Francia vive su propio Mad Max: huelga de las refinerías, gasolineras cerradas y violencia por repostar

Francia vive su propio Mad Max: huelga de las refinerías, gasolineras cerradas y violencia por repostar
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Las estaciones de servicio de Francia están sumidas en el caos. El problema es evidente y preocupante: no hay gasolina. Una huelga en las refinerías del país galo está paralizando su actividad y, sobre todo, está dejando inquietantes imágenes de violencia. Esta sea la complicada situación que se vive en el país vecino.

Francia se enfrenta a un paro generalizado del país. No hay gasolina

Beneficios millonarios. Es lo que alegan los trabajadores de Exxon Mobil y TotalEnergies para mantener una huelga en las refinerías francesas que lleva en pie casi tres semanas. Según los huelguistas, las compañías están consiguiendo unos beneficios millonarios que no repercuten en los empleados, por ello exigen subidas de sueldo que alcanzan hasta el 10% en el caso de la CGT, el sindicato que está resultando más combativo, y primas de hasta 6.000 euros.

Las negociaciones entre sindicatos y compañías están siendo especialmente duras. En TF1 recogen que esta misma noche se ha propuesto una subida de un 7% y una primas de entre 3.000 y 6.000 euros para los trabajadores de TotalEnergies, lo que ha sido rechazado por la CGT y ven con buenos ojos otros sindicatos como CFE-CGC y CFDT.

A las calles. Al mismo tiempo, la izquierda francesa está animando a una movilización masiva de los trabajadores franceses. El próximo martes hay convocada diferentes huelgas y manifestaciones y el partido de Los Verdes ya se posiciona a favor de una huelga general. El objetivo es mejorar lo salarios de los empleados que sufren una inflación del 5,6% (datos de septiembre), la menor de toda la Unión Europea.

Medidas excepcionales. El Gobierno francés ha querido salir del paso de esta huelga con una polémica y dura medida: obligar a un número mínimo de empleados a abrir dos refinerías y ponerlas en marcha (una el martes y otra el jueves). La decisión, según los sindicatos, atenta contra el derecho a huelga y han avisado de duras consecuencias: "Les deseo suerte a los policías o a quien sea que venga para poner en marcha la refinería", han avisado desde CGT.

Además, el Gobierno también ha abierto la mano a que los transportistas de combustible puedan circular durante el fin de semana, cuando la norma actual no lo permite. Del mismo modo, han avisado de que los tiempos disponible referentes al trabajo y al descanso obligatorio serán más flexibles.

No hay gasolina. Pese a los pequeños avances en las negociaciones y las medidas extraordinarias, la huelga sigue siendo indefinida. Como resultado, esta misma semana se han llegado a parar seis de las siete refinerías con las que cuenta el país. En los últimos recuentos, una de cada tres estaciones de servicio están completamente desabastecidas.

Y el problema es mayor en regiones del norte o en París. En estos lugares, más del 50% de las estaciones de servicio carecen de combustibles que ofrecer a los clientes. El resultado son colas de horas y cientos de metros de vehículos que esperan su turno. Incluso en algunas ciudades ya ha empezado a aplicarse un estricto racionamiento de 30 litros por consumidor.

La tensión se dispara. Con miles de conductores afectados, las estaciones de servicio aplicando racionamientos y la policía supervisando el tanque del depósito para controlar la situación (aunque se trata de una medida ilegal), los nervios están a flor de piel y se han dado numerosas imágenes de violencia. Según una encuesta reciente, el 72% de los operadores de las gasolineras han sido testigos de alguna situación violenta o incívica. Incluso los bomberos han tenido que hacer un llamamiento en Twitter para recordar que no disponen de información de dónde hay carburantes disponibles.

Una situación que ha provocado que algunas personas comparen lo vivido con la serie El colapso, donde también se recogían situaciones de tensión en una gasolinera donde se aplicaban racionamientos.

Imagen: John Cameron

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