'¡García!', el superagente franquista de HBO Max, cumple con su misión: ayudar a la renovación del fantástico español

garcia
10 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail

Del mismo modo que es sencillo afirmar que no hay literalmente nada como '¡García!' en el audiovisual español actual, también es facil rastrear unos cuantos precedentes e influencias que nos ayudan a perfilarcómo funciona esta notabilísima producción recién aterrizada con sus dos capítulos iniciales a HBO Max. Para empezar está, cómo no, el extraordinario cómic de Santiago García y Luis Bustos, una especie de what if? con los mitos del tebeo español (¿y si Roberto de 'Roberto Alcázar y Pedrín' hubiera sido un superagente español auténtico?) y que lleva ya tres espectaculares volúmenes, con dos más en camino.

No es la primera vez que la propia HBO Max produce una serie de estas características. También con sus raíces firmemente imbuidas en el género fantástico está '30 monedas', que ya prepara su segunda temporada. También tenemos, como guionistas, a Sara Antuña y Carlos de Pando. Ambos son colaboradores habituales (estrenarán próximamente, en Prime Video, el thriller 'Sin huellas') y el segundo ha escrito casi una docena de episodios de 'El ministerio del tiempo', con la que '¡García!' tiene obvios paralelismos.

Y finalmente, la última fuerza creativa relevante tras la serie es Eugenio Mira, que la ha dirigido en su integridad. Mira debutó con una de las piezas de culto por excelencia del cine fantástico español reciente, 'The Birthday', y luego ha recalado en estimulantes proyectos como 'Grand Piano', aunque no se prodiga tanto como sería deseable. Mira tiene una puesta en escena absolutamente clásica, lo que beneficia a la serie, ya que permite que no se pase de sarcástica y que homenajes como el que da el pistoletazo de salida al cine de aventuras clásico funcionen mejor que si lo cargara de parodia.

Lejos de funcionar como un batiburrillo de influencias creativas, '¡García!' está perfecatmente definida y discurre con un propósito claro y sin titubeos. Es un poco el opuesto perfecto de la mencionada '30 monedas', que en cada episodio estrenaba un tono, una ambientación y un ritmo distintos (lo que a veces funcionaba en su favor y a veces no). '¡García!', al contrario, sabe muy bien lo que quiere desde su primer capítulo: contar una historia de superhéroes españoles con un punto irónico y una mirada crítica.

El Capitan América de España

'¡García!' nos lleva a una España casi idéntica a la actual: Antonia (Veki Velilla) es una joven periodista de investigación que descubre la existencia de un superagente criogenizado franquista, García (Francisco Ortiz) que se encuentra al despertar un país muy distinto al que él vivió. Ambos tendrán que detener una conspiración contra la democracia que arranca con el secuestro de una líder conservadora.

Aunque obviamente hay fantasía en la trama, es fácil detectar los referentes reales, de la periodista combativa millennial que es Antonia a la mediática política víctima del secuestro. Tal y como me comentó Mira cuando HBO Max preestrenó la serie hace unos meses, han intentado no escorarse políticamente en ninguna dirección, y '¡García!' tira a dar en todas direcciones, lo que le da un enfoque parcialmente distinto al cómic, pero igual de interesante.

Esa diferencia es posiblemente la más radical entre cómic y serie: la inaudita expresividad gráfica de Luis Bustos, que pasa con naturalidad y fluidez de la caricatura referencial al hiperrealismo o la acción más dinámica estilo manga se pierde por necesidad en la serie, que es justo en lo contrario (el pulso narrativo absolutamente clásico, claro y sin estridencias de Mira) donde halla su identidad. Dos productos distintos para un mismo personaje, que se complementan y dialogan entre sí.

Sin embargo, '¡García!' también funciona como ficción autónoma, y lo hace a las mil maravillas. Todo gracias a su ritmo constante y sin freno y a las extraordinarias interpretaciones de los dos actores (aunque el García del cómic tiene más carisma, posiblemente porque no teme resultar antipático, Veki Velilla hace una grandísima creación con Antonia). Pero sobre todo, a la constante sensación de que estamos ante un gran paso para la consolidación de un nuevo género fantástico en España con identidad propia.

Comentarios cerrados
Inicio