 30 palabras con decenas o cientos de votos y reviews con 15.000 palabras que no tienen ni uno solo. Hay que conectar con el comprador, ayudarle, serle de utilidad. Nadie tiene una fórmula para eso porque nunca sabes quién está leyéndote”, apostilla el granadino: “Al final, mantenerse todo este tiempo en el Top 10 no es más difícil que intentar ser, en la medida de lo posible, yo mismo”.

“Mis reviews no siguen un formato típico de una publicación especializada o un canal de Youtube. Son más viscerales y mucho menos técnicas. Intento no centrarme demasiado en las especificaciones, sino en la experiencia de uso. Siempre he pensado que las especificaciones ya se pueden leer en la parte correspondiente y solo tiene sentido nombrarlas si vas a explicar cómo usarlas para sacar de dudas a quien va a comprar el producto”, reflexiona. A pesar de sumar 2.000 opiniones, García está convencido de que le queda más del triple por comentar. “Llevo desde 2011 comprando en Amazon para mí, mi familia e incluso amigos y por eso consigo testar tanto”.

Antes de comprar algo en Amazon, García se documenta, lee reviews de otros compañeros, publicaciones especializadas y foros, ve vídeos… Al haber recibido feedak previo de otras fuentes cuando decide escribir una opinión intuye ya en buena medida qué se va a encontrar. Por esa razón —asegura— “es muy probable que mi opinión sea bastante positiva”.

El poder de un comentario

¿Significa eso que todas sus valoraciones respaldan el producto? “No siempre cumplen las expectativas. En ocasiones son demasiado nuevos, no tienes información o la opinión que te llevó a comprar era errónea o incompleta, por lo que es inevitable dejar comentarios negativos”, explica. A menudo son esos textos los que logran más votos —“estás avisando al usuario de que lo que va a adquirir es una mala compra y te lo va a agradecer”—, pero García insiste en la prudencia a la hora de testar. “Hay que tener en cuenta muchas variables. La principal es preguntarse quién va a emplear el producto y en ocasiones considerar la probabilidad de que el comprador no use bien el artículo. Una valoración negativa conlleva mucha responsabilidad. Puedes hundir un producto si la haces a la ligera”, zanja el comentarista número 1 de Amazon en España.

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García probando un artículo para elaborar una de sus reviews

¿Recibe García algún pago por dedicar horas y horas durante las noches a probar productos y plasmar luego sus experiencias en Amazon? Él asegura que no. Como reviewer del TOP 10 el granadino solo forma parte de Voces Vine, un programa lanzado por la firma de Jeff Bezos y que permite a los comentaristas más valorados testar artículos nuevos. “Amazon ofrece a los miembros de Vine productos gratis que nos envían los proveedores participantes. Las opiniones de Vine son independientes de los Voces Vine. El proveedor no puede influir en ellas ni modificarlas ni editarlas”, garantiza la empresa en su página web.

“Voces Vine me brinda la posibilidad de testar productos que por mi estatus económico o preferencias de compra nunca hubiera pensado en adquirir. Es una experiencia maravillosa porque tienes acceso a productos de nuevo lanzamiento o que no son populares, sea cual sea la categoría, y te dan la opción de probarlos y escribir sobre ellos para que otros clientes los conozcan”, comenta el granadino: “Y si te estás preguntando si el programa es efectivo te puedo decir de primera mano que sí. No solo ves cómo acercas el producto a clientes que confían en tu opinión para darle una oportunidad, que es la idea del programa. Si supieses la de productos que he conocido gracias a Vine… Y que tanto yo, como mis familiares y amigos empezamos a comprar de forma reiterada, te asombrarías”.

A pesar del tiempo que le resta, de las horas de sueño que sacrifica para testar nuevas mercancías, del esfuerzo de estar siempre pendiente de las novedades… García reconoce que la labor que hace en Amazon le llena, igual que el feedback que percibe de los usuarios. “Mi intención sigue siendo la de ayudar al comprador con todos los medios posibles”, remarca.

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