El pasado abril, tras un mes de confinamiento, se marcó un récord histórico en el uso de datos a través de internet. Se realizaron más videollamadas que nunca, más horas de streaming que nunca. Y se teletrabajó más que nunca. Se demostró la importancia de poseer un equipo informático en casa, a poder ser versátil y capaz. Los estudiantes tuvieron que adaptarse a una nueva forma de aprender y de estudiar. Y los padres tuvimos que, o bien ceder parte de nuestros PCs, o aprender a manejar equipos nuevos.
Pero el nuevo curso acaba de arrancar y la incertidumbre vuelve a los hogares. Web familia 2.0, EducamosCLM, eAprendizaje, EducaMadrid… da igual cuál sea el tuyo, seguiremos necesitando un buen ordenador para convivir con esta nueva normalidad educativa y laboral. ¿Un buen ordenador? Esto mismo vamos a tratar de resolver.
Eficiencia energética, conciencia ecológica
'La potencia sin control no sirve de nada', decía un viejo lema. Apostar por el equipo más potente del mercado no nos garantiza una conexión más rápida a través, por ejemplo, de Skype o Zoom. Muchas familias no podemos permitirnos equipos de gama alta y la realidad es que terminamos buscando un punto intermedio que resuelva dicha necesidad con solvencia durante, al menos, dos o tres años.
Como ya apuntó Jensen Huang, CEO y fundador de Nvidia, en los planes del fabricante no hay prisa por dar el salto a las GPUs de 7 nanómetros porque la prioridad de la empresa es ofrecer la mejor relación entre potencia y eficiencia. La arquitectura Turing de 12 nm ha demostrado serlo, al concentrar la mayor eficiencia del mercado actual, buen precio y, por supuesto, sin sacrificar un gasto energético innecesario.
De Tesla a Turing, de los 90nm a los actuales 12nm, hemos vivido una carrera tecnológica donde no solo la miniaturización ha sido determinante para la evolución de estos chipsets: también lo ha sido el diagrama arquitectónico de cada GPU y, más concretamente, de sus SM (Stream Multiprocessors).
Esta es la razón por la que Intel y Nvidia dominan el mercado actual con un 68% y un 73% en las cuotas de mercado: no se trata de buscar el benchmark más alto, sino de apostar por equipos de alto desempeño que sirvan para cualquier escenario. En la práctica necesitamos sistemas potentes, claro; también rentables.
Y esta es la razón por la cual la Nvidia GeForce GTX 1060 sigue siendo la tarjeta gráfica más popular durante los últimos dos años —tanto en la configuración de 3 GB GDDR5 como la de 6 GB GDDR5—, según los informes de uso en Steam, y muy por encima de otros rivales.
De la secundaria a la carrera
Si nos fijamos en la gráfica de más arriba daremos buena fe del salto de GTX a RTX. Un importante ahorro en la gestión de nuestro tiempo y nuestros recursos. Una de las tareas más tediosas en edición de vídeo está directamente relacionada con el tiempo. Esperar a que se importe una librería, esperar a que se renderice un clip.
Una espera que se ve reducida con este salto tecnológico y que afecta a todos los niveles: desde cargar un juego o un archivo de vídeo de algún compañero del trabajo, hasta las presentaciones que reciben nuestros hijos para su clase de Educación Física. El objetivo final está claro: maximizar la productividad y lograr una mayor eficiencia académica y laboral.
Además, ya no es que la tecnología sea algo completamente presente en nuestro día a día, es que la necesitamos. Los grados más desatendidos, aquellos que conectan a su vez con el mercado donde más vacantes existen, están relacionados con la programación, la ciencia e ingeniería de datos, desarrollador back-end / front-end y el desarrollo de soluciones Big Data.
Equipados con las GPU Quadro, los ProArt StudioBook One de Asus, por ejemplo, son equipos comunes en entornos como la ciencia de datos, el desarrollo de producto o la animación y 3D. Con cada portátil, además, una suscripción a Adobe Creative Cloud de regalo. Esta es la opción a tener en cuenta por todos aquellos estudiantes de grado o trabajadores que busquen músculo en procesamiento de cálculo. El atractivo Acer Nitro 5, que actualmente cuenta con una importante rebaja, es más que suficiente para estudiar y trabajar en la mayoría de escenarios.
Y, si buscamos una torre compacta de la vieja escuela, siempre podemos optar por alguna configuración como esta, un PcCom Gold equipado con una Nvidia RTX 2060 Super de 8GB y la garantía de sus 16GB de RAM y sus dos discos, el almacenamiento de un HDD de 1TB SATA3 y la velocidad de un SSD M.2 de 500GB. Una torre premontada, que nos ahorra quebraderos de cabeza, por un precio muy competitivo.
Hora de relajarse
No todo va a ser subir trabajos a Google Classroom y esperar la calificación. Hay que descansar y estos equipos se han diseñando mirando de reojo a la configuración en ultra de GTA V. Solo hace falta echar un ojo a la plataforma de streaming GeForce NOW o el dispositivo Nvidia Shield para entender esta filosofía: si un sistema es bueno para trabajar, también debe serlo para jugar.
Hablar de Nvidia es hacerlo de gráficas cinco estrellas, de equipos que responden igual de bien en edición y postproducción que jugando a títulos triple A con ray-tracing activado. Y sus gráficas más populares, como la RTX 2060 o la 2080, ahora mismo cuentan con importantes rebajas.
Aunque la verdadera rebaja reside en poder centralizar todas las tareas en un mismo sistema. Si terminamos comprando un portátil para el gaming, un convertible para trabajar pensando en cierta movilidad y un PC de escritorio para el uso diario, estaremos gastando mucho más —y no hablamos solo de dinero, también de espacio y energía— por algo que estos nuevos equipos basados en Nvidia Geforce ya nos brindan.
Si durante los primeros meses de confinamiento era habitual que los padres cedieran sus torres y laptops a los hijos para la tarea escolar, con uno de estos equipos no será extraño que la situación se invierta: estaremos deseando que nuestro hijo suelte el PC para ponernos a jugar.
